Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase R
Potencia
231CV
Par
300Nm
Consumo
10.5l/100
Emisiones
246g/km
0-100 km/h
9.6s
Vel. Máx.
222km/h
Peso
2130kg
Precio
57,364€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 7v
RWD
5 / 5 puertas
550 L
80 L
170 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mercedes-Benz R 300 · 231 CV (2011)
Descripción general
El Mercedes-Benz Clase R 300 de 2010, en su versión corta, se presenta como una propuesta audaz y distintiva dentro del segmento de los vehículos familiares de lujo. Con un precio de 57.364 €, este modelo buscaba combinar la versatilidad de un monovolumen con la elegancia y el confort inherentes a la marca de la estrella. Su motor de gasolina de 3.0 litros y 231 CV, acoplado a una transmisión automática de 7 velocidades, prometía un rendimiento suave y refinado, ideal para viajes largos y el día a día familiar.
Experiencia de conducción
Al volante del Clase R 300, la sensación predominante es de aplomo y confort. La suspensión de paralelogramo deformable en ambos ejes, junto con la dirección asistida eléctrica sensible a la velocidad, filtra eficazmente las irregularidades del terreno, ofreciendo un viaje sereno y relajado. El motor de 231 CV, aunque no es un derroche de potencia para sus 2130 kg, entrega su fuerza de manera lineal y progresiva, permitiendo una aceleración de 0 a 100 km/h en 9.6 segundos. La transmisión automática de 7 velocidades contribuye a la suavidad general, realizando cambios imperceptibles. Sin embargo, su consumo combinado de 10.5 l/100km y unas emisiones de CO2 de 246 g/km reflejan un apetito considerable por el combustible, algo a tener en cuenta en la experiencia de uso.
Diseño y estética
El diseño del Mercedes-Benz Clase R 300 de 2010 es, sin duda, uno de sus puntos más característicos y divisivos. Con una longitud de 4922 mm y una anchura de 1922 mm, su silueta es imponente y poco convencional, a medio camino entre un monovolumen y un SUV. La versión corta, con 5 puertas y 5 asientos, ofrece una habitabilidad generosa y un maletero de 550 litros, ideal para familias. El interior, fiel al estilo Mercedes-Benz, destila calidad y sobriedad, con materiales nobles y un diseño ergonómico. Aunque su estética exterior puede no ser del agrado de todos, su funcionalidad y la sensación de espacio interior son innegables.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Clase R 300 incorpora soluciones propias de Mercedes-Benz para la época. Su motor de gasolina de 6 cilindros en V, con inyección indirecta y admisión variable, busca optimizar la entrega de potencia y la eficiencia dentro de sus posibilidades. La transmisión automática de 7 velocidades es un elemento clave para el confort de marcha. En cuanto a la seguridad y el confort, cuenta con frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, así como una dirección de cremallera con asistencia eléctrica. Aunque no incorpora las últimas innovaciones de conectividad o asistencia a la conducción que vemos hoy, su equipamiento es sólido y funcional para su segmento y año.
Competencia
En el mercado de 2010, el Mercedes-Benz Clase R 300 se enfrentaba a rivales complejos debido a su posicionamiento híbrido. Podría considerarse una alternativa a monovolúmenes de lujo como el Chrysler Grand Voyager o el Lancia Voyager, aunque con un enfoque más premium y dinámico. También competía indirectamente con SUVs de gran tamaño como el Audi Q7 o el BMW X5, aunque el Clase R priorizaba el espacio interior y el confort de marcha sobre las capacidades todoterreno. Su propuesta única lo hacía destacar, pero también dificultaba su encaje en categorías tradicionales.
Conclusión
El Mercedes-Benz Clase R 300 de 2010 es un vehículo que, a pesar de su particular diseño, ofrece una experiencia de conducción confortable y un espacio interior excepcional. Es una opción interesante para familias que buscan un coche premium, versátil y con la calidad intrínseca de Mercedes-Benz. Su motor de gasolina, aunque suave, implica un consumo elevado, lo que podría ser un factor a considerar. En definitiva, un coche que, si bien no fue un superventas, dejó una huella por su originalidad y su enfoque en el confort y la habitabilidad de lujo.




