Porsche Cayenne Diesel · 245 CV (2012-2014)

2010
Gasóleo
AWD
Automático 8v
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Porsche Cayenne - Vista 4

Especificaciones y análisis del Porsche Cayenne

Potencia

245CV

Par

550Nm

Consumo

7.2l/100

Emisiones

189g/km

0-100 km/h

7.6s

Vel. Máx.

220km/h

Peso

2155kg

Precio

70,862

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Automático 8v

Tracción

AWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

670 L

Depósito

85 L

Potencia

180 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima245 CV / 180 kW
Par máximo550 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónAutomático 8v

Capacidades

Depósito85 L
Maletero670 L

Análisis detallado del Porsche Cayenne Diesel · 245 CV (2012-2014)

Descripción general

El Porsche Cayenne Diesel de 2010, con su motor de 245 CV, marcó un hito al combinar la deportividad inherente a Porsche con la eficiencia de un motor diésel. Este SUV de lujo no solo ofrecía un rendimiento impresionante, sino también una versatilidad que lo hacía ideal tanto para la carretera como para aventuras más allá del asfalto. Su llegada al mercado fue un claro mensaje de que la marca estaba dispuesta a adaptarse a las nuevas demandas sin renunciar a su esencia.

Experiencia de conducción

Al volante del Cayenne Diesel, la sensación es de poder y control absoluto. El motor V6 de 3.0 litros, con sus 245 CV y 550 Nm de par, empuja con una contundencia sorprendente para un vehículo de su tamaño, permitiéndole acelerar de 0 a 100 km/h en solo 7.6 segundos. La transmisión automática de 8 velocidades es suave y rápida, optimizando la entrega de potencia. A pesar de su peso de más de dos toneladas, la dirección hidráulica ofrece una precisión notable, y la suspensión, con paralelogramo deformable en ambos ejes, absorbe las irregularidades del terreno con maestría, brindando un confort excepcional sin sacrificar la agilidad en curvas. Es un coche que invita a devorar kilómetros con una sonrisa, sintiendo la carretera bajo control en todo momento.

Diseño y estética

El diseño del Porsche Cayenne Diesel de 2010 es una declaración de intenciones. Sus líneas robustas y atléticas, con una longitud de 4846 mm y una anchura de 1939 mm, le confieren una presencia imponente. Los faros delanteros, característicos de Porsche, se integran a la perfección con la parrilla, mientras que la zaga, con sus pilotos LED, refuerza su imagen moderna y sofisticada. El interior es un santuario de lujo y ergonomía, con materiales de alta calidad y un diseño centrado en el conductor. Los asientos, cómodos y envolventes, invitan a largos viajes, y el maletero de 670 litros ofrece una capacidad de carga excepcional para cualquier aventura.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el Cayenne Diesel de 2010 no escatimaba en recursos. Su motor diésel de inyección directa por conducto común, con turbo de geometría variable e intercooler, era un prodigio de la ingeniería, ofreciendo un equilibrio perfecto entre rendimiento y eficiencia. La tracción integral permanente (AWD) garantizaba una adherencia óptima en cualquier superficie, mientras que la transmisión automática de 8 velocidades con convertidor de par aseguraba cambios suaves y precisos. Además, contaba con un sistema Stop&Start para reducir el consumo en ciudad y un chasis con frenos de disco ventilados de gran tamaño (350 mm delante y 330 mm detrás) para una frenada potente y segura. La dirección asistida hidráulicamente, aunque no sensible a la velocidad, ofrecía una respuesta directa y comunicativa.

Competencia

En el segmento de los SUV de lujo, el Porsche Cayenne Diesel se enfrentaba a rivales de la talla del BMW X5, el Mercedes-Benz ML y el Audi Q7. Frente a ellos, el Cayenne destacaba por su enfoque más deportivo y su inconfundible ADN Porsche, ofreciendo una experiencia de conducción más dinámica y emocionante. Si bien sus competidores ofrecían un lujo y confort similares, el Cayenne se desmarcaba por su capacidad para combinar la versatilidad de un SUV con las prestaciones de un deportivo de alta gama.

Conclusión

El Porsche Cayenne Diesel de 2010 fue un vehículo que supo conquistar a un público exigente, ofreciendo una combinación única de lujo, rendimiento y eficiencia. Su motor diésel, lejos de restarle carácter, le otorgaba una autonomía y un par motor excepcionales, convirtiéndolo en un compañero ideal para cualquier tipo de viaje. Su diseño atemporal, su interior suntuoso y su tecnología avanzada lo consolidaron como una referencia en su segmento. Es un coche que, a pesar del paso del tiempo, sigue siendo un objeto de deseo para aquellos que buscan la emoción de Porsche en un formato más versátil.