Mercedes-Benz C 270 CDI Berlina Aut. · 170 CV (2002-2004)

2000
Gasóleo
RWD
Automático 5v
Mercedes-Benz Clase C - Vista 1
Mercedes-Benz Clase C - Vista 2
Mercedes-Benz Clase C - Vista 3
Mercedes-Benz Clase C - Vista 4

Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase C

Potencia

170CV

Par

400Nm

Consumo

7.1l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

9.1s

Vel. Máx.

225km/h

Peso

1585kg

Precio

40,167

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Automático 5v

Tracción

RWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

455 L

Depósito

70 L

Potencia

125 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima170 CV / 125 kW
Par máximo400 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónAutomático 5v

Capacidades

Depósito70 L
Maletero455 L

Análisis detallado del Mercedes-Benz C 270 CDI Berlina Aut. · 170 CV (2002-2004)

Descripción general

El Mercedes-Benz Clase C 270 CDI Berlina Aut. de 2000 es un vehículo que encarna la esencia de la ingeniería alemana, ofreciendo una combinación de lujo, rendimiento y eficiencia. Este modelo, con su motor diésel de 2.7 litros y 170 CV, se posiciona como una opción atractiva para aquellos que buscan un coche con carácter y la fiabilidad de la marca de la estrella.

Experiencia de conducción

Al volante del Clase C 270 CDI, la sensación es de solidez y aplomo. El motor diésel, con sus 170 CV y 400 Nm de par, empuja con contundencia desde bajas revoluciones, ofreciendo una aceleración de 0 a 100 km/h en 9.1 segundos y una velocidad máxima de 225 km/h. La transmisión automática de 5 velocidades gestiona la potencia con suavidad, contribuyendo a un viaje relajado y confortable. La suspensión, de tipo McPherson en el eje delantero y paralelogramo deformable en el trasero, filtra las irregularidades del terreno con maestría, mientras que la dirección de cremallera proporciona una buena conexión con la carretera. Es un coche que invita a devorar kilómetros con una sensación de seguridad y control.

Diseño y estética

El diseño del Mercedes-Benz Clase C de esta generación es un clásico atemporal. Sus líneas elegantes y proporcionadas, con una longitud de 4526 mm y una anchura de 1728 mm, le otorgan una presencia distinguida. La berlina de cuatro puertas ofrece un equilibrio perfecto entre deportividad y sofisticación, con detalles que reflejan la calidad y el buen gusto de la marca. El interior, aunque no se detalla en los datos, se espera que siga la misma línea de diseño funcional y materiales de alta calidad, característicos de Mercedes-Benz.

Tecnología y características

Bajo el capó, el Clase C 270 CDI incorpora un motor diésel de 5 cilindros y 2685 cc, con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler. Esta configuración tecnológica le permite entregar 170 CV a 4200 rpm y un impresionante par motor de 400 Nm a tan solo 1600 rpm. La transmisión automática de 5 velocidades, junto con la tracción trasera, asegura una entrega de potencia eficiente y un comportamiento dinámico. En cuanto a la seguridad, cuenta con frenos de disco ventilados de 300 mm en el eje delantero y discos de 290 mm en el trasero, garantizando una frenada eficaz. Su consumo combinado de 7.1 l/100km es notable para la época, reflejando una buena eficiencia para su potencia.

Competencia

En su segmento, el Mercedes-Benz Clase C 270 CDI se enfrentaba a duros competidores como el BMW Serie 3 y el Audi A4. Estos modelos ofrecían alternativas con diferentes enfoques en cuanto a deportividad y lujo, pero el Clase C destacaba por su equilibrio, su confort de marcha y la reputación de fiabilidad de Mercedes-Benz. Otros rivales podrían incluir el Volvo S60 o el Lexus IS, aunque con una menor presencia en el mercado europeo en ese momento.

Conclusión

El Mercedes-Benz Clase C 270 CDI Berlina Aut. de 2000 es un coche que, incluso hoy, sigue siendo una opción interesante para quienes valoran la calidad, el confort y un motor diésel potente y eficiente. Su diseño atemporal, su sólida construcción y su tecnología avanzada para la época lo convierten en un clásico moderno. Es un vehículo que ofrece una experiencia de conducción gratificante, ideal para viajes largos y para el día a día, manteniendo la elegancia y el prestigio asociados a la marca Mercedes-Benz.