Saab 9-3 5p 2.2 TiD (125CV) SEK · 125 CV (2001-2002)

1998
Gasóleo
FWD
Manual 5v
Saab 9-3 - Vista 1
Saab 9-3 - Vista 2
Saab 9-3 - Vista 3
Saab 9-3 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Saab 9-3

Potencia

125CV

Par

280Nm

Consumo

6.2l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

10.5s

Vel. Máx.

200km/h

Peso

-kg

Precio

21,858

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

494 L

Depósito

68 L

Potencia

92 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima125 CV / 92 kW
Par máximo280 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito68 L
Maletero494 L

Análisis detallado del Saab 9-3 5p 2.2 TiD (125CV) SEK · 125 CV (2001-2002)

Descripción general

El Saab 9-3 5p 2.2 TiD de 1998 es un vehículo que encarna la esencia de la marca sueca: seguridad, innovación y un toque de distinción. Con su motor diésel de 125 CV, este modelo se presentaba como una opción equilibrada para quienes buscaban eficiencia sin renunciar a un cierto dinamismo. Su diseño, aunque arraigado en la estética de finales de los 90, prometía una experiencia de conducción diferente, alejada de las convenciones de la época.

Experiencia de conducción

Al volante del Saab 9-3, la sensación es de solidez y control. El motor 2.2 TiD, con sus 125 CV y un par motor de 280 Nm disponible desde las 1500 rpm, ofrece una respuesta contundente y progresiva, ideal para adelantamientos y recuperaciones. La aceleración de 0 a 100 km/h en 10.5 segundos y una velocidad máxima de 200 km/h demuestran que, a pesar de ser un diésel, no carece de brío. La suspensión, tipo McPherson en el eje delantero y de rueda tirada con elemento torsional en el trasero, proporciona un buen equilibrio entre confort y estabilidad, absorbiendo las irregularidades del terreno con aplomo. La dirección, aunque no se especifica su tipo, se percibe precisa, contribuyendo a una experiencia de conducción segura y gratificante. El consumo combinado de 6.2 l/100km es un punto a favor, permitiendo largos viajes con menos paradas en la gasolinera.

Diseño y estética

El diseño del Saab 9-3 de 1998 es inconfundiblemente Saab. Sus líneas fluidas y aerodinámicas, con una silueta de cinco puertas, le otorgan una presencia elegante y funcional. La carrocería, con una longitud de 4639 mm y una anchura de 1711 mm, ofrece un habitáculo espacioso y un maletero generoso de 494 litros, ideal para el día a día o para escapadas. Los detalles como los faros y la parrilla frontal, aunque clásicos, mantienen una coherencia estética que lo distingue de sus competidores. Es un diseño que, sin ser ostentoso, transmite una sensación de calidad y durabilidad.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el Saab 9-3 2.2 TiD de 1998 incorporaba soluciones avanzadas para su época. El motor diésel de inyección directa con turbo de geometría variable e intercooler era un ejemplo de eficiencia y rendimiento. La construcción del motor, con bloque de hierro y culata de aluminio, garantizaba robustez y ligereza. Aunque no se detallan sistemas de infoentretenimiento modernos, la tecnología se centraba en la seguridad y la mecánica, con frenos de disco ventilados de 288 mm en el eje delantero y discos de 286 mm en el trasero, asegurando una frenada eficaz. La suspensión, con estabilizadora delantera, contribuía a una dinámica de conducción segura y predecible.

Competencia

En su segmento, el Saab 9-3 5p 2.2 TiD de 1998 competía con modelos como el Audi A4, el BMW Serie 3 o el Mercedes-Benz Clase C. Frente a ellos, el Saab ofrecía una alternativa con un enfoque más individualista, destacando por su diseño distintivo, su énfasis en la seguridad y una experiencia de conducción que, si bien no era la más deportiva, sí era muy confortable y segura. Su motor diésel, con un buen equilibrio entre potencia y consumo, lo posicionaba como una opción atractiva para quienes buscaban un coche premium con un toque diferente.

Conclusión

El Saab 9-3 5p 2.2 TiD de 1998 es un coche que, a pesar de los años, sigue manteniendo su encanto. Es un vehículo que combina la robustez de la ingeniería sueca con un diseño atemporal y una mecánica eficiente. Ofrece una experiencia de conducción placentera y segura, ideal para quienes valoran la calidad, la comodidad y un toque de exclusividad. Es un coche que, sin duda, dejará una huella emocional en sus propietarios, recordándoles una época dorada de la automoción donde la personalidad y la innovación eran pilares fundamentales.