Especificaciones y análisis del Nissan Maxima QX
Potencia
140CV
Par
177Nm
Consumo
9.2l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
11.3s
Vel. Máx.
203km/h
Peso
1490kg
Precio
31,680€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 4 puertas
520 L
70 L
103 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Nissan Maxima QX 2.0 SE · 140 CV (2000-2004)
Descripción general
El Nissan Maxima QX 2.0 SE del año 2000 es una berlina que, a primera vista, promete un viaje confortable y una experiencia de conducción serena. Con su motor de gasolina de 140 CV y una caja de cambios manual de 5 velocidades, se posiciona como una opción interesante para quienes buscan un coche espacioso y con un toque de distinción, sin caer en la ostentación. Su precio de 31.680 € en su momento lo situaba en un segmento competitivo, ofreciendo una alternativa japonesa a las berlinas europeas.
Experiencia de conducción
Al volante del Maxima QX, la sensación predominante es de suavidad y aplomo. El motor V6, a pesar de sus 140 CV, entrega la potencia de forma lineal y sin estridencias, ideal para viajes largos donde el confort es primordial. La dirección, aunque no es la más comunicativa, cumple su función con precisión, y la suspensión, de tipo McPherson delante y eje rígido detrás, filtra eficazmente las irregularidades del asfalto. No es un coche para emociones fuertes, sino para disfrutar de la carretera con tranquilidad. Su aceleración de 0 a 100 km/h en 11.3 segundos y una velocidad máxima de 203 km/h son cifras adecuadas para su enfoque, sin pretensiones deportivas. El consumo combinado de 9.2 l/100km es razonable para un motor de su cilindrada y época.
Diseño y estética
El diseño del Nissan Maxima QX es un reflejo de la elegancia discreta de finales de los 90 y principios de los 2000. Sus líneas son fluidas y atemporales, con una silueta que denota amplitud y presencia. Los faros delanteros, de tamaño generoso, se integran armoniosamente en el frontal, mientras que la zaga, con sus pilotos horizontales, refuerza la sensación de anchura. Con 4920 mm de largo, 1780 mm de ancho y 1435 mm de alto, es un coche imponente, pero sin caer en excesos. El interior, aunque no se detalla en los datos, se espera que siga la misma línea de funcionalidad y confort, con materiales de calidad y un buen aprovechamiento del espacio para sus cinco ocupantes y un maletero de 520 litros.
Tecnología y características
En el año 2000, la tecnología del Nissan Maxima QX se centraba en ofrecer una experiencia de conducción refinada y segura. Su motor V6 de 1995 cc, con 4 válvulas por cilindro e inyección indirecta, era una muestra de ingeniería sólida y fiable. La tracción delantera y la transmisión manual de 5 velocidades eran configuraciones estándar para la época, buscando un equilibrio entre eficiencia y rendimiento. Aunque no se mencionan sistemas de asistencia a la conducción avanzados, se presupone que contaría con los elementos de seguridad pasiva y activa habituales en su segmento, como frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, y dirección de cremallera. La suspensión independiente delantera y el eje rígido trasero, junto con barras estabilizadoras en ambos ejes, contribuían a un comportamiento dinámico predecible y confortable.
Competencia
En su segmento, el Nissan Maxima QX competía con berlinas de prestigio como el Toyota Camry, el Honda Accord, el Ford Mondeo o el Opel Vectra, e incluso con algunas opciones europeas de gama media-alta. Frente a ellos, el Maxima QX ofrecía una propuesta de valor basada en la fiabilidad mecánica, el confort de marcha y un diseño sobrio pero elegante. Su motor V6, aunque no el más potente de su clase, aportaba una suavidad de funcionamiento que muchos rivales de cuatro cilindros no podían igualar. Era una alternativa para aquellos que buscaban un coche espacioso y bien equipado, con un toque de distinción japonesa.
Conclusión
El Nissan Maxima QX 2.0 SE de 2000 es un coche que, a pesar del paso del tiempo, sigue siendo una opción interesante para quienes valoran la comodidad, la fiabilidad y la discreción. No busca ser el más rápido ni el más llamativo, sino un compañero de viaje fiel y confortable. Su diseño atemporal y su mecánica robusta lo convierten en un clásico moderno, capaz de ofrecer una experiencia de conducción placentera y sin sobresaltos. Es un coche para disfrutar de la carretera, para viajes largos en familia o para el día a día con la tranquilidad de saber que se conduce un vehículo bien construido y pensado para durar.




