Especificaciones y análisis del Porsche Cayman
Potencia
265CV
Par
300Nm
Consumo
9.1l/100
Emisiones
214g/km
0-100 km/h
5.7s
Vel. Máx.
263km/h
Peso
1435kg
Precio
60,929€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 7v
RWD
2 / 3 puertas
260 L
65 L
195 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Porsche Cayman PDK · 265 CV (2010-2012)
Descripción general
El Porsche Cayman PDK de 2009 es una joya de la ingeniería alemana, un deportivo puro que encarna la esencia de la marca. Con su motor central y su diseño atemporal, este modelo se posiciona como una opción fascinante para aquellos que buscan una experiencia de conducción inigualable, combinando rendimiento y elegancia en un paquete compacto y emocionante. Su precio de 60.929 € en 2011 lo situaba en un segmento premium, justificado por su pedigrí y sus prestaciones.
Experiencia de conducción
Conducir el Cayman PDK es una experiencia visceral. El motor bóxer de 2.9 litros y 265 CV, situado justo detrás del habitáculo, emite una sinfonía embriagadora que te envuelve. La aceleración de 0 a 100 km/h en 5.7 segundos es contundente, y la velocidad máxima de 263 km/h te permite sentir la carretera de una manera única. La dirección es precisa, la suspensión tipo McPherson en ambos ejes ofrece un equilibrio perfecto entre confort y deportividad, y los frenos de disco ventilados de 318 mm delante y 299 mm detrás garantizan una detención potente y segura. Cada curva se convierte en una invitación a explorar los límites, con una agilidad y un aplomo que solo un Porsche puede ofrecer. La transmisión automática PDK de 7 velocidades, con sus dos embragues, es una maravilla de la ingeniería, ofreciendo cambios de marcha instantáneos y suaves que maximizan el rendimiento y la emoción.
Diseño y estética
El diseño del Porsche Cayman de 2009 es una declaración de intenciones. Sus líneas fluidas y atléticas, con una silueta baja y ancha, transmiten dinamismo y elegancia. Las dimensiones compactas, con 4347 mm de largo, 1801 mm de ancho y 1304 mm de alto, junto con una distancia entre ejes de 2415 mm, le otorgan una presencia imponente y equilibrada. Los detalles, desde los faros distintivos hasta las tomas de aire laterales, están pensados para optimizar la aerodinámica y la estética. Es un coche que, incluso parado, irradia velocidad y sofisticación, un clásico instantáneo que no pasa de moda.
Tecnología y características
Bajo su piel, el Cayman PDK es un compendio de tecnología. El motor de gasolina de 6 cilindros, con 2893 cc, inyección indirecta y admisión variable, es un prodigio de eficiencia y potencia. La relación de compresión de 11.5 y el bloque y culata de aluminio demuestran un compromiso con la ligereza y el rendimiento. La transmisión automática de doble embrague PDK de 7 velocidades es una de las más avanzadas de su época, ofreciendo una experiencia de conducción deportiva y eficiente. Aunque carece de sistemas modernos como el Stop/Start, su enfoque en la mecánica pura y la conexión con el conductor lo hacen especial. Los neumáticos de 205/55 R17 delante y 235/50 R17 detrás, montados en llantas de 7x17 y 8.5x17 respectivamente, aseguran un agarre excepcional.
Competencia
En su segmento, el Porsche Cayman PDK de 2009 se enfrentaba a rivales de la talla del Audi TT RS, el BMW Z4 M Coupé o el Lotus Evora. Cada uno ofrecía su propia interpretación de la deportividad, pero el Cayman destacaba por su equilibrio, su motor central y la inigualable sensación de conducción que solo Porsche puede ofrecer. Su combinación de prestaciones, diseño y tecnología lo convertía en una opción muy atractiva para los entusiastas de los deportivos.
Conclusión
El Porsche Cayman PDK de 2009 es más que un coche; es una experiencia. Es la materialización de la pasión por la conducción, un vehículo que te conecta con la carretera de una manera profunda y emocionante. Su diseño atemporal, su motor potente y su tecnología avanzada lo convierten en un clásico moderno. Para aquellos que buscan un deportivo puro, sin concesiones, que ofrezca emociones fuertes y una calidad de construcción excepcional, el Cayman PDK es una elección que nunca decepciona. Es un coche para disfrutar, para sentir, para vivir cada kilómetro con una sonrisa.




