Especificaciones y análisis del Mazda Mazda6
Potencia
163CV
Par
360Nm
Consumo
5.4l/100
Emisiones
142g/km
0-100 km/h
9.2s
Vel. Máx.
212km/h
Peso
1555kg
Precio
29,025€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 5 puertas
510 L
64 L
120 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mazda 6 5p Sportive 2.2 CRTD 163 CV (2010-2011)
Descripción general
El Mazda6 de 2010, en su versión Sportive 2.2 CRTD de 163 CV, se presenta como una berlina de cinco puertas que combina la elegancia japonesa con un espíritu dinámico. Este modelo, con su motor diésel de 163 CV y cambio manual de seis velocidades, prometía una experiencia de conducción equilibrada y eficiente para la época. Su diseño, aunque discreto, escondía un interior espacioso y un equipamiento pensado para el confort y la seguridad.
Experiencia de conducción
Al volante del Mazda6 2.2 CRTD de 163 CV, la sensación es de control y aplomo. El motor diésel, con sus 163 CV y 360 Nm de par, ofrece una respuesta enérgica desde bajas revoluciones, permitiendo adelantamientos seguros y una conducción ágil tanto en ciudad como en carretera. La caja de cambios manual de seis velocidades es precisa y contribuye a una experiencia de conducción más conectada. La suspensión, de paralelogramo deformable en ambos ejes, filtra bien las irregularidades del terreno sin sacrificar la estabilidad, lo que se traduce en un confort notable para los ocupantes. La dirección, de cremallera, es directa y transmite confianza, haciendo que cada curva se disfrute. A pesar de su tamaño, el Mazda6 se siente sorprendentemente ágil, y su consumo combinado de 5.4 l/100km lo convierte en un compañero de viaje eficiente.
Diseño y estética
El diseño del Mazda6 de 2010 es una muestra de la filosofía 'Zoom-Zoom' de la marca, aunque con un toque más maduro y elegante. Sus líneas fluidas y su silueta aerodinámica le otorgan una presencia distinguida en la carretera. La carrocería de cinco puertas, con sus 4755 mm de longitud, 1795 mm de anchura y 1440 mm de altura, ofrece una estética equilibrada y funcional. Los detalles como las llantas de 18 pulgadas y los neumáticos 225/45 R18 le confieren un aspecto deportivo sin caer en excesos. El interior, aunque no es el más vanguardista, destaca por su ergonomía y la calidad de los materiales, creando un ambiente acogedor y funcional. El maletero, con 510 litros, es generoso y muy práctico para el día a día o para viajes largos.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Mazda6 de 2010 incorporaba soluciones avanzadas para su tiempo. El motor 2.2 CRTD de 163 CV, con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, era un ejemplo de eficiencia diésel. Aunque carecía de sistemas como el Stop&Start, su rendimiento y consumo eran competitivos. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados de 299 mm delante y discos de 280 mm detrás, garantizando una frenada eficaz. La suspensión independiente en ambos ejes y la dirección de cremallera contribuían a un comportamiento dinámico y seguro. En el interior, aunque no se especifican detalles de infoentretenimiento, es de esperar que contara con los sistemas de audio y conectividad habituales en la categoría, enfocados en la funcionalidad y la facilidad de uso.
Competencia
En el competitivo segmento de las berlinas medias, el Mazda6 de 2010 se enfrentaba a duros rivales como el Ford Mondeo, el Opel Insignia, el Volkswagen Passat o el Honda Accord. Frente a ellos, el Mazda6 destacaba por su equilibrio entre deportividad y confort, su fiabilidad mecánica y su diseño distintivo. Aunque quizás no ofrecía la misma imagen de prestigio que algunos de sus competidores alemanes, su propuesta de valor era muy sólida, ofreciendo una experiencia de conducción gratificante y un equipamiento completo a un precio competitivo.
Conclusión
El Mazda6 5p Sportive 2.2 CRTD de 163 CV de 2010 es una berlina que, a pesar del paso del tiempo, sigue siendo una opción interesante para quienes buscan un coche espacioso, fiable y con un toque de dinamismo. Su motor diésel ofrece un buen rendimiento y un consumo contenido, mientras que su chasis proporciona un equilibrio entre confort y agilidad. Su diseño atemporal y su interior funcional lo convierten en un compañero de viaje agradable y práctico. Es un coche que, sin grandes alardes, cumple con creces las expectativas, ofreciendo una experiencia de conducción satisfactoria y una calidad de construcción que inspira confianza.