Especificaciones y análisis del Porsche Boxster
Potencia
320CV
Par
370Nm
Consumo
9.3l/100
Emisiones
218g/km
0-100 km/h
5s
Vel. Máx.
265km/h
Peso
1375kg
Precio
74,067€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 7v
RWD
2 / 2 puertas
280 L
54 L
235 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Porsche Boxster Spyder PDK · 320 CV (2010)
Descripción general
El Porsche Boxster Spyder de 2010 es una joya automovilística, una versión más ligera y potente del ya de por sí emocionante Boxster. Con su enfoque en la pureza de la conducción, este modelo se despoja de lo superfluo para ofrecer una experiencia al volante inigualable. Es un coche para los puristas, aquellos que buscan la conexión más directa entre el hombre y la máquina, un verdadero tributo a la deportividad sin concesiones.
Experiencia de conducción
Conducir el Boxster Spyder es una sinfonía de sensaciones. El motor central trasero longitudinal de 3.387 cc, con sus 320 CV, ruge con una melodía embriagadora que se filtra directamente al habitáculo. La aceleración de 0 a 100 km/h en solo 5 segundos te pega al asiento, mientras que la velocidad máxima de 265 km/h te hace sentir el viento en la cara. La transmisión automática de 7 velocidades con doble embrague es una maravilla de la ingeniería, ofreciendo cambios rápidos y precisos que te mantienen siempre en la zona óptima de potencia. La suspensión McPherson en ambos ejes, junto con los frenos de disco ventilados, garantizan un agarre excepcional y una capacidad de frenado impresionante, transmitiendo una confianza absoluta en cada curva. Es un coche que te hace sentir vivo, que te conecta con la carretera de una manera visceral y emocionante.
Diseño y estética
El diseño del Boxster Spyder es una declaración de intenciones. Con sus 4.342 mm de largo, 1.801 mm de ancho y apenas 1.231 mm de alto, su silueta es baja, ancha y agresiva. Las líneas fluidas y aerodinámicas no solo son estéticamente atractivas, sino que también contribuyen a su rendimiento. La capota de lona ligera, que se acciona manualmente, subraya su carácter purista y su compromiso con la reducción de peso. Las llantas de 19 pulgadas, con neumáticos 235/35 R19 Z delante y 265/35 R19 Z detrás, no solo le dan una postura imponente, sino que también son clave para su excepcional agarre. Cada detalle, desde los faros hasta las tomas de aire, está diseñado para evocar velocidad y emoción, creando una obra de arte sobre ruedas.
Tecnología y características
Aunque el Boxster Spyder se enfoca en la simplicidad y la ligereza, no escatima en tecnología esencial para el rendimiento. Su motor de inyección directa con admisión variable es un prodigio de la ingeniería, optimizando la entrega de potencia y la eficiencia. La transmisión PDK de doble embrague es una de las mejores del mercado, ofreciendo una experiencia de conducción deportiva y eficiente. Los frenos de disco ventilados de 318 mm delante y 299 mm detrás, junto con los estabilizadores en ambos ejes, garantizan un control y una seguridad excepcionales. Aunque carece de algunas de las comodidades modernas, su tecnología se centra en mejorar la experiencia de conducción, haciendo que cada viaje sea una aventura.
Competencia
En su época, el Porsche Boxster Spyder se enfrentaba a rivales de la talla del Lotus Exige, el Audi TT RS Roadster o incluso algunas versiones del BMW Z4. Sin embargo, el Spyder se distinguía por su enfoque purista, su ligereza y su excepcional equilibrio dinámico. Mientras que otros ofrecían más lujo o tecnología, el Boxster Spyder apostaba por la conexión directa con la carretera, la emoción de la conducción a cielo abierto y un rendimiento que pocos podían igualar en su segmento. Era un coche para aquellos que valoraban la experiencia de conducción por encima de todo.
Conclusión
El Porsche Boxster Spyder de 2010 es más que un coche; es una filosofía. Es la encarnación de la deportividad pura, un vehículo que te invita a sentir cada curva, cada aceleración y cada frenada. Su diseño atemporal, su rendimiento emocionante y su enfoque en la ligereza lo convierten en un clásico instantáneo y en una pieza codiciada por los entusiastas. Es un coche que te roba el corazón y te deja con una sonrisa imborrable en la cara después de cada viaje. Una verdadera obra maestra de la ingeniería alemana que perdura en el tiempo.