Mercedes-Benz CLS 55 AMG · 476 CV (2005-2006)

2005
Gasolina
RWD
Automático 5v
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Mercedes-Benz Clase CLS - Vista 3
Mercedes-Benz Clase CLS - Vista 4

Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase CLS

Potencia

476CV

Par

700Nm

Consumo

13.6l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

4.7s

Vel. Máx.

250km/h

Peso

1920kg

Precio

109,300

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 5v

Tracción

RWD

Plazas

4 / 4 puertas

Maletero

495 L

Depósito

80 L

Potencia

350 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima476 CV / 350 kW
Par máximo700 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 5v

Capacidades

Depósito80 L
Maletero495 L

Análisis detallado del Mercedes-Benz CLS 55 AMG · 476 CV (2005-2006)

Descripción general

El Mercedes-Benz CLS 55 AMG de 2005 es una declaración de intenciones, un coupé de cuatro puertas que desafía las convenciones y fusiona la elegancia de un sedán con la deportividad de un coupé. Este modelo, en su versión AMG, eleva la experiencia a un nivel superior, ofreciendo un rendimiento que quita el aliento y un lujo que envuelve. Es un coche para quienes buscan distinción y potencia sin compromisos, una obra de arte automotriz que sigue cautivando miradas y corazones.

Experiencia de conducción

Ponerse al volante del CLS 55 AMG es una experiencia visceral. El motor V8 de 5.4 litros, sobrealimentado, ruge con una melodía embriagadora al pisar el acelerador, catapultando el coche de 0 a 100 km/h en apenas 4.7 segundos. La entrega de potencia es instantánea y brutal, pegándote al asiento con cada aceleración. A pesar de su tamaño y peso, la suspensión deportiva y la dirección precisa ofrecen un control sorprendente, permitiendo trazar curvas con una confianza inusitada. Es un coche que te hace sentir vivo, que te conecta con la carretera de una manera profunda y emocionante, sin sacrificar el confort que se espera de un Mercedes-Benz de alta gama. Cada viaje se convierte en una aventura, una sinfonía de potencia y lujo.

Diseño y estética

El diseño del Mercedes-Benz CLS 55 AMG es, sin duda, su rasgo más distintivo y cautivador. Su silueta de coupé de cuatro puertas fue revolucionaria en su momento, rompiendo moldes y creando una nueva categoría. Las líneas fluidas y elegantes se combinan con una postura agresiva, acentuada por los elementos AMG como las llantas de 18 pulgadas, los faldones laterales y el parachoques delantero más deportivo. La caída del techo hacia la zaga le confiere una estética inconfundible, mientras que el interior es un santuario de lujo y sofisticación, con materiales de primera calidad y una ergonomía impecable. Es un coche que irradia presencia y exclusividad, una verdadera joya del diseño automotriz que ha envejecido con una gracia excepcional.

Tecnología y características

Bajo su elegante carrocería, el CLS 55 AMG esconde una impresionante cantidad de tecnología para su época. El corazón de la bestia es su motor V8 de 5.4 litros con compresor, que entrega 476 CV y un par motor de 700 Nm, gestionado por una transmisión automática de 5 velocidades que, aunque no es la más rápida de hoy en día, ofrece cambios suaves y precisos. La suspensión neumática adaptativa 'AIRMATIC DC' permite ajustar la altura y la firmeza, adaptándose a las condiciones de la carretera y al estilo de conducción. Los frenos de disco ventilados en ambos ejes garantizan una capacidad de detención formidable, mientras que sistemas como el control de estabilidad ESP y el control de tracción ASR velan por la seguridad. Aunque no cuenta con las pantallas táctiles y la conectividad de los coches modernos, su tecnología se centra en la mecánica y la dinámica de conducción, ofreciendo una experiencia pura y emocionante.

Competencia

En su lanzamiento, el Mercedes-Benz CLS 55 AMG se enfrentaba a un selecto grupo de rivales que, aunque no ofrecían exactamente el mismo concepto de coupé de cuatro puertas, competían en el segmento de las berlinas deportivas de lujo. Entre ellos se encontraban modelos como el BMW M5 (E60), con su motor V10 atmosférico y un enfoque más radical en la deportividad, o el Audi S6, que ofrecía tracción integral y un motor V10. También se podría considerar al Maserati Quattroporte, que aportaba un toque más exótico y pasional. Sin embargo, el CLS 55 AMG se distinguía por su combinación única de diseño vanguardista, lujo y un rendimiento brutal, creando un nicho propio en el mercado.

Conclusión

El Mercedes-Benz CLS 55 AMG de 2005 es mucho más que un coche; es una declaración de estilo, una proeza de ingeniería y una experiencia de conducción inolvidable. Su diseño atemporal, su motor V8 sobrealimentado y su interior lujoso lo convierten en un clásico moderno. Es un vehículo que te hace sentir especial cada vez que te pones al volante, combinando la elegancia de un coupé con la practicidad de cuatro puertas y el rendimiento de un superdeportivo. Para los amantes de los coches con carácter y alma, el CLS 55 AMG sigue siendo una opción fascinante y deseable, un testimonio de la época dorada de los motores de combustión.