Especificaciones y análisis del Peugeot 306
Potencia
88CV
Par
135Nm
Consumo
7.3l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
13.5s
Vel. Máx.
178km/h
Peso
1145kg
Precio
11,935€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 3 puertas
340 L
60 L
65 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Peugeot 306 3p Boulevard 1.6 · 88 CV (2000-2001)
Descripción general
El Peugeot 306 3p Boulevard 1.6 del año 2000 es un compacto que, a pesar de su edad, aún evoca una sensación de nostalgia y practicidad. Con su motor de gasolina de 88 CV y una transmisión manual de 5 velocidades, este vehículo fue diseñado para ofrecer una experiencia de conducción sencilla y eficiente en el día a día. Su precio de 11.935 € en su momento lo posicionaba como una opción accesible para quienes buscaban un coche fiable y con un toque francés.
Experiencia de conducción
Al volante del Peugeot 306, uno experimenta una conexión directa con la carretera. La dirección, aunque carece de la asistencia moderna, ofrece una retroalimentación honesta, permitiendo sentir cada curva. El motor de 1.6 litros, con sus 88 CV, no es un derroche de potencia, pero es suficiente para moverse con agilidad en entornos urbanos y mantener un ritmo constante en carretera. La aceleración de 0 a 100 km/h en 13.5 segundos y una velocidad máxima de 178 km/h sugieren un coche más enfocado en la eficiencia que en las prestaciones puras. La suspensión tipo McPherson en la parte delantera contribuye a un manejo predecible y cómodo, absorbiendo las irregularidades del camino con solvencia. Es un coche que invita a una conducción relajada, sin grandes pretensiones deportivas, pero con la satisfacción de un comportamiento noble y seguro.
Diseño y estética
El diseño del Peugeot 306 3p Boulevard es un reflejo de la estética automotriz de finales de los 90. Sus líneas son suaves y redondeadas, sin estridencias, lo que le confiere una apariencia atemporal y elegante. La carrocería de 3 puertas le otorga un aire juvenil y dinámico, mientras que sus dimensiones compactas (4030 mm de largo, 1680 mm de ancho y 1370 mm de alto) lo hacen ideal para la ciudad. El interior, aunque funcional, se caracteriza por la sencillez y la ergonomía, con los controles al alcance de la mano. El maletero de 340 litros es adecuado para el uso diario, ofreciendo espacio suficiente para la compra o el equipaje de un fin de semana. Es un diseño que prioriza la funcionalidad y la discreción, sin renunciar a un cierto encanto francés.
Tecnología y características
En el año 2000, la tecnología en el automóvil era diferente a la actual. El Peugeot 306 3p Boulevard 1.6 se presenta con una inyección indirecta de gasolina, un sistema probado y fiable. La transmisión manual de 5 velocidades es un clásico que ofrece un control total sobre el motor. En cuanto a la seguridad, cuenta con frenos de disco ventilados en la parte delantera y tambores en la trasera, una configuración común en su segmento. La dirección de cremallera, aunque sin asistencia variable, proporciona una sensación de control directo. No esperes pantallas táctiles ni asistentes de conducción avanzados; este coche representa una era donde la mecánica y la simplicidad eran las protagonistas, ofreciendo una experiencia de conducción pura y sin distracciones.
Competencia
En su época, el Peugeot 306 3p Boulevard 1.6 competía en un segmento muy reñido con modelos como el Volkswagen Golf, el Renault Mégane, el Ford Focus y el Opel Astra. Cada uno de ellos ofrecía sus propias virtudes, pero el 306 destacaba por su equilibrio entre confort, agilidad y un diseño con personalidad. Frente a sus rivales, el 306 ofrecía una alternativa con un toque más emocional y una suspensión que muchos consideraban superior en términos de comodidad y agarre en carretera, sin sacrificar la practicidad que se esperaba de un compacto.
Conclusión
El Peugeot 306 3p Boulevard 1.6 del año 2000 es más que un simple coche; es un pedazo de historia automotriz que aún hoy puede ofrecer una experiencia de conducción gratificante. Su combinación de un motor fiable, un diseño atemporal y un comportamiento dinámico lo convierten en una opción interesante para quienes buscan un vehículo con carácter y sin las complejidades de los coches modernos. Es un coche que te invita a disfrutar de la carretera, a sentir cada curva y a apreciar la sencillez de la mecánica bien hecha. Un clásico que, con el cuidado adecuado, seguirá rodando y regalando sonrisas.