Especificaciones y análisis del Mercedes-Benz Clase SLK
Potencia
421CV
Par
540Nm
Consumo
8.4l/100
Emisiones
195g/km
0-100 km/h
4.6s
Vel. Máx.
250km/h
Peso
1610kg
Precio
82,550€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 7v
RWD
2 / 2 puertas
335 L
70 L
310 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Mercedes-Benz SLK 55 AMG · 421 CV (2011-2012)
Descripción general
El Mercedes-Benz SLK 55 AMG de 2011 es una joya de la ingeniería alemana, un roadster que combina la elegancia de Mercedes con la potencia bruta de AMG. Este modelo, con su motor V8 de 5.5 litros y 421 CV, promete una experiencia de conducción inolvidable, un verdadero deportivo descapotable diseñado para emocionar.
Experiencia de conducción
Conducir el SLK 55 AMG es una sinfonía de sensaciones. El rugido del motor V8 al arrancar es pura adrenalina, una promesa de lo que está por venir. La aceleración de 0 a 100 km/h en solo 4.6 segundos te pega al asiento, mientras que la dirección precisa y la suspensión deportiva te invitan a devorar cada curva con confianza. Es un coche que te hace sentir vivo, conectado a la carretera, con el viento en el pelo y el sonido embriagador del escape como banda sonora. Cada viaje se convierte en una aventura, una oportunidad para liberar el espíritu deportivo que llevas dentro.
Diseño y estética
El diseño del SLK 55 AMG es una declaración de intenciones. Sus líneas afiladas y musculosas, la parrilla frontal agresiva y las llantas de aleación de 18 pulgadas no dejan lugar a dudas sobre su carácter deportivo. Es un coche que irradia potencia y sofisticación, con una silueta que evoca velocidad incluso cuando está parado. El interior, aunque compacto, está diseñado con la calidad y el lujo que se esperan de Mercedes-Benz, con asientos deportivos que te abrazan y un salpicadero orientado al conductor que te sumerge en la experiencia de conducción. Es un equilibrio perfecto entre elegancia y deportividad.
Tecnología y características
Bajo su piel deportiva, el SLK 55 AMG incorpora tecnología de vanguardia para su época. Su motor V8 de 5.5 litros con inyección directa y admisión variable es una obra maestra de la ingeniería, ofreciendo una potencia impresionante con una eficiencia sorprendente para un propulsor de estas características. La transmisión automática de 7 velocidades con convertidor de par garantiza cambios rápidos y suaves, optimizando tanto el rendimiento como el confort. Además, cuenta con un sistema de dirección asistida hidráulica sensible a la velocidad que proporciona una respuesta precisa y una sensación de control inigualable. La tecnología de frenado, con discos ventilados de gran tamaño, asegura una detención potente y segura, incluso en las condiciones más exigentes.
Competencia
En el segmento de los roadsters deportivos de lujo, el Mercedes-Benz SLK 55 AMG se enfrentaba a duros competidores como el Porsche Boxster S, el BMW Z4 M Roadster y el Audi TT RS Roadster. Cada uno ofrecía su propia interpretación de la deportividad descapotable, pero el SLK 55 AMG se distinguía por su potente motor V8 atmosférico, su sonido inconfundible y la combinación única de lujo y rendimiento que solo Mercedes-AMG podía ofrecer. Era una opción para aquellos que buscaban una experiencia de conducción más visceral y un toque de exclusividad.
Conclusión
El Mercedes-Benz SLK 55 AMG de 2011 es más que un coche; es una experiencia. Es la fusión perfecta de la elegancia de Mercedes-Benz y la potencia desatada de AMG, un roadster que te invita a disfrutar de cada kilómetro con pasión. Su diseño atemporal, su motor V8 embriagador y su comportamiento dinámico lo convierten en un clásico instantáneo, un coche que sigue emocionando y cautivando a quienes tienen el privilegio de conducirlo. Es una máquina diseñada para los amantes de la conducción pura, aquellos que buscan sensaciones fuertes y un toque de exclusividad en cada viaje.