Especificaciones y análisis del Porsche Cayenne
Potencia
299CV
Par
400Nm
Consumo
11.2l/100
Emisiones
263g/km
0-100 km/h
7.5s
Vel. Máx.
230km/h
Peso
2070kg
Precio
69,499€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 6v
AWD
5 / 5 puertas
670 L
85 L
220 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Porsche Cayenne · 299 CV (2012-2014)
Descripción general
El Porsche Cayenne de 2010, en su versión estándar, representa la audacia de Porsche al incursionar en el segmento SUV. Con un motor de gasolina de 3.598 cc y 299 CV, este modelo no solo prometía el lujo y la calidad esperados de la marca, sino también un rendimiento sorprendente para un vehículo de su tamaño. Su precio de 69.499 € lo posicionaba en un segmento premium, ofreciendo una combinación de deportividad y versatilidad que pocos rivales podían igualar en su momento.
Experiencia de conducción
Conducir el Cayenne de 2010 es una experiencia que mezcla la robustez de un SUV con la agilidad de un deportivo. Sus 299 CV se sienten con una respuesta inmediata, catapultando sus 2.070 kg de 0 a 100 km/h en solo 7.5 segundos, una cifra impresionante para la época. La dirección hidráulica, aunque no es sensible a la velocidad, ofrece una conexión genuina con la carretera, mientras que la suspensión de paralelogramo deformable, tanto delantera como trasera, asegura un confort notable sin sacrificar la estabilidad en curvas. Los frenos de disco ventilados, de 350 mm delante y 330 mm detrás, garantizan una detención potente y segura, transmitiendo una gran confianza al conductor. A pesar de su tamaño, el Cayenne se siente sorprendentemente ágil y capaz, invitando a disfrutar de cada trayecto.
Diseño y estética
El diseño del Porsche Cayenne de 2010 es una evolución de sus predecesores, manteniendo la esencia deportiva de la marca pero adaptándola a las proporciones de un SUV. Sus líneas fluidas y musculosas, con una longitud de 4.846 mm y una anchura de 1.939 mm, le otorgan una presencia imponente en la carretera. Los faros delanteros, característicos de Porsche, se integran armoniosamente con la parrilla, mientras que la zaga, con sus pilotos estilizados, refuerza su carácter dinámico. El interior, con capacidad para cinco ocupantes, destaca por la calidad de sus materiales y un diseño ergonómico que pone al conductor en el centro de la experiencia. El maletero de 670 litros ofrece una gran versatilidad para el día a día o para viajes largos.
Tecnología y características
Aunque el Cayenne de 2010 no contaba con las últimas innovaciones en electrificación, su tecnología se centraba en optimizar el rendimiento y la eficiencia de su motor de gasolina. La inyección directa y la admisión variable contribuían a una entrega de potencia suave y un consumo combinado de 11.2 l/100km, razonable para un motor de esta cilindrada y potencia. La transmisión manual de 6 velocidades, aunque poco común en SUVs de este segmento, ofrecía un control total sobre la potencia. El sistema de tracción integral (AWD) garantizaba una excelente adherencia en diversas condiciones, mientras que la suspensión y los frenos, con discos ventilados de gran tamaño, eran testimonio de la ingeniería de alto nivel de Porsche. La ausencia de un sistema Stop&Start es un detalle a considerar, pero no empaña la experiencia tecnológica general.
Competencia
En el competitivo segmento de los SUV premium, el Porsche Cayenne de 2010 se enfrentaba a duros rivales como el BMW X5, el Mercedes-Benz ML y el Audi Q7. Cada uno de ellos ofrecía sus propias fortalezas, pero el Cayenne se distinguía por su enfoque más deportivo y su inconfundible ADN Porsche. Mientras que el X5 destacaba por su dinamismo, el ML por su confort y el Q7 por su espacio, el Cayenne lograba un equilibrio excepcional entre rendimiento, lujo y capacidad todoterreno, consolidándose como una opción muy atractiva para aquellos que buscaban un SUV con alma de deportivo.
Conclusión
El Porsche Cayenne de 2010 es un vehículo que marcó un hito en la historia de la marca, demostrando que un SUV podía ser tan emocionante y prestacional como un deportivo. Su combinación de un potente motor de gasolina, un diseño imponente y una tecnología enfocada en el rendimiento lo convierten en una opción fascinante para quienes buscan un coche con carácter. Aunque su consumo y la ausencia de ciertas tecnologías modernas pueden ser puntos a considerar, la experiencia de conducción y el prestigio de la marca Porsche lo mantienen como un referente en su categoría. Es un coche que, sin duda, deja una huella emocional en quien lo conduce.