Especificaciones y análisis del Nissan GT-R
Potencia
480CV
Par
588Nm
Consumo
12.2l/100
Emisiones
298g/km
0-100 km/h
3.5s
Vel. Máx.
310km/h
Peso
1815kg
Precio
79,900€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 6v
AWD
4 / 2 puertas
315 L
71 L
353 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Nissan GT-R · 480 CV (2008)
Descripción general
El Nissan GT-R de 2008 irrumpió en la escena automotriz como un verdadero 'matagigantes', desafiando a deportivos de élite con una propuesta de valor inigualable. Este coupé de 480 CV, con su tracción integral y cambio automático de doble embrague, prometía prestaciones de infarto a un precio sorprendentemente accesible. No era solo un coche, era una declaración de intenciones de Nissan, demostrando que la ingeniería japonesa podía competir de tú a tú con lo mejor de Europa.
Experiencia de conducción
Ponerse al volante del GT-R de 2008 es una experiencia visceral. La aceleración de 0 a 100 km/h en apenas 3.5 segundos te pega al asiento con una fuerza brutal, mientras el motor V6 biturbo ruge con una banda sonora adictiva. La dirección es precisa y la tracción total te permite exprimir cada caballo con una confianza asombrosa, incluso en las curvas más exigentes. Es un coche que te hace sentir invencible, una máquina diseñada para devorar asfalto y emociones fuertes. La suspensión, aunque firme, ofrece un equilibrio sorprendente para un coche de sus capacidades, permitiendo disfrutar tanto en circuito como en carretera abierta, aunque siempre con un carácter deportivo innegable.
Diseño y estética
El diseño del Nissan GT-R de 2008 es inconfundiblemente agresivo y funcional. Sus líneas musculosas y angulosas no buscan la belleza clásica, sino la eficiencia aerodinámica y la presencia imponente. El frontal con sus grandes tomas de aire, los pasos de rueda ensanchados y la característica zaga con sus cuatro pilotos redondos y el alerón prominente, todo contribuye a una estética que grita rendimiento. En el interior, la funcionalidad prima sobre el lujo, con una disposición orientada al conductor y materiales robustos, aunque con detalles que denotan su estatus de deportivo de alto rendimiento.
Tecnología y características
El GT-R de 2008 fue un escaparate tecnológico. Su motor V6 de 3.8 litros biturbo, ensamblado a mano, era una obra de ingeniería. La transmisión automática de doble embrague y seis velocidades, con su rapidez y eficacia, fue pionera en su segmento. El sistema de tracción integral ATTESA E-TS, capaz de variar el reparto de par entre los ejes, garantizaba una adherencia excepcional en cualquier circunstancia. Además, contaba con una pantalla multifunción desarrollada en colaboración con Polyphony Digital (creadores de Gran Turismo) que ofrecía una cantidad ingente de información sobre el rendimiento del vehículo, desde la presión del turbo hasta las fuerzas G, haciendo las delicias de los entusiastas de la conducción.
Competencia
En su lanzamiento, el Nissan GT-R de 2008 se enfrentó a pesos pesados como el Porsche 911 Turbo, el Audi R8 y el BMW M6. Aunque estos rivales ofrecían un mayor refinamiento y un estatus de marca más consolidado, el GT-R los superaba en prestaciones puras y, sobre todo, en su relación precio/rendimiento. Era el coche que democratizaba el acceso a las sensaciones de un superdeportivo, obligando a la competencia a replantearse sus estrategias.
Conclusión
El Nissan GT-R de 2008 es un icono, un coche que redefinió lo que era posible en el mundo de los deportivos. Ofreció un rendimiento de superdeportivo a un precio que lo hacía accesible a un público más amplio, ganándose el apodo de 'Godzilla'. Su combinación de potencia bruta, tecnología avanzada y una experiencia de conducción emocionante lo convierte en una leyenda moderna. Es un coche para aquellos que buscan emociones fuertes y una máquina que no deja indiferente a nadie, un verdadero hito en la historia del automóvil.