Mercedes-Benz S 320 CDI · 197 CV (1998-2002)

1999
Gasóleo
RWD
Automático 5v
Mercedes-Benz Clase S - Vista 1
Mercedes-Benz Clase S - Vista 2
Mercedes-Benz Clase S - Vista 3
Mercedes-Benz Clase S - Vista 4

Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase S

Potencia

197CV

Par

470Nm

Consumo

8l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

8.8s

Vel. Máx.

230km/h

Peso

1905kg

Precio

66,150

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Automático 5v

Tracción

RWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

500 L

Depósito

88 L

Potencia

145 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima197 CV / 145 kW
Par máximo470 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónAutomático 5v

Capacidades

Depósito88 L
Maletero500 L

Análisis detallado del Mercedes-Benz S 320 CDI · 197 CV (1998-2002)

Descripción general

El Mercedes-Benz S 320 CDI de 1999 es la encarnación de la elegancia y la ingeniería alemana de finales del siglo XX. Este modelo, parte de la prestigiosa Clase S, se posicionó como un referente en el segmento de las berlinas de lujo, ofreciendo una combinación de confort, rendimiento y sofisticación que pocos podían igualar en su época. Su motor diésel de seis cilindros, una novedad para la serie, prometía eficiencia sin sacrificar la potencia que se espera de un Mercedes de esta categoría.

Experiencia de conducción

Al volante del S 320 CDI, la sensación es de absoluta autoridad y serenidad. El motor diésel de 197 CV, con su generoso par de 470 Nm disponible desde bajas revoluciones, empuja con una suavidad sorprendente, haciendo que los adelantamientos sean un mero trámite. La caja de cambios automática de cinco velocidades gestiona la potencia con una fluidez impecable, contribuyendo a una experiencia de conducción relajada y refinada. La suspensión, aunque firme, absorbe las irregularidades del asfalto con maestría, aislando a los ocupantes del mundo exterior. Es un coche diseñado para devorar kilómetros en autopista con el máximo confort, donde su aplomo y estabilidad brillan con luz propia. La dirección, precisa y con el peso justo, transmite confianza en todo momento, mientras que los frenos ventilados, tanto delanteros como traseros, garantizan una detención segura y eficaz.

Diseño y estética

El diseño del Mercedes-Benz S 320 CDI de 1999 es un clásico atemporal. Sus líneas fluidas y elegantes, con una silueta imponente pero no ostentosa, reflejan la filosofía de diseño de Mercedes-Benz de la época. La carrocería de 5038 mm de longitud y 1855 mm de anchura le confiere una presencia majestuosa en la carretera. Los detalles cromados sutiles y las llantas de 16 pulgadas, calzadas con neumáticos 225/60 R16 V, complementan su estética sofisticada. En el interior, la calidad de los materiales y los acabados es excepcional, con una ergonomía pensada para el máximo confort del conductor y los pasajeros. Cada elemento está cuidadosamente integrado, creando un ambiente de lujo y bienestar que invita a largos viajes.

Tecnología y características

A pesar de ser un modelo de 1999, el S 320 CDI incorporaba tecnología avanzada para su tiempo. Su motor diésel de 3.2 litros y seis cilindros en línea destacaba por su inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, elementos que contribuían a su eficiencia y rendimiento. La caja de cambios automática de cinco velocidades era un referente en suavidad y precisión. En cuanto a la seguridad, contaba con estabilizadores tanto en el eje delantero como en el trasero, y un sistema de frenos de disco ventilados de gran tamaño. Aunque no disponía de las pantallas táctiles y la conectividad actual, su equipamiento de confort y seguridad activa y pasiva era de primer nivel, sentando las bases para futuras innovaciones.

Competencia

En su segmento, el Mercedes-Benz S 320 CDI se enfrentaba a duros competidores como el BMW Serie 7, el Audi A8 y el Lexus LS. Cada uno de ellos ofrecía su propia interpretación del lujo y el rendimiento, pero el Clase S de Mercedes-Benz siempre se ha distinguido por su equilibrio entre confort, prestigio y una ingeniería robusta. El S 320 CDI, en particular, ofrecía una opción diésel potente y eficiente que lo diferenciaba de algunos de sus rivales, atrayendo a aquellos que buscaban un gran kilometraje sin renunciar al lujo.

Conclusión

El Mercedes-Benz S 320 CDI de 1999 es más que un coche; es una declaración de intenciones. Representa la cúspide de la ingeniería automotriz de su tiempo, ofreciendo una experiencia de conducción inigualable en términos de confort, suavidad y prestigio. Su diseño atemporal y su robusta mecánica lo convierten en un clásico moderno, capaz de seguir ofreciendo un placer de conducción excepcional. Es un vehículo para aquellos que aprecian la calidad, la elegancia y la ingeniería bien hecha, un verdadero icono de la automoción de lujo.