Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase SLK
Potencia
272CV
Par
350Nm
Consumo
10.6l/100
Emisiones
255g/km
0-100 km/h
5.6s
Vel. Máx.
250km/h
Peso
1465kg
Precio
51,400€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 6v
RWD
2 / 2 puertas
300 L
70 L
200 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mercedes-Benz SLK 350 · 272 CV (2004-2008)
Descripción general
El Mercedes-Benz SLK 350 de 2004 es un roadster que encapsula la esencia del lujo y la deportividad alemana. Con su motor V6 de 3.5 litros y 272 CV, este modelo no solo prometía un rendimiento emocionante, sino también la sofisticación y el confort que se esperan de la marca de la estrella. Su llegada al mercado marcó un punto de inflexión para los descapotables compactos, ofreciendo una experiencia de conducción apasionante y un diseño que no dejaba indiferente a nadie.
Experiencia de conducción
Conducir el SLK 350 es una experiencia visceral. El motor de 272 CV entrega una potencia contundente, capaz de catapultar el coche de 0 a 100 km/h en apenas 5.6 segundos. La respuesta del acelerador es inmediata y el sonido del V6 es una sinfonía para los amantes de la gasolina. La dirección, precisa y comunicativa, junto con una suspensión bien ajustada, permite disfrutar de cada curva con confianza. Es un coche que invita a la conducción deportiva, pero que también sabe ser un compañero cómodo para viajes largos, especialmente con el techo retráctil guardado, permitiendo sentir el viento y el sol. La velocidad máxima de 250 km/h, limitada electrónicamente, es un testimonio de su capacidad.
Diseño y estética
El diseño del Mercedes-Benz SLK 350 de 2004 es una obra de arte atemporal. Sus líneas fluidas y elegantes, combinadas con una postura agresiva, le otorgan una presencia inconfundible. El frontal, con la prominente estrella de Mercedes y los faros afilados, irradia deportividad. La silueta de roadster, con su capó largo y su trasera compacta, es perfectamente proporcionada. El techo duro retráctil, una de sus señas de identidad, se integra a la perfección en el diseño, transformando el coche de un coupé elegante a un descapotable seductor en cuestión de segundos. Las llantas de 17 pulgadas, con neumáticos de diferente medida en cada eje (225/45 R17 delante y 245/40 R17 detrás), refuerzan su carácter deportivo y su agarre al asfalto.
Tecnología y características
Aunque es un modelo de 2004, el SLK 350 incorporaba tecnología avanzada para su época. Su motor V6 de 3.5 litros con inyección indirecta y admisión variable era un prodigio de la ingeniería, ofreciendo un equilibrio entre potencia y eficiencia. La transmisión manual de 6 velocidades proporcionaba un control total sobre la entrega de potencia. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, además de sistemas de asistencia a la conducción que, aunque no tan sofisticados como los actuales, eran punteros en su momento. La suspensión de paralelogramo deformable en ambos ejes, junto con barras estabilizadoras, aseguraba un comportamiento dinámico excepcional. El techo duro retráctil, conocido como 'Vario-Roof', era una maravilla de la ingeniería, permitiendo disfrutar de lo mejor de ambos mundos: la seguridad de un coupé y la libertad de un descapotable.
Competencia
En su segmento, el Mercedes-Benz SLK 350 se enfrentaba a duros competidores. Sus principales rivales eran el BMW Z4 3.0i, con su motor de seis cilindros en línea y su enfoque más purista en la conducción, y el Porsche Boxster S, que ofrecía una experiencia de conducción aún más deportiva gracias a su motor central. Otros contendientes incluían el Audi TT Roadster, que destacaba por su diseño vanguardista y su tracción integral, y el Nissan 350Z Roadster, que ofrecía una potencia similar a un precio más competitivo. Cada uno de estos modelos tenía sus propias fortalezas, pero el SLK 350 se distinguía por su combinación de lujo, confort y deportividad, con el añadido de su innovador techo retráctil.
Conclusión
El Mercedes-Benz SLK 350 de 2004 es un coche que ha dejado una huella imborrable en el mundo de los roadsters. Su combinación de un diseño elegante, un motor potente y una experiencia de conducción emocionante lo convierte en un clásico moderno. Es un vehículo que no solo te lleva de un punto A a un punto B, sino que te hace disfrutar de cada kilómetro. Su capacidad para transformarse de coupé a descapotable con solo pulsar un botón añade un toque de versatilidad que pocos de sus rivales podían igualar. Para aquellos que buscan un coche deportivo con un toque de lujo y una historia rica, el SLK 350 sigue siendo una opción muy atractiva.
