Especificaciones y análisis del Peugeot Partner
Potencia
75CV
Par
170Nm
Consumo
5.4l/100
Emisiones
140g/km
0-100 km/h
15.4s
Vel. Máx.
150km/h
Peso
1344kg
Precio
15,299€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
624 L
60 L
55 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Peugeot Partner Sportium HDi 75 · 75 CV (2008)
Descripción general
El Peugeot Partner Sportium HDi 75 de 2003 es un vehículo que, a primera vista, se presenta como una opción práctica y funcional. Con su carrocería estándar de 5 puertas, este modelo se enfoca en la utilidad, ofreciendo un espacio generoso y una configuración pensada para el día a día. Su motor diésel de 75 CV, aunque modesto, promete eficiencia y un rendimiento adecuado para la conducción urbana y trayectos interurbanos. Es un coche que busca la sencillez y la robustez, sin grandes pretensiones estéticas, pero con una clara vocación de servicio.
Experiencia de conducción
Al volante del Partner Sportium HDi 75, la sensación predominante es la de un vehículo honesto y sin artificios. La dirección, aunque no es la más precisa, cumple su función, y la suspensión tipo McPherson en el eje delantero absorbe las irregularidades del camino con una comodidad aceptable. El motor diésel de 75 CV, con su par de 170 Nm a 1750 rpm, ofrece una respuesta suficiente para moverse con soltura en el tráfico, aunque no esperes aceleraciones fulgurantes. Alcanza los 100 km/h en 15.4 segundos y su velocidad máxima es de 150 km/h. La caja de cambios manual de 5 velocidades es suave y precisa, contribuyendo a una experiencia de conducción relajada. Es un coche que invita a una conducción tranquila, donde la funcionalidad prima sobre la emoción.
Diseño y estética
El diseño del Peugeot Partner Sportium HDi 75 es eminentemente práctico. Sus líneas son sencillas y funcionales, reflejando su naturaleza de vehículo comercial adaptado al uso familiar. La carrocería de 5 puertas facilita el acceso al habitáculo y al maletero, que ofrece una impresionante capacidad de 624 litros. Las dimensiones, con 4137 mm de largo, 1724 mm de ancho y 1810 mm de alto, le otorgan una presencia robusta y un espacio interior considerable. Los neumáticos 185/65 R15, montados sobre llantas de 15 pulgadas, son adecuados para su propósito, proporcionando un buen equilibrio entre confort y durabilidad. No es un coche que busque deslumbrar con su estética, sino convencer con su utilidad y resistencia.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Peugeot Partner Sportium HDi 75 de 2003 se presenta con lo esencial para su época. Su motor diésel de 1.6 litros, con inyección directa por conducto común, turbo e intercooler, es una muestra de la tecnología diésel de la época, buscando la eficiencia y un buen rendimiento. La tracción delantera y la transmisión manual de 5 velocidades son configuraciones probadas y fiables. En cuanto a la seguridad, cuenta con frenos de disco ventilados delanteros y de tambor traseros, una combinación estándar para vehículos de su segmento. Aunque no incorpora las últimas innovaciones de conectividad o asistencia a la conducción que vemos hoy, su tecnología está orientada a la durabilidad y la facilidad de mantenimiento.
Competencia
En su segmento, el Peugeot Partner Sportium HDi 75 compitió con modelos como el Citroën Berlingo, su hermano de plataforma, así como con el Renault Kangoo y el Fiat Doblò. Todos ellos ofrecían soluciones similares en cuanto a espacio, versatilidad y motores diésel eficientes. La Partner se diferenciaba por su robustez y una estética que, aunque funcional, tenía un toque distintivo de la marca Peugeot. Su precio de 15.299 euros en 2008, con un descuento oficial de 4.344 euros, lo posicionaba como una opción atractiva en el mercado de vehículos comerciales y familiares compactos.
Conclusión
El Peugeot Partner Sportium HDi 75 de 2003 es un vehículo que cumple con creces su propósito: ser un compañero fiable y espacioso para el trabajo o la familia. Su diseño funcional, su motor diésel eficiente y su generoso espacio interior lo convierten en una opción sensata para quienes buscan practicidad por encima de todo. Aunque no es un coche que despierte pasiones por su rendimiento o su estética, su honestidad y su capacidad para afrontar el día a día con solvencia lo hacen un modelo digno de consideración. Es un coche que, con el paso del tiempo, ha demostrado ser un fiel aliado para muchos.