Saab 9-3 2.0t Coupé · 150 CV (1998-2001)

1998
Gasolina
FWD
Manual 5v
Saab 9-3 - Vista 1
Saab 9-3 - Vista 2
Saab 9-3 - Vista 3
Saab 9-3 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Saab 9-3

Potencia

150CV

Par

240Nm

Consumo

8.8l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

8.5s

Vel. Máx.

215km/h

Peso

1320kg

Precio

23,512

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 3 puertas

Maletero

494 L

Depósito

64 L

Potencia

110 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima150 CV / 110 kW
Par máximo240 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito64 L
Maletero494 L

Análisis detallado del Saab 9-3 2.0t Coupé · 150 CV (1998-2001)

Descripción general

El Saab 9-3 Coupé de 1998 es una joya automotriz que encapsula la esencia de la ingeniería sueca. Con su motor 2.0t de 150 CV, este coupé no solo promete un rendimiento emocionante, sino también una experiencia de conducción distintiva que lo diferencia de sus contemporáneos. Es un coche que, desde el primer vistazo, te invita a un viaje donde la funcionalidad se encuentra con la pasión.

Experiencia de conducción

Al volante del Saab 9-3 Coupé, la sensación es de control y conexión. El motor turboalimentado de 150 CV entrega su potencia de manera suave pero contundente, con un par motor de 240 Nm disponible desde las 1800 rpm que te empuja con decisión. La caja de cambios manual de 5 velocidades permite una interacción directa y gratificante con la mecánica, haciendo que cada cambio sea una delicia. La suspensión, tipo McPherson delante y de rueda tirada con elemento torsional detrás, ofrece un equilibrio entre confort y agilidad, absorbiendo las irregularidades del camino sin sacrificar la estabilidad en curvas. La dirección, aunque no se especifica su tipo, se siente precisa, transmitiendo confianza al conductor. Es un coche que te hace sentir parte de la carretera, no solo un observador.

Diseño y estética

El diseño del Saab 9-3 Coupé es inconfundiblemente Saab, una mezcla de elegancia atemporal y funcionalidad escandinava. Sus líneas fluidas y su silueta de tres puertas le otorgan una presencia deportiva y sofisticada. Con una longitud de 4639 mm y una anchura de 1711 mm, su tamaño es ideal para la ciudad y la carretera. El interior, aunque no se detalla en los datos, se caracteriza por su ergonomía y la calidad de sus materiales, con un salpicadero orientado al conductor que refleja la filosofía aeronáutica de la marca. Los asientos, diseñados para viajes largos, ofrecen un confort excepcional. El maletero de 494 litros es sorprendentemente generoso para un coupé, añadiendo un toque práctico a su atractivo estético.

Tecnología y características

En 1998, el Saab 9-3 Coupé incorporaba tecnología avanzada para su época. Su motor 2.0t de gasolina con inyección indirecta, turbo e intercooler, era un ejemplo de eficiencia y rendimiento. La construcción del motor, con bloque de hierro y culata de aluminio, garantizaba durabilidad y ligereza. Aunque no cuenta con las últimas innovaciones de conectividad actuales, su enfoque en la seguridad y la comodidad del conductor era primordial. La tracción delantera y la transmisión manual de 5 velocidades ofrecían una experiencia de conducción directa y fiable. Los frenos de disco ventilados delanteros y de disco traseros aseguraban una capacidad de frenado efectiva, un aspecto crucial para un coche con sus prestaciones.

Competencia

En su segmento, el Saab 9-3 Coupé competía con vehículos como el BMW Serie 3 Coupé, el Audi A3 y el Volvo C70. Frente a ellos, el Saab ofrecía una alternativa distintiva, con un carácter más excéntrico y una filosofía de diseño y seguridad única. Mientras que los rivales alemanes se centraban en la deportividad pura o el lujo, el Saab apostaba por una combinación de rendimiento inteligente, confort y una identidad propia que lo hacía destacar entre la multitud. Su motor turbo y su enfoque en la ergonomía interior eran puntos fuertes que lo diferenciaban.

Conclusión

El Saab 9-3 Coupé de 1998 es más que un coche; es una declaración de intenciones. Representa una época en la que la ingeniería automotriz sueca brillaba con luz propia, ofreciendo vehículos con personalidad, rendimiento y una calidad de construcción excepcional. Es un coche para aquellos que aprecian la singularidad, la comodidad en viajes largos y la emoción de un motor turbo bien afinado. Aunque los años han pasado, su encanto perdura, convirtiéndolo en un clásico moderno que sigue ofreciendo una experiencia de conducción gratificante y distintiva. Es un coche que te invita a disfrutar de cada kilómetro, con la seguridad de que estás al volante de algo especial.