Especificaciones y análisis del Mazda MX-5
Potencia
132CV
Par
152Nm
Consumo
6.3l/100
Emisiones
143g/km
0-100 km/h
8.3s
Vel. Máx.
204km/h
Peso
1061kg
Precio
26,120€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 6v
RWD
2 / 2 puertas
130 L
45 L
97 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mazda MX-5 ST 1.5 SKYACTIV-G 97 kW (132 CV) Zenith · 132 CV (2018-2020)
Descripción general
El Mazda MX-5 de 2019, en su versión Roadster 1.5 SKYACTIV-G de 132 CV con acabado Zenith, es la encarnación de la filosofía Jinba Ittai: la unión entre jinete y caballo. Este descapotable biplaza no busca la potencia bruta, sino la pureza de la conducción, ofreciendo una experiencia al volante que pocos vehículos modernos pueden igualar. Es un coche para los amantes de la carretera, para aquellos que valoran la ligereza, el equilibrio y la conexión con la máquina por encima de todo.
Experiencia de conducción
Conducir el MX-5 es una delicia para los sentidos. Su motor de 1.5 litros, aunque no es un derroche de caballos, sube de vueltas con alegría hasta las 7000 rpm, entregando 132 CV que se sienten mucho más gracias a su peso pluma de 1061 kg. La aceleración de 0 a 100 km/h en 8.3 segundos es respetable, pero lo que realmente enamora es la inmediatez de su respuesta, la precisión de su dirección asistida eléctrica y el tacto mecánico de su cambio manual de seis velocidades. Cada curva se convierte en una invitación a jugar, con una suspensión de paralelogramo deformable en ambos ejes que mantiene el coche pegado al asfalto y una frenada eficaz con discos ventilados delante. La tracción trasera es la guinda del pastel, permitiendo una conducción ágil y divertida, donde el conductor es el verdadero protagonista. Es un coche que te hace sentir vivo, que te conecta con la carretera de una manera visceral.
Diseño y estética
El diseño del Mazda MX-5 es atemporal y evocador. Sus líneas fluidas y compactas, con una longitud de apenas 3915 mm y una altura de 1225 mm, le otorgan una presencia deportiva y elegante. La versión Roadster, con su capota de lona, acentúa su carácter descapotable y la libertad que representa. El frontal es agresivo pero refinado, con faros afilados y una parrilla distintiva. La zaga es compacta y musculosa, con pilotos que refuerzan su imagen deportiva. En el interior, la simplicidad y la ergonomía son clave, con un habitáculo diseñado para el conductor, donde cada elemento está al alcance de la mano. Los materiales son de buena calidad y el ajuste es impecable, creando un ambiente acogedor y funcional.
Tecnología y características
A pesar de su enfoque purista en la conducción, el Mazda MX-5 incorpora la tecnología necesaria para el día a día. Su motor 1.5 SKYACTIV-G es un ejemplo de eficiencia, con inyección directa y una alta relación de compresión de 13:1, logrando un consumo combinado de 6.3 l/100km y emisiones de CO2 de 143 g/km, lo que le otorga la etiqueta C de la DGT. Aunque no cuenta con un sistema Stop&Start, su ligereza contribuye a su eficiencia. En cuanto a infoentretenimiento, el acabado Zenith suele incluir una pantalla táctil con conectividad, aunque el verdadero atractivo tecnológico reside en la ingeniería de su chasis y motor, optimizados para ofrecer el máximo placer de conducción con la mínima complejidad.
Competencia
El Mazda MX-5 tiene pocos rivales directos que ofrezcan una propuesta tan pura y accesible. Podríamos considerar al Fiat 124 Spider, que compartía plataforma y muchos componentes, pero con un motor turboalimentado y un carácter ligeramente diferente. Otros posibles competidores, aunque con un enfoque más premium o deportivo, serían el Audi TT Roadster o el BMW Z4, pero estos suelen tener un precio y una filosofía de conducción distintos, más orientados al confort o a la potencia bruta. El MX-5 se mantiene en una liga propia, como el descapotable deportivo ligero por excelencia.
Conclusión
El Mazda MX-5 Roadster 1.5 SKYACTIV-G de 132 CV Zenith de 2019 es un coche que no se compra con la cabeza, sino con el corazón. Es una máquina diseñada para disfrutar de cada kilómetro, para sentir el viento en la cara y la carretera bajo las ruedas. Su ligereza, su equilibrio y su motor atmosférico de altas revoluciones lo convierten en un clásico instantáneo, un coche que te recordará por qué te gusta conducir. Es la elección perfecta para aquellos que buscan un deportivo sin pretensiones, pero con un alma inmensa y una capacidad inigualable para arrancar sonrisas. Un verdadero icono que sigue evolucionando sin perder su esencia.




