Renault Avantime 3.0 V6 Dynamique · 207 CV (2001-2003)

2001
Gasolina
FWD
Manual 6v
Renault Avantime - Vista 1
Renault Avantime - Vista 2
Renault Avantime - Vista 3
Renault Avantime - Vista 4

Especificaciones y análisis del Renault Avantime

Potencia

207CV

Par

285Nm

Consumo

11.3l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

8.6s

Vel. Máx.

220km/h

Peso

1741kg

Precio

36,950

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 6v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

530 L

Depósito

80 L

Potencia

152 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima207 CV / 152 kW
Par máximo285 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 6v

Capacidades

Depósito80 L
Maletero530 L

Análisis detallado del Renault Avantime 3.0 V6 Dynamique · 207 CV (2001-2003)

Descripción general

El Renault Avantime 3.0 V6 Dynamique de 2001 es una audaz declaración de intenciones, un vehículo que desafió las convenciones y se atrevió a ser diferente. Con su motor de gasolina de 207 CV y una estética inconfundible, este coche no es solo un medio de transporte, sino una experiencia, una pieza de coleccionista que evoca nostalgia y admiración por su singularidad.

Experiencia de conducción

Conducir el Avantime es sumergirse en una atmósfera de exclusividad. Su motor V6 de 2.9 litros, con 207 CV, ofrece una respuesta enérgica y un sonido embriagador que invita a disfrutar de cada trayecto. La aceleración de 0 a 100 km/h en 8.6 segundos y una velocidad máxima de 220 km/h demuestran que, a pesar de su tamaño, no renuncia a las prestaciones. La suspensión, tipo McPherson delante y eje rígido detrás, proporciona un equilibrio entre confort y estabilidad, aunque su peso de 1741 kg se hace notar en curvas cerradas. Es un coche para saborear la carretera, para viajes largos donde su habitáculo espacioso y su diseño único se convierten en protagonistas.

Diseño y estética

El diseño del Avantime es, sin duda, su rasgo más distintivo y polarizador. Con sus 4642 mm de largo, 1826 mm de ancho y 1627 mm de alto, su silueta de monovolumen coupé es inconfundible. Las grandes puertas sin marco, el techo panorámico y la ausencia de pilar B crean una sensación de amplitud y luminosidad interior sin igual. Es un coche que no deja indiferente, una obra de arte sobre ruedas que rompe con los cánones establecidos y que, con el tiempo, ha ganado el estatus de icono de diseño. Su estética futurista y atemporal lo convierte en un clásico instantáneo.

Tecnología y características

A pesar de ser un coche de principios de los 2000, el Avantime incorporaba soluciones tecnológicas interesantes para su época. Su motor V6 de 2946 cc, con inyección indirecta y 4 válvulas por cilindro, ofrecía una potencia considerable. La transmisión manual de 6 velocidades permitía un control preciso sobre la entrega de potencia. En cuanto a seguridad, contaba con frenos de disco ventilados de 305 mm delante y discos de 265 mm detrás, garantizando una buena capacidad de frenado. La dirección de cremallera contribuía a una conducción más directa. Aunque no disponía de las ayudas a la conducción actuales, su enfoque en el confort y la habitabilidad era una forma de tecnología aplicada al bienestar del conductor y los pasajeros.

Competencia

El Renault Avantime, por su concepto único de coupé monovolumen, no tenía rivales directos en el mercado. Era una categoría en sí mismo. Sin embargo, si buscamos vehículos que ofrecieran una combinación de espacio, lujo y un cierto aire de exclusividad, podríamos considerar modelos como el Mercedes-Benz Clase E Coupé o el Volvo C70, aunque ninguno de ellos replicaba la audacia y la visión del Avantime. Su verdadera competencia era la falta de comprensión del mercado hacia un coche tan adelantado a su tiempo.

Conclusión

El Renault Avantime 3.0 V6 Dynamique es más que un coche; es una declaración de principios, un experimento valiente que, aunque no tuvo el éxito comercial esperado, dejó una huella imborrable en la historia del automóvil. Su diseño vanguardista, su potente motor V6 y su enfoque en el confort y la exclusividad lo convierten en un vehículo fascinante para aquellos que aprecian la originalidad y la audacia. Es un coche para disfrutar, para coleccionar y para recordar que, a veces, la belleza reside en lo inesperado. Una joya incomprendida que hoy brilla con luz propia.