Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase C
Potencia
102CV
Par
235Nm
Consumo
6.8l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
14.1s
Vel. Máx.
180km/h
Peso
1465kg
Precio
34,204€
Resumen técnico
Gasóleo
Automático 5v
RWD
5 / 5 puertas
464 L
62 L
75 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mercedes-Benz C 200 CDI Classic Familiar Aut. · 102 CV (2000-2001)
Descripción general
El Mercedes-Benz Clase C familiar 2,2 Diésel de 102 CV, un modelo que vio la luz entre 2000 y 2001, representa la esencia de la ingeniería alemana de finales del siglo XX. Con su carrocería familiar, este vehículo fue diseñado para aquellos que buscaban la practicidad sin renunciar al prestigio y la comodidad que solo Mercedes-Benz podía ofrecer en su segmento. Su motor diésel, aunque modesto en potencia para los estándares actuales, prometía una eficiencia y durabilidad que lo convirtieron en una opción atractiva para familias y profesionales por igual.
Experiencia de conducción
Al volante de este Clase C familiar, la sensación predominante es de solidez y confort. La suspensión, aunque no deportiva, absorbe las irregularidades del camino con una suavidad que invita a largos viajes. El motor diésel de 102 CV, acoplado a una transmisión automática de 5 velocidades, ofrece una respuesta progresiva y suficiente para el día a día, aunque no esperemos aceleraciones fulgurantes. La dirección es precisa y la insonorización del habitáculo contribuye a una experiencia de conducción relajada y placentera, típica de la marca de la estrella. Es un coche que transmite confianza y seguridad en cada kilómetro.
Diseño y estética
El diseño del Mercedes-Benz Clase C familiar de esta generación es un reflejo de la elegancia atemporal de la marca. Sus líneas son clásicas y funcionales, con una silueta que prioriza el espacio interior y la capacidad de carga sin sacrificar la estética. La parrilla frontal, con la icónica estrella de Mercedes-Benz, le otorga una presencia distinguida. Aunque no es un diseño que busque la espectacularidad, su sobriedad y proporciones equilibradas le confieren una belleza duradera que aún hoy se aprecia. El interior, con materiales de calidad y un diseño ergonómico, refuerza la sensación de un vehículo bien construido y pensado para el confort de sus ocupantes.
Tecnología y características
En su época, el Mercedes-Benz Clase C familiar incorporaba tecnología avanzada para su segmento. El motor diésel de inyección directa por conducto común, turbo e intercooler, era un ejemplo de eficiencia y rendimiento. La transmisión automática de 5 velocidades ofrecía cambios suaves y una gestión inteligente de la potencia. Aunque carece de las pantallas táctiles y los sistemas de asistencia a la conducción modernos, su tecnología se centraba en la fiabilidad mecánica y en ofrecer una experiencia de conducción segura y confortable. Los frenos de disco en ambos ejes y la dirección asistida eran elementos clave para su comportamiento dinámico.
Competencia
En el mercado de finales de los 90 y principios de los 2000, el Mercedes-Benz Clase C familiar competía con modelos de prestigio como el BMW Serie 3 Touring, el Audi A4 Avant y el Volvo V70. Frente a ellos, el Clase C destacaba por su reputación de fiabilidad, su confort de marcha y la calidad de sus acabados. Si bien otros rivales podían ofrecer una dinámica de conducción más deportiva o un diseño más atrevido, el Mercedes-Benz se posicionaba como la opción más equilibrada y tradicional para aquellos que valoraban la durabilidad y el estatus.
Conclusión
El Mercedes-Benz Clase C familiar 2,2 Diésel de 102 CV es un clásico moderno que aún hoy conserva su encanto. Es un coche que, a pesar de los años, sigue ofreciendo una experiencia de conducción gratificante, un confort notable y una practicidad innegable gracias a su carrocería familiar. Su fiabilidad mecánica y la calidad de construcción son testamento de la ingeniería de Mercedes-Benz. Para quienes buscan un vehículo con historia, carácter y la capacidad de seguir cumpliendo su función con dignidad, este Clase C familiar es una elección que evoca nostalgia y satisfacción.




