Especificaciones y análisis del MG ZR
Potencia
101CV
Par
240Nm
Consumo
5.2l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
10.4s
Vel. Máx.
183km/h
Peso
1230kg
Precio
17,850€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
304 L
50 L
74 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del MG ZR 2.0 D + 5p (100CV) · 101 CV (2002-2004)
Descripción general
El MG ZR 2.0 D de 2002 es un compacto que, a pesar de su motor diésel, buscaba ofrecer un toque deportivo y juvenil. Con 101 CV, se posicionaba como una opción interesante para quienes buscaban un coche con carácter sin renunciar a la eficiencia del gasóleo. Su precio de 17.850 euros lo situaba en un segmento competitivo, donde debía destacar por su personalidad.
Experiencia de conducción
Al volante del MG ZR 2.0 D, las sensaciones son de un coche ágil y con una respuesta enérgica, especialmente en el rango medio de revoluciones gracias a su turbo. La dirección es directa y la suspensión, aunque firme, no llega a ser incómoda, permitiendo disfrutar de una conducción dinámica. La aceleración de 0 a 100 km/h en 10.4 segundos y una velocidad máxima de 183 km/h, para un diésel de su época, eran cifras respetables que invitaban a una conducción divertida. El sonido del motor, aunque diésel, no era excesivamente intrusivo, y el consumo combinado de 5.2 l/100km lo hacía atractivo para el uso diario.
Diseño y estética
El diseño del MG ZR es inconfundiblemente deportivo, con líneas afiladas y una estética que lo diferenciaba de sus rivales más sobrios. Sus 5 puertas le otorgaban practicidad, pero sin perder ese aire juvenil y agresivo que buscaba la marca. Las llantas de 16 pulgadas con neumáticos 205/50 R16 contribuían a su imagen robusta y a su buen agarre en carretera. A pesar de sus dimensiones compactas (4011 mm de largo, 1690 mm de ancho y 1400 mm de alto), su presencia en la carretera era notable.
Tecnología y características
En cuanto a tecnología, el MG ZR 2.0 D de 2002 ofrecía lo esperable para su segmento y época. Su motor diésel de 1994 cc con inyección directa, turbo e intercooler era un punto fuerte, proporcionando un buen equilibrio entre rendimiento y eficiencia. La transmisión manual de 5 velocidades era precisa y contribuía a la sensación de control. En el chasis, destacaban la suspensión McPherson delantera y la de rueda tirada con elemento torsional trasera, ambas con barras estabilizadoras, que aseguraban un comportamiento dinámico. Los frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros garantizaban una frenada eficaz.
Competencia
En su momento, el MG ZR 2.0 D se enfrentaba a rivales como el Ford Focus, el Opel Astra o el Volkswagen Golf, todos ellos con versiones diésel que ofrecían un buen rendimiento. Sin embargo, el MG ZR se desmarcaba por su enfoque más deportivo y su estética más atrevida, buscando atraer a un público que valoraba la diferenciación y un toque de exclusividad. Su relación calidad-precio, con un equipamiento competitivo, también era un factor a tener en cuenta frente a sus competidores más establecidos.
Conclusión
El MG ZR 2.0 D de 2002 fue un coche con personalidad, que supo combinar la eficiencia de un motor diésel con un espíritu deportivo. Su diseño llamativo y su comportamiento dinámico lo convertían en una opción atractiva para aquellos que buscaban algo diferente en el segmento de los compactos. Aunque no era el más refinado ni el más espacioso, supo ganarse un hueco en el mercado gracias a su carácter y a la diversión que ofrecía al volante. Un coche que, sin duda, dejó huella en su época.