Mercedes-Benz E 500 · 306 CV (2002-2003)

2002
Gasolina
RWD
Automático 5v
Mercedes-Benz Clase E - Vista 1
Mercedes-Benz Clase E - Vista 2
Mercedes-Benz Clase E - Vista 3
Mercedes-Benz Clase E - Vista 4

Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase E

Potencia

306CV

Par

460Nm

Consumo

11.5l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

6s

Vel. Máx.

250km/h

Peso

1725kg

Precio

65,600

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 5v

Tracción

RWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

530 L

Depósito

80 L

Potencia

225 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima306 CV / 225 kW
Par máximo460 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 5v

Capacidades

Depósito80 L
Maletero530 L

Análisis detallado del Mercedes-Benz E 500 · 306 CV (2002-2003)

Descripción general

El Mercedes-Benz E 500 de 2002 es una berlina que encarna la esencia del lujo y la potencia de la marca alemana. Con un motor V8 de 5.0 litros, este vehículo no solo prometía un rendimiento excepcional, sino también un confort y una sofisticación que lo situaban en la cúspide de su segmento. Su lanzamiento marcó un hito para aquellos que buscaban una experiencia de conducción superior, combinando la elegancia clásica de Mercedes con una mecánica robusta y avanzada para su época.

Experiencia de conducción

Conducir el E 500 es una experiencia que evoca una mezcla de poder y serenidad. El motor V8 de 306 CV responde con una suavidad impresionante, entregando una aceleración contundente que te pega al asiento, pasando de 0 a 100 km/h en solo 6 segundos. La dirección, asistida eléctricamente y sensible a la velocidad, ofrece una precisión que te permite sentir cada curva, mientras que la suspensión, con paralelogramo deformable en ambos ejes, filtra las imperfecciones del camino con una maestría que te hace flotar sobre el asfalto. Es un coche que te invita a devorar kilómetros con una sensación de control absoluto y un confort inigualable, ideal para largos viajes donde el cansancio parece no existir.

Diseño y estética

El diseño del Mercedes-Benz E 500 de 2002 es una declaración de intenciones. Sus líneas elegantes y fluidas, con una longitud de casi 4.82 metros y una anchura de 1.82 metros, le otorgan una presencia imponente y distinguida. Los faros dobles, característicos de la Clase E de la época, le confieren una mirada penetrante, mientras que la parrilla frontal, con la estrella de Mercedes presidiendo, es un símbolo de estatus. En el interior, la calidad de los materiales y el cuidado en los acabados son evidentes, con un habitáculo espacioso y ergonómico diseñado para envolver a sus ocupantes en un ambiente de lujo y bienestar. Cada detalle, desde los asientos hasta el salpicadero, está pensado para ofrecer una experiencia visual y táctil de primer nivel.

Tecnología y características

A pesar de ser un modelo de 2002, el E 500 incorporaba tecnología avanzada para su tiempo. Su motor V8 de 4966 cc, con inyección indirecta y admisión variable, era un prodigio de la ingeniería, ofreciendo una potencia de 306 CV y un par motor de 460 Nm desde bajas revoluciones. La transmisión automática de 5 velocidades, con convertidor de par, garantizaba cambios suaves y eficientes. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados de 330 mm delante y 300 mm detrás, proporcionando una capacidad de frenado excepcional. Aunque no disponía de las ayudas a la conducción actuales, su equipamiento de serie ya ofrecía un nivel de sofisticación que lo diferenciaba de sus competidores.

Competencia

En su época, el Mercedes-Benz E 500 se enfrentaba a rivales de la talla del BMW Serie 5 y el Audi A6, así como a modelos de marcas premium como Lexus. Sin embargo, el E 500 se distinguía por su combinación única de potencia, lujo y la reputación de fiabilidad de Mercedes-Benz. Su motor V8 le otorgaba una ventaja en rendimiento frente a muchas de sus alternativas, mientras que su diseño y confort interior lo mantenían en la cima de las preferencias de los compradores de berlinas de alta gama.

Conclusión

El Mercedes-Benz E 500 de 2002 es más que un coche; es una declaración de intenciones. Representa la cúspide de la ingeniería y el lujo de Mercedes-Benz en su momento, ofreciendo una experiencia de conducción que combina potencia, confort y una elegancia atemporal. Aunque los años han pasado, su encanto perdura, convirtiéndolo en un clásico moderno para aquellos que aprecian la calidad y el rendimiento sin compromisos. Es un vehículo que te invita a disfrutar de cada viaje, transformando el simple acto de conducir en una verdadera pasión.