Rover 25 5p 1.6 Classic (109 CV) Stepspeed · 109 CV (2000-2004)

2000
Gasolina
FWD
Automático Múltiplesv

Especificaciones y análisis del Rover 25

Potencia

109CV

Par

138Nm

Consumo

7.5l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

11s

Vel. Máx.

177km/h

Peso

-kg

Precio

16,540

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático Múltiplesv

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

304 L

Depósito

50 L

Potencia

80 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima109 CV / 80 kW
Par máximo138 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático Múltiplesv

Capacidades

Depósito50 L
Maletero304 L

Análisis detallado del Rover 25 5p 1.6 Classic (109 CV) Stepspeed · 109 CV (2000-2004)

Descripción general

El Rover 25 de 2000, en su versión 5 puertas 1.6 Classic con 109 CV y transmisión Stepspeed, se presenta como una opción compacta y distintiva. Con un precio de 16.540 euros en su momento, este vehículo buscaba ofrecer una alternativa con un toque de elegancia británica en el segmento de los utilitarios.

Experiencia de conducción

Al volante del Rover 25, la sensación es de un coche ágil y manejable, ideal para el entorno urbano. Sus 109 CV, gestionados por la transmisión automática Stepspeed, prometen una respuesta suave y progresiva, aunque sin grandes alardes deportivos. La suspensión, tipo McPherson delante y de rueda tirada detrás, busca un equilibrio entre confort y estabilidad, haciendo que los trayectos sean agradables. La dirección, aunque no se especifica su tipo, contribuye a una conducción sencilla y predecible. Es un coche que invita a disfrutar de la conducción relajada, sin prisas, valorando la comodidad en el día a día.

Diseño y estética

El diseño del Rover 25 de 2000 mantiene la esencia de la marca, con líneas que combinan la tradición británica con un toque de modernidad para la época. Sus 3990 mm de longitud, 1690 mm de anchura y 1420 mm de altura le otorgan una silueta compacta y proporcionada. Las cinco puertas facilitan el acceso al habitáculo, mientras que el maletero de 304 litros ofrece una capacidad razonable para su segmento. Los detalles estéticos, aunque discretos, buscan transmitir una imagen de coche bien acabado y con personalidad propia, diferenciándose de sus competidores más generalistas.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el Rover 25 1.6 Classic de 2000 incorpora un motor de gasolina de 1588 cc con 4 cilindros y 16 válvulas, que entrega 109 CV a 6000 rpm y un par motor de 138 Nm a 4500 rpm. La inyección indirecta y la construcción en aluminio del bloque y la culata son características de su ingeniería. La transmisión automática Stepspeed, con múltiples marchas, es un punto clave que busca la comodidad en la conducción. En cuanto a seguridad, cuenta con frenos de disco delanteros de 262 mm y tambores traseros de 239 mm, y una suspensión que, aunque no es la más sofisticada, cumple su función. Su etiqueta DGT B indica que cumple con las normativas de emisiones de la época.

Competencia

En el año 2000, el Rover 25 se enfrentaba a una dura competencia en el segmento de los compactos. Sus rivales directos incluían modelos como el Volkswagen Golf, el Ford Focus, el Opel Astra o el Renault Mégane. Frente a ellos, el Rover 25 intentaba destacar por su diseño distintivo y un cierto aire de exclusividad, aunque en prestaciones y tecnología pura, algunos de sus competidores podían ofrecer opciones más avanzadas o potentes. Su transmisión automática Stepspeed era un diferenciador en un mercado donde las cajas manuales eran la norma.

Conclusión

El Rover 25 5p 1.6 Classic Stepspeed de 2000 es un coche que, a pesar de su edad, evoca una época donde la marca británica aún tenía un lugar en el mercado. Ofrece una conducción cómoda y un diseño con personalidad, ideal para quienes buscan un compacto con un toque diferente. No es el más rápido ni el más tecnológico, pero su encanto reside en su equilibrio y en la experiencia de conducción relajada que propone. Es un vehículo que, bien mantenido, puede seguir ofreciendo satisfacciones a sus propietarios, especialmente a aquellos que valoran la historia y el carácter de la marca Rover.