Rover 75 Tourer 1.8 T Classic Aut. · 150 CV (2004-2006)

2004
Gasolina
FWD
Automático 5v
Rover 75 - Vista 1
Rover 75 - Vista 2
Rover 75 - Vista 3
Rover 75 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Rover 75

Potencia

150CV

Par

215Nm

Consumo

8.9l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

10.8s

Vel. Máx.

200km/h

Peso

1550kg

Precio

31,272

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

400 L

Depósito

65 L

Potencia

110 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima150 CV / 110 kW
Par máximo215 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 5v

Capacidades

Depósito65 L
Maletero400 L

Análisis detallado del Rover 75 Tourer 1.8 T Classic Aut. · 150 CV (2004-2006)

Descripción general

El Rover 75 Tourer 1.8 T Classic Aut. de 2004 es una berlina familiar que evoca la elegancia británica con un toque de modernidad. Este modelo, con su motor de gasolina de 150 CV y transmisión automática, ofrecía una propuesta interesante para quienes buscaban confort y distinción en un vehículo práctico.

Experiencia de conducción

Al volante del Rover 75 Tourer, la sensación predominante es de suavidad y refinamiento. El motor 1.8 turbo, aunque no es un derroche de potencia, entrega sus 150 CV de manera progresiva, ideal para una conducción relajada. La caja de cambios automática de 5 velocidades contribuye a un viaje sin sobresaltos, aunque puede sentirse algo lenta en ocasiones. La suspensión, de tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, filtra eficazmente las irregularidades del terreno, proporcionando un confort de marcha notable. La dirección, de cremallera, ofrece una respuesta adecuada para un coche de su categoría, sin ser excesivamente deportiva. En general, es un coche para disfrutar de los viajes largos con tranquilidad, donde la comodidad de sus asientos y el aislamiento acústico juegan un papel fundamental.

Diseño y estética

El diseño del Rover 75 Tourer es un claro homenaje a la tradición automovilística británica, con líneas clásicas y elegantes que lo distinguen de sus contemporáneos. Su carrocería familiar no sacrifica la estética, integrando el espacio adicional de carga de forma armoniosa. Los detalles cromados, la parrilla frontal característica y los faros redondos le confieren una personalidad única y atemporal. En el interior, la atmósfera es de lujo discreto, con materiales de calidad y un salpicadero bien organizado que combina elementos retro con funcionalidades modernas. La habitabilidad es buena, especialmente en las plazas traseras, y el maletero de 400 litros es suficiente para las necesidades de una familia.

Tecnología y características

En 2004, el Rover 75 Tourer incorporaba una tecnología que, si bien no era puntera, cumplía con las expectativas de su segmento. El motor 1.8 turbo con inyección indirecta e intercooler ofrecía un buen equilibrio entre rendimiento y eficiencia para la época. La transmisión automática de 5 velocidades era un estándar en vehículos de este tipo. En cuanto a seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delante y macizos detrás, y un chasis bien equilibrado. Aunque no destacaba por innovaciones electrónicas, su equipamiento estaba enfocado en el confort y la funcionalidad, con elementos como el aire acondicionado, elevalunas eléctricos y un sistema de sonido competente.

Competencia

En su momento, el Rover 75 Tourer competía con modelos como el Audi A4 Avant, el BMW Serie 3 Touring, el Mercedes-Benz Clase C Estate y el Volvo V50. Frente a ellos, el Rover ofrecía una alternativa con un diseño más distintivo y un enfoque en el confort y la elegancia, a menudo con un precio más competitivo. Si bien sus rivales alemanes podían ofrecer una dinámica de conducción más deportiva o una tecnología más avanzada, el Rover se desmarcaba por su carácter británico y su ambiente interior acogedor.

Conclusión

El Rover 75 Tourer 1.8 T Classic Aut. es un coche que, a pesar de los años, sigue conservando un encanto especial. Es una opción ideal para quienes buscan un vehículo familiar con personalidad, que priorice el confort y la elegancia sobre las prestaciones puras. Su diseño atemporal y su interior acogedor lo convierten en un clásico moderno, perfecto para disfrutar de la carretera con un toque de distinción. Aunque su consumo combinado de 8.9 l/100km y su aceleración de 0 a 100 km/h en 10.8 segundos no lo hacen un coche deportivo, su suavidad de marcha y su ambiente relajado lo compensan con creces.