Renault Latitude Privilege 2.0 Energy dCi 130 · 131 CV (2014)

2014
Gasóleo
FWD
Manual 6v
Renault Latitude - Vista 1
Renault Latitude - Vista 2
Renault Latitude - Vista 3
Renault Latitude - Vista 4

Especificaciones y análisis del Renault Latitude

Potencia

131CV

Par

320Nm

Consumo

4.8l/100

Emisiones

126g/km

0-100 km/h

11.4s

Vel. Máx.

196km/h

Peso

1680kg

Precio

29,900

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 6v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

477 L

Depósito

66 L

Potencia

96 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima131 CV / 96 kW
Par máximo320 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 6v

Capacidades

Depósito66 L
Maletero477 L

Análisis detallado del Renault Latitude Privilege 2.0 Energy dCi 130 · 131 CV (2014)

Descripción general

El Renault Latitude Privilege 2.0 Energy dCi 130 de 2014 se presenta como una berlina de corte clásico, diseñada para ofrecer un confort superior y una experiencia de conducción relajada. Con su motor diésel de 131 CV y un enfoque en la eficiencia, este modelo buscaba hacerse un hueco en el segmento de las berlinas medias-grandes, apostando por la habitabilidad y un equipamiento generoso.

Experiencia de conducción

Al volante del Latitude, la sensación predominante es de suavidad y aplomo. El motor diésel de 131 CV, aunque no es un derroche de potencia, mueve el conjunto con suficiente soltura para el día a día y viajes largos, destacando por su bajo consumo. La suspensión, orientada al confort, filtra eficazmente las irregularidades del asfalto, haciendo de cada trayecto una experiencia placentera. La dirección electrohidráulica, sensible a la velocidad, ofrece una asistencia adecuada, facilitando las maniobras en ciudad y aportando estabilidad en carretera. No es un coche para emociones fuertes, sino para disfrutar de la tranquilidad y el espacio.

Diseño y estética

El diseño del Renault Latitude es sobrio y elegante, con líneas que buscan la atemporalidad. Su carrocería de cuatro puertas y sus generosas dimensiones (4897 mm de largo) le confieren una presencia imponente en la carretera. En el interior, la amplitud es la protagonista, con un habitáculo diseñado para acoger cómodamente a cinco ocupantes. Los materiales y acabados, aunque no buscan el lujo ostentoso, transmiten una sensación de solidez y buena factura, con un diseño funcional y ergonómico. La estética general es discreta, sin estridencias, pensada para un público que valora la funcionalidad y el confort por encima de la deportividad.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el Latitude Privilege 2.0 Energy dCi 130 incorporaba elementos que, para su época, ofrecían un buen nivel de confort y seguridad. Contaba con un sistema de inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler para optimizar el rendimiento del motor diésel. El sistema Stop&Start contribuía a la eficiencia en el consumo. En cuanto a la transmisión, una caja manual de seis velocidades gestionaba la potencia de forma eficaz. La dirección electrohidráulica con asistencia variable según la velocidad y una suspensión bien calibrada completaban un conjunto pensado para la comodidad y la seguridad en la conducción.

Competencia

En el competitivo segmento de las berlinas, el Renault Latitude se enfrentaba a duros rivales como el Volkswagen Passat, el Ford Mondeo, el Opel Insignia o el Citroën C5. Frente a ellos, el Latitude apostaba por un mayor confort de marcha, una habitabilidad superior y un equipamiento de serie más completo en sus versiones altas, a menudo con un precio más ajustado. Sin embargo, su diseño más conservador y una menor oferta de motorizaciones potentes podían restarle atractivo frente a competidores con una imagen más dinámica o una gama más amplia.

Conclusión

El Renault Latitude Privilege 2.0 Energy dCi 130 de 2014 es una berlina que destaca por su confort, amplitud y eficiencia. Es un coche ideal para aquellos que buscan un vehículo espacioso para viajar en familia o para largos desplazamientos, valorando la comodidad y un consumo contenido. Aunque no es el más emocionante de conducir ni el más vanguardista en diseño, su propuesta de valor se centra en la funcionalidad, la fiabilidad y un equipamiento generoso. Una opción sensata y confortable para quienes priorizan el bienestar a bordo.