Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase E
Potencia
177CV
Par
240Nm
Consumo
10.3l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
9.4s
Vel. Máx.
232km/h
Peso
1570kg
Precio
46,063€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 5v
RWD
5 / 4 puertas
540 L
65 L
130 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mercedes-Benz E 240 Aut. · 177 CV (2002-2005)
Descripción general
El Mercedes-Benz Clase E 240 Aut. de 2002 es una berlina que encarna la esencia de la elegancia y la ingeniería alemana de principios de siglo. Con su motor de gasolina de 2.6 litros y 177 CV, acoplado a una transmisión automática de 5 velocidades, este vehículo prometía un viaje suave y distinguido, ideal para quienes buscaban confort y prestigio en cada desplazamiento. Su diseño atemporal y su enfoque en la calidad lo posicionaron como un referente en su segmento.
Experiencia de conducción
Al volante del Clase E 240 Aut., la sensación predominante es de aplomo y serenidad. La suspensión, con paralelogramo deformable tanto delante como detrás, filtra las irregularidades del camino con maestría, ofreciendo un confort de marcha excepcional. El motor V6, aunque no es un derroche de potencia bruta, entrega sus 177 CV de forma lineal y refinada, permitiendo una aceleración de 0 a 100 km/h en 9.4 segundos y una velocidad máxima de 232 km/h. La dirección de cremallera, aunque carece de la inmediatez de sistemas más deportivos, contribuye a una conducción relajada y predecible, perfecta para largos viajes. El consumo combinado de 10.3 l/100km es razonable para un coche de su tamaño y época, reflejando un equilibrio entre rendimiento y eficiencia.
Diseño y estética
El diseño del Mercedes-Benz Clase E de 2002 es un clásico instantáneo. Sus líneas fluidas y elegantes, con los característicos faros dobles ovalados, le otorgan una presencia imponente y sofisticada. Con una longitud de 4818 mm y una anchura de 1822 mm, su silueta es proporcionada y armoniosa. El interior, con capacidad para cinco ocupantes, destaca por la calidad de sus materiales y la ergonomía de sus controles, creando un ambiente de lujo discreto. El maletero de 540 litros es generoso, lo que subraya su vocación de gran rutero.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Clase E 240 Aut. de 2002 incorporaba soluciones avanzadas para su tiempo. Su motor de gasolina de 2.6 litros con inyección indirecta y admisión variable, junto con un bloque y culata de aluminio, demostraba un compromiso con la eficiencia y la durabilidad. La transmisión automática de 5 velocidades con convertidor de par aseguraba cambios suaves y una experiencia de conducción sin estrés. Aunque no contaba con las pantallas táctiles y la conectividad de los coches modernos, su equipamiento se centraba en la seguridad y el confort, con sistemas de frenado de disco ventilado en el eje delantero y discos sólidos en el trasero, y una dirección asistida que facilitaba las maniobras.
Competencia
En su época, el Mercedes-Benz Clase E 240 Aut. competía directamente con berlinas de lujo como el BMW Serie 5, el Audi A6 y el Lexus GS. Frente a ellos, el Clase E destacaba por su inigualable confort de marcha, su imagen de prestigio y su robustez. Mientras que el BMW Serie 5 ofrecía una experiencia de conducción más dinámica, y el Audi A6 se inclinaba por un diseño más sobrio, el Mercedes-Benz se mantenía fiel a su filosofía de lujo tradicional y fiabilidad probada, atrayendo a un público que valoraba la comodidad y la distinción por encima de todo.
Conclusión
El Mercedes-Benz Clase E 240 Aut. de 2002 es más que un coche; es una declaración de intenciones. Representa una época en la que la ingeniería alemana alcanzaba cotas de excelencia en confort, calidad y durabilidad. Aunque sus prestaciones no son las más deportivas, su refinamiento y su capacidad para devorar kilómetros con una suavidad envidiable lo convierten en una opción muy atractiva para quienes buscan un clásico moderno con un toque de distinción. Es un vehículo que, a pesar del paso del tiempo, sigue ofreciendo una experiencia de conducción gratificante y un aura de elegancia inconfundible.