Mercedes-Benz CLK 63 AMG Coupé · 481 CV (2008-2009)

2005
Gasolina
RWD
Automático 7v
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Mercedes-Benz Clase CLK - Vista 3
Mercedes-Benz Clase CLK - Vista 4

Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase CLK

Potencia

481CV

Par

630Nm

Consumo

14.2l/100

Emisiones

338g/km

0-100 km/h

4.6s

Vel. Máx.

250km/h

Peso

1755kg

Precio

101,250

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 7v

Tracción

RWD

Plazas

4 / 2 puertas

Maletero

435 L

Depósito

62 L

Potencia

354 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima481 CV / 354 kW
Par máximo630 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 7v

Capacidades

Depósito62 L
Maletero435 L

Análisis detallado del Mercedes-Benz CLK 63 AMG Coupé · 481 CV (2008-2009)

Descripción general

El Mercedes-Benz CLK 63 AMG Coupé de 2005 es una máquina que encarna la esencia de la deportividad y el lujo. Con su motor de 6.2 litros y 481 CV, este coupé no es solo un coche, es una declaración de intenciones. Su diseño atemporal y sus prestaciones de infarto lo convierten en un clásico instantáneo, un vehículo que sigue robando miradas y acelerando pulsos incluso años después de su lanzamiento. Es la combinación perfecta de elegancia y potencia bruta, un verdadero AMG que no deja indiferente a nadie.

Experiencia de conducción

Conducir el CLK 63 AMG es una experiencia visceral. El rugido de su motor V8 atmosférico es una sinfonía para los amantes de la gasolina, una banda sonora que te envuelve y te impulsa. La aceleración de 0 a 100 km/h en solo 4.6 segundos te pega al asiento, mientras que la velocidad máxima limitada a 250 km/h te recuerda que estás al volante de algo extraordinario. La dirección precisa y la suspensión deportiva te permiten sentir cada curva, cada imperfección del asfalto, conectándote de una manera íntima con la carretera. Es un coche que te exige, pero que te recompensa con una descarga de adrenalina pura y una sonrisa imborrable en la cara. La sensación de control y poder es abrumadora, pero siempre con la sofisticación que solo Mercedes-Benz puede ofrecer.

Diseño y estética

El diseño del Mercedes-Benz CLK 63 AMG Coupé es una obra de arte que fusiona la elegancia clásica de Mercedes con la agresividad inherente a AMG. Sus líneas fluidas y su silueta coupé son atemporales, mientras que los detalles específicos de AMG, como las llantas de 18 pulgadas, los paragolpes deportivos y las salidas de escape cuádruples, le otorgan una presencia imponente y musculosa. El frontal es dominado por la parrilla característica de Mercedes y los faros afilados, que le confieren una mirada decidida. En el interior, la deportividad se combina con el lujo, con asientos deportivos de cuero, inserciones de aluminio y un volante AMG que invitan a la conducción. Cada elemento está pensado para crear un ambiente exclusivo y emocionante, donde la calidad de los materiales y el cuidado por el detalle son palpables.

Tecnología y características

A pesar de ser un modelo de 2005, el CLK 63 AMG incorporaba tecnología avanzada para su época. Su motor V8 de 6.2 litros, desarrollado íntegramente por AMG, es una joya de la ingeniería, con inyección indirecta y admisión variable para optimizar el rendimiento. La transmisión automática de 7 velocidades, con su capacidad de gestionar la enorme potencia y par motor, ofrecía cambios rápidos y suaves, adaptándose a diferentes estilos de conducción. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados en ambos ejes, suspensión deportiva y un sistema de dirección de cremallera con asistencia eléctrica sensible a la velocidad, garantizando un control excepcional. Aunque no disponía de las pantallas táctiles y los asistentes de conducción modernos, su tecnología se centraba en la mecánica pura y en la experiencia de conducción, con un enfoque en la potencia y la precisión.

Competencia

En su momento, el Mercedes-Benz CLK 63 AMG Coupé se enfrentaba a rivales de la talla del BMW M3 E46 CSL, el Audi RS4 B7 y el Porsche 911 Carrera S. Cada uno ofrecía una propuesta diferente: el M3 destacaba por su agilidad y su motor de altas revoluciones, el RS4 por su tracción integral y su versatilidad, y el 911 por su pureza deportiva y su icónica configuración de motor trasero. Sin embargo, el CLK 63 AMG se distinguía por su combinación única de lujo, confort y una potencia bruta que pocos podían igualar. Era el coche para aquellos que buscaban un coupé deportivo de altas prestaciones sin renunciar a la sofisticación y el prestigio de Mercedes-Benz, un verdadero 'muscle car' europeo con un toque de distinción.

Conclusión

El Mercedes-Benz CLK 63 AMG Coupé de 2005 es mucho más que un coche; es una leyenda sobre ruedas. Su combinación de un diseño atemporal, un motor V8 atmosférico glorioso y unas prestaciones que aún hoy impresionan, lo convierten en un vehículo deseado por coleccionistas y entusiastas. Es un testimonio de la ingeniería de AMG en su máxima expresión, un coche que te hace sentir vivo cada vez que giras la llave. Si buscas un coupé deportivo con carácter, lujo y una banda sonora inolvidable, el CLK 63 AMG es una elección que no te defraudará. Es una pieza de la historia del automóvil que sigue emocionando y cautivando con su presencia y su rendimiento.