Especificaciones y análisis del Opel Omega
Potencia
150CV
Par
300Nm
Consumo
7.8l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
11s
Vel. Máx.
200km/h
Peso
1808kg
Precio
36,780€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
RWD
5 / 5 puertas
540 L
75 L
110 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Opel Omega Caravan Sport 2.5 DTi 150 CV (2001-2002)
Descripción general
El Opel Omega Caravan Sport 2.5 DTi de 150 CV, un vehículo que marcó una época, se presenta como una berlina familiar con un toque deportivo. Lanzado entre 2001 y 2002, este modelo combinaba la amplitud y versatilidad de un familiar con un motor diésel potente y eficiente, ideal para quienes buscaban un coche capaz de afrontar largos viajes con comodidad y solvencia. Su diseño, aunque clásico, no pasaba desapercibido, y su equipamiento lo posicionaba como una opción interesante en su segmento.
Experiencia de conducción
Al volante del Omega Caravan Sport, la sensación es de solidez y aplomo. El motor 2.5 DTi de 150 CV, con su inyección directa por conducto común y turbo de geometría variable, entrega una respuesta contundente desde bajas revoluciones, haciendo que los adelantamientos y las incorporaciones sean tareas sencillas. La caja de cambios manual de cinco velocidades, aunque no es la más rápida, permite un control preciso de la potencia. La suspensión, de tipo McPherson en el eje delantero, filtra bien las irregularidades del terreno, ofreciendo un confort de marcha notable, aunque sin renunciar a una cierta firmeza que se agradece en curvas. La dirección, de cremallera, es precisa y transmite confianza. En general, es un coche que invita a devorar kilómetros con una sensación de seguridad y control.
Diseño y estética
El diseño del Opel Omega Caravan Sport es un reflejo de la estética de principios de los 2000, con líneas sobrias y funcionales que priorizan la habitabilidad y la capacidad de carga. Su carrocería familiar, con cinco puertas, ofrece un acceso cómodo a un interior espacioso. Las llantas de 17 pulgadas y los neumáticos 235/45 R17 W le otorgan un aspecto más dinámico y deportivo, diferenciándolo de las versiones más básicas. Aunque no es un coche que busque la extravagancia, su presencia en carretera es imponente y elegante, con una silueta que denota robustez y fiabilidad. Los detalles cromados y la parrilla frontal contribuyen a una imagen distinguida.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Opel Omega Caravan Sport 2.5 DTi incorporaba soluciones avanzadas para su época. El motor diésel de inyección directa por conducto común, con turbo e intercooler, era un referente en eficiencia y rendimiento. La gestión electrónica del motor optimizaba el consumo y las emisiones. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados en ambos ejes, garantizando una frenada eficaz. Aunque no disponía de los sistemas de asistencia a la conducción actuales, su equipamiento de serie incluía elementos que mejoraban la experiencia de conducción y la seguridad pasiva. La dirección asistida y los estabilizadores en ambos ejes contribuían a un comportamiento dinámico equilibrado.
Competencia
En su segmento, el Opel Omega Caravan Sport 2.5 DTi se enfrentaba a duros competidores como el BMW Serie 5 Touring, el Mercedes-Benz Clase E Estate o el Audi A6 Avant. Frente a ellos, el Omega ofrecía una excelente relación calidad-precio, un espacio interior generoso y un motor diésel muy competente. Si bien sus rivales alemanes podían presumir de un mayor refinamiento o un estatus de marca superior, el Omega se posicionaba como una alternativa práctica y fiable para aquellos que buscaban un familiar potente y bien equipado sin incurrir en los costes de sus competidores premium.
Conclusión
El Opel Omega Caravan Sport 2.5 DTi de 150 CV es un coche que, a pesar del paso del tiempo, sigue siendo una opción interesante para quienes valoran la amplitud, la comodidad y un motor diésel robusto. Su capacidad de carga, su confort de marcha y su rendimiento lo convierten en un compañero ideal para viajes largos o para familias que necesitan espacio. Aunque su diseño pueda parecer algo anticuado para los estándares actuales, su fiabilidad mecánica y su buen comportamiento en carretera lo hacen un clásico digno de consideración. Es un coche que, con un mantenimiento adecuado, puede seguir ofreciendo muchas satisfacciones.