Saab 9-5 Sedán 3.0 t V6 Ecopower (200CV) Vector · 200 CV (2001-2003)

2002
Gasolina
FWD
Automático 5v
Saab 9-5 - Vista 1
Saab 9-5 - Vista 2
Saab 9-5 - Vista 3
Saab 9-5 - Vista 4

Especificaciones y análisis del Saab 9-5

Potencia

200CV

Par

310Nm

Consumo

11.1l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

8.9s

Vel. Máx.

235km/h

Peso

1675kg

Precio

40,200

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

500 L

Depósito

70 L

Potencia

147 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima200 CV / 147 kW
Par máximo310 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 5v

Capacidades

Depósito70 L
Maletero500 L

Análisis detallado del Saab 9-5 Sedán 3.0 t V6 Ecopower (200CV) Vector · 200 CV (2001-2003)

Descripción general

El Saab 9-5 Sedán 3.0 t V6 Ecopower de 2002 es una berlina que encarna la esencia de la marca sueca: innovación, seguridad y un toque de distinción. Con su motor V6 turbo de 200 CV y una transmisión automática de 5 velocidades, este modelo prometía una experiencia de conducción suave y potente, ideal para quienes buscaban algo más que un simple medio de transporte. Su diseño atemporal y su enfoque en el confort lo convertían en una opción atractiva en el segmento de las berlinas de lujo de la época.

Experiencia de conducción

Al volante del Saab 9-5, la sensación es de solidez y control. El motor V6 Ecopower, con sus 200 CV, entrega la potencia de manera progresiva y refinada, sin estridencias, pero con una capacidad de aceleración notable para su tamaño y peso. La transmisión automática de 5 velocidades contribuye a una conducción relajada, ideal para largos viajes, donde el confort de marcha es una prioridad. La dirección, aunque no es la más comunicativa, ofrece precisión y seguridad, mientras que la suspensión absorbe las irregularidades del camino con aplomo, brindando una experiencia de viaje serena y placentera. Es un coche que invita a disfrutar del camino, a sentir la carretera bajo sus ruedas con una confianza inquebrantable.

Diseño y estética

El diseño del Saab 9-5 de 2002 es un claro reflejo de la filosofía de la marca: elegante, funcional y con una personalidad inconfundible. Sus líneas fluidas y aerodinámicas, junto con la característica parrilla frontal y los faros distintivos, le otorgan una presencia sobria pero sofisticada. En el interior, la ergonomía es clave, con un salpicadero orientado al conductor y materiales de calidad que crean un ambiente acogedor y premium. Cada detalle está pensado para la comodidad y la seguridad, desde los asientos hasta la disposición de los controles, haciendo que cada viaje sea una experiencia placentera. Es un diseño que, incluso hoy, mantiene su atractivo y su carácter único.

Tecnología y características

En su época, el Saab 9-5 incorporaba tecnología avanzada para mejorar la seguridad y el confort. Su motor 3.0 t V6 Ecopower, con inyección indirecta, turbo e intercooler, era un ejemplo de ingeniería sueca, ofreciendo un equilibrio entre rendimiento y eficiencia. La transmisión automática de 5 velocidades, aunque no era la más rápida, destacaba por su suavidad. En cuanto a seguridad, Saab siempre fue pionera, y este modelo no era una excepción, con sistemas de protección pasiva y activa diseñados para salvaguardar a sus ocupantes. Aunque hoy en día sus sistemas puedan parecer básicos, en 2002 representaban la vanguardia en muchos aspectos, especialmente en la integración de la electrónica para la gestión del motor y la seguridad.

Competencia

En el segmento de las berlinas premium, el Saab 9-5 de 2002 se enfrentaba a duros competidores como el BMW Serie 5, el Mercedes-Benz Clase E y el Audi A6. Estos rivales alemanes ofrecían una imagen más tradicional de lujo y deportividad, mientras que el Saab se distinguía por su enfoque en la seguridad, la innovación y un diseño más individualista. También competía con modelos como el Volvo S80, otro sueco que compartía la filosofía de seguridad y confort, aunque con un estilo diferente. El Saab 9-5 buscaba atraer a un público que valoraba la originalidad y la ingeniería por encima del estatus de marca más convencional.

Conclusión

El Saab 9-5 Sedán 3.0 t V6 Ecopower de 2002 es un coche que, a pesar del paso del tiempo, sigue evocando una sensación de calidad y distinción. Es una berlina que ofrece un equilibrio notable entre rendimiento, confort y seguridad, todo ello envuelto en un diseño que se mantiene elegante. Para aquellos que buscan un clásico moderno con carácter y una experiencia de conducción gratificante, este Saab es una elección que no defraudará. Representa una época dorada de la ingeniería sueca, un coche que fue diseñado para ser disfrutado y que aún hoy puede ofrecer muchas satisfacciones a sus propietarios.