Especificaciones y análisis del Renault Mégane
Potencia
116CV
Par
158Nm
Consumo
7.7l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
8.9s
Vel. Máx.
199km/h
Peso
1135kg
Precio
17,490€
Resumen técnico
Gasolina
Manual 5v
FWD
5 / 5 puertas
348 L
60 L
85 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Renault Megane Berlina 1.8 16v Fairway · 116 CV (2001-2002)
Descripción general
El Renault Mégane 5p 1.8 Gasolina de 116 CV, en su versión Fairway de 1999, es un coche que evoca la esencia de una época donde la funcionalidad y la comodidad familiar eran primordiales. Con un motor de 1.8 litros y 116 caballos, este Mégane ofrecía una propuesta equilibrada para el día a día, combinando un rendimiento adecuado con un consumo razonable para su segmento. Su diseño, aunque discreto, se integraba perfectamente en el paisaje automovilístico de finales de los 90, prometiendo viajes placenteros y una experiencia de conducción sin complicaciones.
Experiencia de conducción
Al volante del Mégane 1.8 16v Fairway, la sensación es de una conducción suave y predecible. El motor de 116 CV, con su inyección indirecta, entrega la potencia de manera lineal, permitiendo una aceleración de 0 a 100 km/h en 8.9 segundos, lo cual era bastante respetable para su tiempo. La dirección de cremallera, aunque carente de la precisión de sistemas más modernos, ofrecía una respuesta adecuada para la conducción urbana y en carretera. La suspensión, tipo McPherson delante y de rueda tirada con elemento torsional detrás, estaba diseñada para absorber las irregularidades del camino, priorizando el confort de los ocupantes. En general, la experiencia es de un coche honesto, sin grandes pretensiones deportivas, pero que cumple con creces su cometido de transporte cómodo y seguro.
Diseño y estética
El diseño del Renault Mégane de 1999, en su variante de 5 puertas, es un reflejo de la estética automovilística de finales de los años 90. Sus líneas son suaves y redondeadas, sin aristas pronunciadas, lo que le confiere una apariencia amigable y atemporal. La versión Fairway, aunque no destacaba por grandes lujos, ofrecía un aspecto sobrio y funcional. Con una longitud de 4129 mm y una anchura de 1699 mm, su tamaño era ideal para la ciudad y para viajes familiares, ofreciendo un habitáculo espacioso y un maletero de 348 litros, suficiente para el equipaje cotidiano. El diseño interior, aunque sencillo, estaba pensado para la ergonomía y la facilidad de uso, con controles intuitivos y una buena visibilidad.
Tecnología y características
En el ámbito tecnológico, el Mégane 1.8 16v Fairway de 1999 incorporaba las soluciones habituales de su época. Su motor de 1.8 litros y 16 válvulas, con inyección indirecta, era una muestra de la ingeniería de Renault para ofrecer un buen equilibrio entre potencia y eficiencia. La transmisión manual de 5 velocidades era la opción estándar, proporcionando un control directo sobre la entrega de potencia. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados de 280 mm en la parte delantera y discos de 238 mm en la trasera, garantizando una frenada efectiva. Aunque no disponía de las avanzadas ayudas a la conducción de los vehículos actuales, su tecnología estaba orientada a ofrecer una experiencia de conducción fiable y segura para el conductor y los pasajeros.
Competencia
En su momento, el Renault Mégane 1.8 16v Fairway se enfrentaba a una dura competencia en el segmento de los compactos. Sus principales rivales incluían modelos como el Volkswagen Golf, el Opel Astra, el Ford Focus y el Peugeot 306. Cada uno de ellos ofrecía sus propias virtudes, ya fuera en términos de diseño, rendimiento o equipamiento. El Mégane se posicionaba como una opción equilibrada, destacando por su confort de marcha y su practicidad, buscando atraer a aquellos compradores que valoraban la fiabilidad y la comodidad en su vehículo familiar.
Conclusión
El Renault Mégane 5p 1.8 Gasolina de 116 CV, en su versión Fairway de 1999, es un coche que, a pesar del paso del tiempo, sigue siendo un testimonio de la ingeniería de Renault en la era pre-milenio. Ofrece una experiencia de conducción honesta y confortable, ideal para quienes buscan un vehículo práctico y fiable. Su diseño atemporal y su mecánica robusta lo convierten en una opción interesante para aquellos que aprecian la sencillez y la funcionalidad. Es un coche que, sin grandes alardes, cumple con su promesa de transporte eficiente y agradable, dejando una huella de confort y practicidad en la memoria de quienes lo condujeron.