Especificaciones y análisis del Porsche Boxster
Potencia
256CV
Par
290Nm
Consumo
9.1l/100
Emisiones
214g/km
0-100 km/h
5.8s
Vel. Máx.
261km/h
Peso
1440kg
Precio
55,304€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 7v
RWD
2 / 2 puertas
280 L
65 L
188 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Porsche Boxster PDK · 256 CV (2008-2010)
Descripción general
El Porsche Boxster PDK de 2009 es una joya de la ingeniería alemana, un roadster que combina a la perfección la deportividad con la elegancia. Con su motor central y su transmisión automática de doble embrague, este Boxster promete una experiencia de conducción inigualable, un verdadero deleite para los amantes de los coches deportivos. Su precio de 55.304 € lo posiciona como una opción atractiva para quienes buscan un descapotable de altas prestaciones y un diseño atemporal.
Experiencia de conducción
Conducir el Boxster PDK es una experiencia visceral. El motor de seis cilindros y 256 CV, situado en posición central, ofrece una respuesta instantánea y un sonido embriagador que te envuelve. La aceleración de 0 a 100 km/h en solo 5.8 segundos te pega al asiento, mientras que la velocidad máxima de 261 km/h te permite sentir la libertad en cada trayecto. La transmisión PDK, con sus siete velocidades, realiza cambios de marcha de forma casi imperceptible, manteniendo siempre el motor en su punto óptimo. La dirección es precisa y comunicativa, y la suspensión, aunque firme, absorbe las irregularidades del asfalto con solvencia, ofreciendo un equilibrio perfecto entre confort y deportividad. Cada curva se convierte en una invitación a explorar los límites, con una agilidad y un agarre que inspiran confianza.
Diseño y estética
El diseño del Porsche Boxster de 2009 es un clásico instantáneo. Sus líneas fluidas y elegantes, con una silueta baja y ancha, transmiten dinamismo y sofisticación. Los faros delanteros, con su característica forma ovalada, y las tomas de aire laterales, no solo cumplen una función estética, sino que también optimizan la aerodinámica y la refrigeración del motor. La capota de lona, que se pliega de forma rápida y sencilla, transforma el coche en un auténtico roadster, permitiendo disfrutar del viento y el sol. El interior, aunque compacto, está diseñado con una ergonomía impecable y materiales de alta calidad, creando un ambiente deportivo y lujoso a la vez. Cada detalle, desde los asientos deportivos hasta el volante, está pensado para el disfrute del conductor.
Tecnología y características
El Boxster PDK de 2009 incorpora tecnología de vanguardia para su época. El motor de 2.9 litros y seis cilindros, con inyección indirecta y admisión variable, es un prodigio de la ingeniería, ofreciendo una potencia de 256 CV y un par motor de 290 Nm. La transmisión PDK (Porsche Doppelkupplung) es uno de sus puntos fuertes, una caja de cambios de doble embrague y siete velocidades que garantiza cambios rápidos y suaves, mejorando tanto el rendimiento como la eficiencia. El sistema de frenos, con discos ventilados de 318 mm delante y 299 mm detrás, asegura una capacidad de detención excepcional. La suspensión tipo McPherson en ambos ejes, junto con las barras estabilizadoras, proporciona una estabilidad y un agarre impresionantes. Aunque no cuenta con las últimas ayudas a la conducción de hoy en día, su tecnología se centra en la pura experiencia de conducción.
Competencia
En su segmento, el Porsche Boxster PDK de 2009 se enfrentaba a rivales de la talla del BMW Z4, el Audi TT Roadster y el Mercedes-Benz SLK. Si bien todos ofrecían una experiencia descapotable, el Boxster se distinguía por su motor central, que le otorgaba un equilibrio y una agilidad superiores. Su transmisión PDK también era un punto a favor frente a las cajas automáticas de la competencia. El Z4 ofrecía un diseño más agresivo, el TT Roadster una estética más compacta y el SLK un enfoque más lujoso, pero ninguno lograba la pureza de sensaciones y la conexión con la carretera que ofrecía el Boxster.
Conclusión
El Porsche Boxster PDK de 2009 es mucho más que un coche deportivo; es una declaración de intenciones. Es un vehículo que te invita a disfrutar de cada kilómetro, a sentir la carretera y a conectar con la esencia de la conducción. Su combinación de un motor potente, una transmisión excepcional, un diseño atemporal y un comportamiento dinámico impecable lo convierten en un clásico moderno. Es una inversión en emociones, en la libertad de conducir a cielo abierto y en la satisfacción de poseer una pieza de ingeniería automotriz de primer nivel. Un coche que, sin duda, dejará una huella imborrable en el corazón de cualquier entusiasta.