Especificaciones y análisis del Opel Mokka
Potencia
131CV
Par
300Nm
Consumo
4.9l/100
Emisiones
129g/km
0-100 km/h
10.9s
Vel. Máx.
184km/h
Peso
1415kg
Precio
24,815€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
AWD
5 / 5 puertas
356 L
52 L
96 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Opel Mokka Excellence 1.7 CDTI 130 CV 4x4 Start&Stop (2012-2015)
Descripción general
El Opel Mokka de 2012, en su versión Excellence 1.7 CDTI 130 CV 4x4 Start&Stop, se presenta como una propuesta audaz en el segmento de los SUV compactos. Con un precio de 24.815 €, este modelo buscaba conquistar a quienes anhelaban un vehículo versátil, capaz de desenvolverse con soltura tanto en la jungla urbana como en escapadas fuera del asfalto. Su motor diésel de 131 CV, combinado con tracción integral y una caja manual de 6 velocidades, prometía una experiencia de conducción equilibrada y eficiente.
Experiencia de conducción
Al volante del Mokka, la sensación es de control y robustez. El motor 1.7 CDTI, con sus 131 CV y 300 Nm de par, ofrece una respuesta enérgica desde bajas revoluciones, lo que se traduce en adelantamientos seguros y una buena capacidad de recuperación. La tracción 4x4, aunque no lo convierte en un todoterreno puro, aporta un extra de confianza en superficies deslizantes o caminos sinuosos. La suspensión, tipo McPherson delante y de rueda tirada con elemento torsional detrás, filtra eficazmente las irregularidades del terreno, proporcionando un confort de marcha notable. La dirección asistida eléctrica, aunque carece de la retroalimentación más directa, cumple su función con suavidad y precisión. En general, el Mokka transmite una sensación de solidez y aplomo, invitando a disfrutar de cada trayecto.
Diseño y estética
El diseño del Opel Mokka de 2012 es inconfundiblemente Opel, con líneas musculosas y una presencia imponente para su tamaño. Su carrocería de 5 puertas y 5 plazas, con una longitud de 4278 mm, una anchura de 1777 mm y una altura de 1658 mm, le confiere una estética robusta y aventurera. Los detalles como las llantas de 18 pulgadas y los pasos de rueda marcados refuerzan su carácter SUV. El interior, aunque funcional, presenta un diseño que, si bien no es vanguardista, resulta ergonómico y bien acabado, con materiales que transmiten una sensación de durabilidad. La habitabilidad es correcta para cuatro adultos, y el maletero de 356 litros ofrece espacio suficiente para el equipaje diario.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Mokka de 2012 incorporaba elementos que, para su época, lo situaban en una posición competitiva. El motor diésel de inyección directa por conducto común, turbo con geometría variable e intercooler, junto con el sistema Start&Stop, optimizaba el consumo y las emisiones. La tracción integral, aunque no permanente, se activaba automáticamente cuando era necesario, mejorando la seguridad y la capacidad de tracción. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delanteros y de disco traseros, y una suspensión bien calibrada para ofrecer estabilidad. Si bien no disponía de las últimas ayudas a la conducción que vemos hoy, su equipamiento era adecuado para el segmento y el año de lanzamiento.
Competencia
En el competitivo segmento de los SUV compactos, el Opel Mokka se enfrentaba a duros rivales como el Nissan Juke, el Skoda Yeti, el Mitsubishi ASX o el Chevrolet Trax. Cada uno de ellos ofrecía sus propias virtudes, ya fuera en diseño, espacio interior o capacidades off-road. El Mokka se posicionaba como una opción equilibrada, destacando por su motor diésel eficiente, su tracción 4x4 y un diseño robusto que atraía a un público que buscaba un coche con personalidad y versatilidad.
Conclusión
El Opel Mokka Excellence 1.7 CDTI 130 CV 4x4 Start&Stop de 2012 fue un vehículo que supo encontrar su lugar en el mercado. Su combinación de un motor diésel potente y eficiente, tracción integral y un diseño atractivo lo convertían en una opción interesante para aquellos que buscaban un SUV compacto capaz de adaptarse a diferentes situaciones. Aunque no era el más espacioso ni el más tecnológico de su clase, su fiabilidad y su buen comportamiento dinámico lo hacían un compañero de viaje digno de consideración. Un coche que, sin grandes alardes, cumplía con creces las expectativas de su público.




