Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase E
Potencia
170CV
Par
400Nm
Consumo
5.3l/100
Emisiones
138g/km
0-100 km/h
8.7s
Vel. Máx.
230km/h
Peso
1795kg
Precio
54,032€
Resumen técnico
Gasóleo
Automático 7v
RWD
4 / 2 puertas
390 L
66 L
125 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mercedes-Benz E 220 CDI BlueEFFICIENCY Cabrio Aut. · 170 CV (2012-2013)
Descripción general
El Mercedes-Benz Clase E Cabrio de 2010, en su versión E 220 CDI BlueEFFICIENCY, es una propuesta que combina la elegancia atemporal de la marca con la libertad de un descapotable. Este modelo, con su motor diésel de 170 CV y cambio automático de 7 velocidades, se posiciona como una opción sofisticada para quienes buscan disfrutar de la conducción a cielo abierto sin renunciar a la eficiencia y el confort característicos de Mercedes-Benz. Su diseño, aunque basado en la berlina, adquiere una personalidad propia al prescindir del techo fijo, invitando a viajes placenteros y con estilo.
Experiencia de conducción
Conducir el Clase E Cabrio es una experiencia que evoca tranquilidad y distinción. El motor diésel, aunque no es un prodigio de deportividad, entrega sus 170 CV de forma suave y progresiva, apoyado por un generoso par motor de 400 Nm disponible desde bajas revoluciones. La transmisión automática de 7 velocidades contribuye a una marcha fluida y sin interrupciones, ideal para cruceros largos. La suspensión, orientada al confort, filtra eficazmente las irregularidades del asfalto, mientras que la dirección hidráulica, aunque carece de la inmediatez de sistemas más modernos, ofrece una sensación de control predecible. Descapotado, el viento se convierte en un compañero de viaje, y el sonido del motor, aunque presente, no resulta intrusivo, permitiendo disfrutar del entorno. Es un coche para saborear el camino, no para batir récords en circuito.
Diseño y estética
El diseño del Mercedes-Benz Clase E Cabrio de 2010 es una declaración de elegancia y proporciones equilibradas. Hereda la sobriedad y la distinción de la Clase E berlina, pero la ausencia de techo le confiere una silueta más dinámica y atractiva. Las líneas fluidas y la parrilla frontal prominente, junto con los faros característicos de la época, le otorgan una presencia imponente. Con la capota de lona plegada, el coche revela un perfil limpio y armonioso, mientras que con ella puesta, mantiene una estética coupé muy lograda. El interior, con sus cuatro plazas, está diseñado con materiales de calidad y un acabado que transmite solidez y lujo discreto, fiel al estilo de la marca.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Clase E Cabrio de 2010 incorpora soluciones que, para su época, eran avanzadas y orientadas al confort y la seguridad. El motor diésel de 2.1 litros con inyección directa, turbo de geometría variable e intercooler, junto con la función Stop/Start, demuestra un compromiso con la eficiencia. La transmisión automática de 7 velocidades es un elemento clave para la suavidad de marcha. En cuanto a la seguridad, Mercedes-Benz siempre ha sido pionera, y este modelo no es una excepción, con un chasis bien resuelto y sistemas de frenado eficaces. Aunque no cuenta con las pantallas táctiles y la conectividad de los modelos actuales, su tecnología se centra en la funcionalidad y la fiabilidad.
Competencia
En su segmento, el Mercedes-Benz Clase E Cabrio de 2010 se enfrentaba a competidores de la talla del Audi A5 Cabrio y el BMW Serie 3 Cabrio. El Audi A5 ofrecía un diseño más moderno y una tracción integral opcional, mientras que el BMW Serie 3 destacaba por su enfoque más deportivo y su capota rígida retráctil. El Mercedes-Benz se diferenciaba por su mayor énfasis en el confort, la elegancia clásica y la suavidad de su motorización diésel, ofreciendo una alternativa más orientada al lujo y la experiencia de crucero relajado.
Conclusión
El Mercedes-Benz Clase E Cabrio E 220 CDI BlueEFFICIENCY de 2010 es un coche que, a pesar del paso del tiempo, mantiene su atractivo. Es una elección ideal para quienes valoran la elegancia, el confort y la posibilidad de disfrutar de la conducción a cielo abierto. Su motor diésel ofrece una buena combinación de prestaciones y eficiencia, y su diseño atemporal asegura que seguirá girando cabezas. Es un vehículo para disfrutar de los viajes, para sentir el aire y el sol, y para hacerlo con la distinción que solo un Mercedes-Benz puede ofrecer. Una máquina que invita a la evasión y al placer de conducir sin prisas.