Rover MGF 1.8i VVC 00MY · 145 CV (2000-2002)

2000
Gasolina
RWD
Manual 5v
Rover MGF - Vista 1
Rover MGF - Vista 2
Rover MGF - Vista 3
Rover MGF - Vista 4

Especificaciones y análisis del Rover MGF

Potencia

145CV

Par

174Nm

Consumo

7.8l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

7.7s

Vel. Máx.

209km/h

Peso

1145kg

Precio

27,860

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 5v

Tracción

RWD

Plazas

2 / 2 puertas

Maletero

210 L

Depósito

50 L

Potencia

107 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima145 CV / 107 kW
Par máximo174 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito50 L
Maletero210 L

Análisis detallado del Rover MGF 1.8i VVC 00MY · 145 CV (2000-2002)

Descripción general

El Rover MGF 1.8i VVC 00MY, producido entre 2000 y 2002, es un roadster que encarna la esencia de la conducción británica. Con su motor de gasolina de 1.8 litros y 145 CV, este coche de tracción trasera y cambio manual de 5 velocidades promete una experiencia al volante pura y emocionante. Su diseño compacto y ligero, con solo 1145 kg de peso, lo convierte en un vehículo ágil y divertido, ideal para aquellos que buscan sentir la carretera en cada curva. Su precio de 27.860 € en su momento lo posicionaba como una opción atractiva para los amantes de los descapotables deportivos.

Experiencia de conducción

Conducir el MGF 1.8i VVC es una experiencia que despierta los sentidos. La aceleración de 0 a 100 km/h en 7.7 segundos y una velocidad máxima de 209 km/h, combinadas con su tracción trasera y suspensión de paralelogramo deformable, ofrecen una agilidad y un agarre excepcionales. El motor de 145 CV, que alcanza su potencia máxima a 7000 rpm, emite un sonido embriagador que invita a subir de vueltas. La dirección de cremallera, aunque sin asistencia variable, proporciona una conexión directa con el asfalto, transmitiendo cada detalle de la carretera. Es un coche que te hace sentir parte de la máquina, una extensión de tus propias intenciones, ideal para disfrutar de la conducción deportiva en carreteras sinuosas.

Diseño y estética

El diseño del Rover MGF es un clásico atemporal. Sus líneas suaves y fluidas, con una silueta baja y ancha, le otorgan una presencia deportiva y elegante. Los faros delanteros redondos y la parrilla distintiva de Rover le confieren un carácter inconfundible. La capota de lona, fácil de plegar, transforma el coche en un auténtico roadster, permitiendo disfrutar del viento en el cabello y del sol en la cara. Las llantas de 16 pulgadas, con neumáticos de diferente medida en el eje delantero y trasero (195/45 R16 Z y 215/40 R16 Z respectivamente), no solo realzan su estética deportiva, sino que también contribuyen a su excelente comportamiento dinámico. Es un coche que, a pesar de los años, sigue atrayendo miradas y evocando la pasión por la conducción.

Tecnología y características

Aunque el MGF 1.8i VVC pertenece a una época anterior a la explosión tecnológica actual, incorpora elementos que eran avanzados para su tiempo. Su motor de 1.8 litros con 16 válvulas y sistema de inyección indirecta, junto con la distribución variable (VVC), optimiza la entrega de potencia y el consumo. La construcción del motor con bloque y culata de aluminio contribuye a la ligereza del conjunto. La suspensión de paralelogramo deformable en ambos ejes, con barras estabilizadoras, es una solución técnica sofisticada que garantiza un excelente equilibrio entre confort y deportividad. Los frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros aseguran una frenada eficaz y segura. Es una tecnología enfocada en la mecánica pura, en la conexión entre el conductor y la máquina, sin distracciones digitales.

Competencia

En su segmento, el Rover MGF 1.8i VVC se enfrentaba a rivales de la talla del Mazda MX-5, el BMW Z3 y el Fiat Barchetta. Frente a ellos, el MGF ofrecía una propuesta distintiva con su motor central trasero y su suspensión Hydragas (aunque esta versión ya montaba paralelogramo deformable), que le otorgaban un comportamiento dinámico particular. Si bien el MX-5 era conocido por su fiabilidad y agilidad, y el Z3 por su imagen premium, el MGF se destacaba por su encanto británico y su carácter más pasional. Era una alternativa con personalidad propia, que buscaba conquistar a aquellos que valoraban la exclusividad y una experiencia de conducción más visceral.

Conclusión

El Rover MGF 1.8i VVC 00MY es un coche que, a pesar de su edad, sigue siendo una opción muy atractiva para los entusiastas de los roadsters. Su combinación de diseño clásico, motor potente y comportamiento dinámico emocionante lo convierte en un vehículo ideal para disfrutar de la conducción pura. Es un coche que te invita a salir a la carretera, a sentir el viento y a disfrutar de cada curva. Aunque su fiabilidad puede ser un punto a considerar, la pasión que despierta al volante compensa con creces cualquier posible inconveniente. Es un pedazo de historia automotriz británica que aún tiene mucho que ofrecer a quienes buscan una experiencia de conducción auténtica y sin filtros.