Especificaciones y análisis del Opel Astra
Potencia
82CV
Par
185Nm
Consumo
5.7l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
14.5s
Vel. Máx.
175km/h
Peso
1288kg
Precio
14,184€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 3 puertas
370 L
52 L
60 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Opel Astra 3p Comfort 2.0 DI 16v · 82 CV (2000)
Descripción general
El Opel Astra 3p Comfort 2.0 DI 16v de 1998 es un compacto que marcó una época, ofreciendo una combinación de practicidad y eficiencia. Con su motor diésel de 82 CV, se presentaba como una opción sensata para el día a día, destacando por su economía de combustible y un diseño que, aunque discreto, era funcional y atemporal. Este modelo, con su carrocería de tres puertas, buscaba atraer a un público joven o a aquellos que valoraban la agilidad en entornos urbanos sin renunciar a la capacidad de viajar cómodamente.
Experiencia de conducción
Al volante del Astra 2.0 DI 16v, la sensación predominante es la de un coche honesto y predecible. El motor diésel, aunque no es un derroche de potencia con sus 82 CV, entrega un par motor de 185 Nm a 1800 rpm que permite una conducción relajada y eficiente. La aceleración de 0 a 100 km/h en 14.5 segundos y una velocidad máxima de 175 km/h no lo convierten en un deportivo, pero sí en un compañero fiable para la carretera. La suspensión, tipo McPherson delante y rueda tirada con elemento torsional detrás, ofrece un buen equilibrio entre confort y estabilidad, absorbiendo las irregularidades del asfalto sin transmitir excesivas vibraciones al habitáculo. La dirección de cremallera, aunque carece de la precisión de sistemas más modernos, cumple su función, haciendo que el coche se sienta manejable en ciudad y estable en autopista. El consumo combinado de 5.7 l/100km es uno de sus puntos fuertes, invitando a recorrer kilómetros sin preocuparse excesivamente por el repostaje.
Diseño y estética
El diseño del Opel Astra de 1998 es un reflejo de la estética automovilística de finales de los 90: líneas suaves, superficies limpias y una silueta que prioriza la funcionalidad. La versión de tres puertas acentúa su carácter compacto y juvenil. Aunque no busca la extravagancia, su diseño es armonioso y bien proporcionado, con una parrilla frontal discreta y unos faros que se integran fluidamente en la carrocería. El interior, aunque sobrio, está bien organizado, con materiales que, sin ser lujosos, son duraderos y resistentes al paso del tiempo. La ergonomía es buena, con los controles al alcance del conductor, y el espacio interior es suficiente para cuatro ocupantes, con un maletero de 370 litros que ofrece una capacidad adecuada para el equipaje diario o escapadas de fin de semana.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Opel Astra 2.0 DI 16v de 1998 incorporaba las soluciones habituales de su época. Su motor diésel de inyección directa con turbo era una muestra de la eficiencia que se buscaba en aquellos años, ofreciendo un buen rendimiento con un consumo contenido. La transmisión manual de cinco velocidades es robusta y precisa, contribuyendo a la sensación de control. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, un estándar para la época. Aunque no disponía de las avanzadas ayudas a la conducción actuales, su equipamiento era suficiente para garantizar una experiencia de conducción segura y confortable. La dirección asistida, aunque no sensible a la velocidad, facilitaba las maniobras, especialmente en ciudad.
Competencia
En su segmento, el Opel Astra 3p Comfort 2.0 DI 16v competía con modelos de gran calado como el Volkswagen Golf IV, el Ford Focus de primera generación y el Renault Mégane. Frente a ellos, el Astra ofrecía una alternativa sólida, destacando por su motor diésel eficiente y su equilibrio general. El Golf, quizás más refinado en algunos aspectos, solía tener un precio superior. El Focus, por su parte, era conocido por su dinámica de conducción más ágil. El Mégane ofrecía un confort de marcha notable. El Astra se posicionaba como una opción intermedia, con un buen compromiso entre prestaciones, consumo y coste, lo que lo hacía muy atractivo para un amplio espectro de compradores que buscaban un coche fiable y económico para el día a día.
Conclusión
El Opel Astra 3p Comfort 2.0 DI 16v de 1998 es un coche que, a pesar de los años, sigue siendo un ejemplo de la ingeniería práctica y eficiente de Opel. Su motor diésel, aunque modesto en potencia, es un caballo de batalla que ofrece un consumo excepcional y una fiabilidad contrastada. Su diseño atemporal y su interior funcional lo convierten en un vehículo versátil, ideal para quienes buscan un transporte económico y sin complicaciones. Es un coche que cumple con creces su propósito, ofreciendo una experiencia de conducción honesta y satisfactoria para aquellos que valoran la durabilidad y la eficiencia por encima de las prestaciones puras. Un compañero fiel que, con el mantenimiento adecuado, aún tiene mucho que ofrecer.




