Especificaciones y análisis del Peugeot 407
Potencia
170CV
Par
370Nm
Consumo
6.1l/100
Emisiones
159g/km
0-100 km/h
8.7s
Vel. Máx.
225km/h
Peso
1699kg
Precio
29,240€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 4 puertas
407 L
66 L
125 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Peugeot 407 Premium 2.2 HDi 170 CV FAP (2008-2009)
Descripción general
El Peugeot 407 Premium 2.2 HDi 170 CV FAP de 2008 es una berlina que, en su momento, representó la apuesta de Peugeot por el segmento D, ofreciendo una combinación de diseño atrevido, confort y un motor diésel potente y eficiente. Con un precio de 29.240 euros, se posicionaba como una opción interesante para quienes buscaban un coche familiar con un toque de distinción y buenas prestaciones.
Experiencia de conducción
Al volante, el 407 Premium 2.2 HDi 170 CV FAP ofrecía una experiencia de conducción equilibrada. Su motor diésel de 170 CV, con un par motor de 370 Nm a solo 1500 rpm, proporcionaba una respuesta contundente y una aceleración de 0 a 100 km/h en 8.7 segundos, lo que permitía afrontar adelantamientos con solvencia. La velocidad máxima de 225 km/h confirmaba su capacidad en carretera. La suspensión de paralelogramo deformable en ambos ejes, junto con los frenos de disco ventilados de 330 mm delante, aseguraban un buen aplomo y una frenada eficaz. El consumo combinado de 6.1 l/100km era notable para la época, ofreciendo una buena autonomía gracias a su depósito de 66 litros. Sin embargo, su dirección de cremallera, aunque precisa, carecía de la asistencia variable que algunos rivales ya ofrecían, lo que podía restar algo de agilidad en maniobras urbanas.
Diseño y estética
El diseño del Peugeot 407 fue, sin duda, uno de sus puntos más distintivos y controvertidos. Su frontal, con una parrilla prominente y unos faros alargados que se extendían hacia el parabrisas, le otorgaba una personalidad única y un aspecto felino. La silueta de berlina, con sus 4691 mm de longitud, 1811 mm de anchura y 1452 mm de altura, transmitía una sensación de elegancia y dinamismo. Las llantas de 17 pulgadas con neumáticos 215/55 R17 complementaban su estética. El interior, aunque espacioso para cinco ocupantes, ofrecía un maletero de 407 litros, que si bien no era el más grande de su categoría, resultaba suficiente para el uso diario. La calidad de los materiales y los acabados eran acordes a su segmento, buscando ofrecer un ambiente confortable y bien equipado.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Peugeot 407 Premium 2.2 HDi 170 CV FAP incorporaba elementos que, en 2008, eran considerados avanzados. Su motor diésel de inyección directa por conducto común, con turbo de geometría variable e intercooler, era un ejemplo de eficiencia y rendimiento. La transmisión manual de 6 velocidades permitía aprovechar al máximo la potencia del motor. Aunque no disponía de sistemas de asistencia a la conducción tan sofisticados como los actuales, ofrecía un equipamiento de seguridad pasiva completo. La ausencia de un sistema Stop&Start y de una dirección asistida sensible a la velocidad eran puntos donde la competencia empezaba a tomar ventaja, pero su enfoque se centraba en la robustez mecánica y el confort de marcha.
Competencia
En el competitivo segmento de las berlinas medias, el Peugeot 407 Premium 2.2 HDi 170 CV FAP se enfrentaba a duros rivales como el Volkswagen Passat, el Ford Mondeo, el Renault Laguna o el Opel Vectra. Cada uno de ellos ofrecía sus propias virtudes, ya fuera en espacio interior, tecnología o dinámica de conducción. El 407 destacaba por su diseño audaz y su confort, aunque en algunos aspectos tecnológicos y de habitabilidad trasera, podía quedarse ligeramente por detrás de algunos de sus competidores más directos.
Conclusión
El Peugeot 407 Premium 2.2 HDi 170 CV FAP de 2008 fue una berlina con carácter, que apostó por un diseño diferenciador y un motor diésel potente y refinado. Ofrecía un buen equilibrio entre prestaciones, confort y eficiencia, convirtiéndose en una opción atractiva para aquellos que buscaban una alternativa a las berlinas más conservadoras. Aunque algunos de sus rivales podían superarle en ciertos aspectos tecnológicos o de espacio, el 407 dejaba una huella emocional gracias a su estética y su agradable experiencia de conducción.