Porsche 911 Carrera S Cabriolet · 385 CV (2010-2011)

2008
Gasolina
RWD
Manual 6v
Porsche 911 - Vista 1
Porsche 911 - Vista 2
Porsche 911 - Vista 3
Porsche 911 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Porsche 911

Potencia

385CV

Par

420Nm

Consumo

10.8l/100

Emisiones

254g/km

0-100 km/h

4.9s

Vel. Máx.

302km/h

Peso

1585kg

Precio

123,819

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 6v

Tracción

RWD

Plazas

4 / 2 puertas

Maletero

135 L

Depósito

64 L

Potencia

283 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima385 CV / 283 kW
Par máximo420 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 6v

Capacidades

Depósito64 L
Maletero135 L

Análisis detallado del Porsche 911 Carrera S Cabriolet · 385 CV (2010-2011)

Descripción general

El Porsche 911 Carrera S Cabriolet de 2008 es una joya automovilística que encarna la esencia de la deportividad y el lujo descapotable. Con su motor bóxer de 3.8 litros y 385 CV, este modelo promete una experiencia de conducción inigualable, combinando la emoción de un deportivo con la libertad de un cabriolet. Su precio de 123.819 € en 2011 lo posicionaba como un vehículo exclusivo, destinado a aquellos que buscan prestaciones de alto nivel y un diseño atemporal.

Experiencia de conducción

Conducir el 911 Carrera S Cabriolet es una sinfonía de emociones. El motor trasero longitudinal de seis cilindros, con 385 CV a 6500 rpm y un par motor de 420 Nm a 4400 rpm, ofrece una aceleración de 0 a 100 km/h en tan solo 4.9 segundos y una velocidad máxima de 302 km/h. La transmisión manual de 6 velocidades permite una conexión pura con la máquina, mientras que la inyección directa y la relación de compresión de 12.5 aseguran una respuesta instantánea. La suspensión tipo McPherson delantera y el paralelogramo deformable trasero, junto con los frenos de disco ventilados de 330 mm en ambos ejes, garantizan un agarre y una frenada excepcionales, transmitiendo una confianza absoluta al conductor. La dirección de cremallera, aunque sin asistencia sensible a la velocidad, ofrece una precisión quirúrgica, haciendo que cada curva sea una delicia. Es un coche que te hace sentir vivo, que te conecta con la carretera de una manera visceral, especialmente con la capota bajada, donde el sonido del motor se convierte en la banda sonora perfecta.

Diseño y estética

El diseño del Porsche 911 Carrera S Cabriolet de 2008 es una evolución elegante de una silueta icónica. Sus líneas fluidas y atemporales, con una longitud de 4435 mm, una anchura de 1808 mm y una altura de 1300 mm, le otorgan una presencia imponente pero refinada. La capota de lona, que se pliega con elegancia, transforma el coche de un coupé deportivo a un cabriolet deslumbrante en cuestión de segundos. Las llantas de 19 pulgadas, con neumáticos 235/35 R19 Z delante y 295/30 R19 Z detrás, no solo contribuyen a su estética agresiva, sino que también mejoran su rendimiento. Cada detalle, desde los faros distintivos hasta las tomas de aire, está diseñado para optimizar tanto la aerodinámica como la estética, creando un coche que es tan bello de contemplar como emocionante de conducir.

Tecnología y características

A pesar de ser un modelo de 2008, el 911 Carrera S Cabriolet incorpora tecnología avanzada para su época. El motor de gasolina de 3.8 litros con inyección directa es un ejemplo de ingeniería de precisión, ofreciendo una combinación óptima de potencia y eficiencia. La construcción del motor con bloque y culata de aluminio contribuye a un peso contenido de 1585 kg, mejorando la relación peso/potencia. Aunque no cuenta con Start/Stop, su consumo combinado NEDC de 10.8 l/100km y emisiones de CO2 de 254 g/km lo sitúan en la categoría Euro 5. La tracción trasera y la transmisión manual de 6 velocidades ofrecen una experiencia de conducción purista, mientras que los sistemas de suspensión y frenado están diseñados para un rendimiento deportivo de alto nivel. Es un coche que, sin recurrir a excesivas ayudas electrónicas, confía en la excelencia de su mecánica para ofrecer una experiencia de conducción auténtica.

Competencia

En su segmento, el Porsche 911 Carrera S Cabriolet de 2008 se enfrentaba a rivales de la talla del Audi R8 Spyder, el Mercedes-Benz SL y el BMW M6 Cabrio. Cada uno ofrecía su propia interpretación del lujo y la deportividad descapotable, pero el 911 destacaba por su herencia deportiva, su motor bóxer único y su inconfundible diseño. Mientras que otros podían ofrecer más lujo o una estética más radical, el Porsche se mantenía fiel a su filosofía de equilibrio perfecto entre rendimiento, usabilidad diaria y una conexión emocional con el conductor.

Conclusión

El Porsche 911 Carrera S Cabriolet de 2008 es más que un coche; es una declaración de intenciones. Es la culminación de décadas de ingeniería y pasión por la conducción. Ofrece una experiencia inmersiva, donde cada viaje se convierte en una aventura. Su combinación de potencia, diseño atemporal y la libertad de un cabriolet lo convierten en un clásico instantáneo, un coche que sigue emocionando y cautivando a quienes tienen el privilegio de conducirlo. Es un vehículo que no solo te lleva de un punto A a un punto B, sino que te hace disfrutar de cada kilómetro del camino, con el viento en el pelo y el rugido del motor como banda sonora.