Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase CLS
Potencia
387CV
Par
530Nm
Consumo
11.7l/100
Emisiones
280g/km
0-100 km/h
5.4s
Vel. Máx.
250km/h
Peso
1835kg
Precio
79,700€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 7v
RWD
4 / 4 puertas
495 L
80 L
285 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mercedes-Benz CLS 500 · 387 CV (2006-2008)
Descripción general
El Mercedes-Benz CLS 500 de 2006 es una declaración de intenciones, un coupé de cuatro puertas que desafía las convenciones y redefine el lujo deportivo. Con su motor V8 de 5.5 litros y 387 CV, este vehículo no solo promete un rendimiento excepcional, sino que también envuelve a sus ocupantes en una atmósfera de sofisticación y exclusividad. Es un coche que, desde el primer vistazo, te invita a experimentar la carretera de una manera diferente, combinando la elegancia de un coupé con la practicidad de una berlina.
Experiencia de conducción
Conducir el CLS 500 es una experiencia que despierta los sentidos. El motor V8, con sus 387 CV, ofrece una aceleración contundente, pasando de 0 a 100 km/h en solo 5.4 segundos. La entrega de potencia es suave pero implacable, acompañada de un sonido gutural que deleita a los amantes de los motores grandes. La suspensión, aunque firme para un coche de su categoría, filtra las irregularidades del asfalto con maestría, proporcionando un confort de marcha excepcional. La dirección, precisa y con asistencia variable, transmite confianza en cada curva, permitiendo disfrutar de una conducción dinámica sin sacrificar la comodidad. Es un coche que te hace sentir especial, poderoso y en control, una verdadera joya para los que buscan emociones al volante.
Diseño y estética
El diseño del Mercedes-Benz CLS 500 es, sin duda, su carta de presentación más impactante. Su silueta de coupé de cuatro puertas, con una línea de techo descendente y una cintura alta, le confiere una elegancia y una deportividad inigualables. Las proporciones son perfectas, con un capó largo y una zaga corta que acentúan su carácter dinámico. Los detalles cromados, las llantas de 18 pulgadas y los faros bi-xenón le otorgan una presencia imponente y sofisticada. En el interior, la calidad de los materiales y los acabados es excepcional, con cuero, madera y aluminio que crean un ambiente de lujo y confort. Los asientos, ergonómicos y con múltiples ajustes, garantizan una comodidad óptima incluso en viajes largos. Es un diseño que ha envejecido con una gracia admirable, manteniendo su atractivo y su distinción a lo largo de los años.
Tecnología y características
A pesar de ser un modelo de 2006, el CLS 500 incorporaba una tecnología avanzada para su época. El motor V8 de 5.5 litros, con inyección indirecta y admisión variable, era un prodigio de la ingeniería, ofreciendo una combinación de potencia y eficiencia. La transmisión automática de siete velocidades, 7G-TRONIC, garantizaba cambios de marcha suaves y rápidos, optimizando el rendimiento y el consumo. En cuanto a la seguridad, contaba con sistemas como el control de estabilidad ESP, el control de tracción ASR y múltiples airbags. El sistema de infoentretenimiento, aunque no tan avanzado como los actuales, ofrecía navegación, radio y conectividad básica. La dirección asistida sensible a la velocidad y la suspensión neumática Airmatic (opcional) contribuían a una experiencia de conducción superior, adaptándose a las condiciones de la carretera y al estilo de conducción.
Competencia
En su segmento, el Mercedes-Benz CLS 500 se enfrentaba a rivales de la talla del BMW Serie 6 Gran Coupé, el Audi A7 Sportback y el Porsche Panamera. Si bien estos modelos llegaron más tarde, el CLS fue pionero en el concepto de coupé de cuatro puertas, creando un nicho de mercado propio. Sus principales competidores directos en su momento eran berlinas de lujo de altas prestaciones como el BMW Serie 5 o el Audi A6, pero el CLS ofrecía un plus de exclusividad y estilo que lo diferenciaba claramente. Su combinación de diseño, lujo y rendimiento lo posicionaba como una opción única para aquellos que buscaban algo más que una berlina tradicional.
Conclusión
El Mercedes-Benz CLS 500 de 2006 es un coche que trasciende el tiempo. Su diseño atemporal, su potente motor V8 y su interior lujoso lo convierten en un clásico moderno. Es un vehículo que ofrece una experiencia de conducción emocionante y confortable, ideal para aquellos que valoran la exclusividad y el buen gusto. Aunque su consumo de combustible es elevado, es el precio a pagar por disfrutar de un motor tan glorioso y de una presencia tan imponente. Es un coche que te enamora desde el primer momento y que te sigue sorprendiendo con cada viaje, una verdadera obra de arte sobre ruedas que sigue siendo relevante hoy en día.