Mercedes-Benz CLC 220 CDI SportCoupé · 150 CV (2008-2010)

2008
Gasóleo
RWD
Manual 6v
Mercedes-Benz Clase CLC SportCoupé - Vista 1
Mercedes-Benz Clase CLC SportCoupé - Vista 2
Mercedes-Benz Clase CLC SportCoupé - Vista 3
Mercedes-Benz Clase CLC SportCoupé - Vista 4

Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase CLC SportCoupé

Potencia

150CV

Par

340Nm

Consumo

5.7l/100

Emisiones

151g/km

0-100 km/h

9.7s

Vel. Máx.

224km/h

Peso

1530kg

Precio

33,950

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 6v

Tracción

RWD

Plazas

4 / 3 puertas

Maletero

310 L

Depósito

62 L

Potencia

110 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima150 CV / 110 kW
Par máximo340 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 6v

Capacidades

Depósito62 L
Maletero310 L

Análisis detallado del Mercedes-Benz CLC 220 CDI SportCoupé · 150 CV (2008-2010)

Descripción general

El Mercedes-Benz CLC 220 CDI SportCoupé de 2008 es una propuesta audaz de la marca de la estrella, buscando ofrecer un coupé compacto con el distintivo lujo y la ingeniería alemana. Este modelo, con su motor diésel de 150 CV, se posiciona como una opción atractiva para quienes desean un vehículo con carácter deportivo y la eficiencia que un diésel puede ofrecer, todo ello envuelto en la sofisticación de Mercedes-Benz.

Experiencia de conducción

Al volante del CLC 220 CDI, la sensación es de solidez y control. El motor diésel de 150 CV, con sus 340 Nm de par, empuja con determinación desde bajas revoluciones, ofreciendo una respuesta enérgica que se traduce en una aceleración de 0 a 100 km/h en 9.7 segundos y una velocidad máxima de 224 km/h. La transmisión manual de 6 velocidades permite un control preciso, mientras que la tracción trasera añade un toque de deportividad. La suspensión, tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, junto con las barras estabilizadoras, proporciona un equilibrio entre confort y agilidad, absorbiendo las irregularidades del camino sin sacrificar la estabilidad en curvas. Es un coche que invita a disfrutar de la carretera, con una dirección precisa y una frenada eficaz gracias a sus discos ventilados delanteros y discos traseros.

Diseño y estética

El diseño del Mercedes-Benz CLC SportCoupé es inconfundiblemente Mercedes, pero con un aire más juvenil y dinámico. Sus 4452 mm de longitud, 1728 mm de anchura y 1405 mm de altura le confieren una silueta compacta y atlética. Las tres puertas acentúan su carácter coupé, mientras que los detalles estéticos, como la parrilla frontal y los faros, mantienen la elegancia característica de la marca. El interior, aunque con cuatro plazas, está diseñado para envolver a sus ocupantes en un ambiente de calidad, con materiales que evocan lujo y una ergonomía bien pensada. El maletero, con 310 litros, es suficiente para el uso diario, aunque su capacidad puede ser limitada para viajes largos con mucho equipaje.

Tecnología y características

En el corazón tecnológico del CLC 220 CDI se encuentra un motor diésel de 2.148 cc con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, que optimiza la entrega de potencia y la eficiencia. La culata de aluminio y el bloque de hierro son testimonio de la robustez de su ingeniería. Aunque no incorpora las últimas innovaciones en electrificación, su tecnología mecánica está diseñada para ofrecer un rendimiento fiable y un consumo combinado de 5.7 l/100km, con unas emisiones de CO2 de 151 g/km, lo que le otorga la etiqueta medioambiental B. La dirección de cremallera y los sistemas de frenado avanzados contribuyen a una experiencia de conducción segura y controlada.

Competencia

En el segmento de los coupés compactos premium, el Mercedes-Benz CLC 220 CDI SportCoupé se enfrentaba a competidores como el BMW Serie 1 Coupé o el Audi A3 de tres puertas, aunque este último con una filosofía más hatchback. Cada uno ofrecía su propia interpretación de deportividad y lujo, con el Mercedes destacando por su confort y la imagen de marca, mientras que el BMW podía ofrecer una experiencia de conducción más puramente deportiva. El CLC buscaba un equilibrio entre ambos mundos, con un toque de exclusividad.

Conclusión

El Mercedes-Benz CLC 220 CDI SportCoupé de 2008 es un coche que, a pesar de los años, sigue manteniendo su atractivo. Es una opción ideal para aquellos que buscan un coupé compacto con la calidad y el prestigio de Mercedes-Benz, un motor diésel eficiente y potente, y un diseño que no pasa desapercibido. Ofrece una experiencia de conducción gratificante, combinando el confort para el día a día con la capacidad de disfrutar de la carretera. Es un vehículo que, sin duda, sigue siendo una declaración de estilo y buen gusto.