Skoda Felicia GLXi · 68 CV (2000)

1999
Gasolina
FWD
Manual 5v
Skoda Felicia - Vista 1
Skoda Felicia - Vista 2
Skoda Felicia - Vista 3
Skoda Felicia - Vista 4

Especificaciones y análisis del Skoda Felicia

Potencia

68CV

Par

106Nm

Consumo

6.7l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

13.5s

Vel. Máx.

162km/h

Peso

985kg

Precio

8,811

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Manual 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 5 puertas

Maletero

272 L

Depósito

42 L

Potencia

50 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima68 CV / 50 kW
Par máximo106 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónManual 5v

Capacidades

Depósito42 L
Maletero272 L

Análisis detallado del Skoda Felicia GLXi · 68 CV (2000)

Descripción general

El Skoda Felicia GLXi de 1999, un vehículo que marcó una época, se presenta como una opción práctica y económica. Con su motor de gasolina de 1.3 litros y 68 CV, este modelo de 5 puertas ofrecía una movilidad sencilla y sin pretensiones, ideal para el día a día en la ciudad y alguna escapada ocasional. Su precio de 8.811 euros en su momento lo posicionaba como una alternativa accesible para muchos.

Experiencia de conducción

Al volante del Felicia GLXi, la experiencia es honesta y directa. No esperes grandes emociones, pero sí una conducción predecible y fácil de manejar. La aceleración de 0 a 100 km/h en 13.5 segundos y una velocidad máxima de 162 km/h revelan un coche pensado para la funcionalidad más que para la velocidad. La suspensión tipo McPherson delantera y de rueda tirada trasera, junto con los frenos de disco delanteros y tambor traseros, ofrecen un comportamiento adecuado para su segmento, transmitiendo una sensación de control suficiente para el conductor promedio. El consumo combinado de 6.7 l/100km es razonable para la época, haciendo de cada viaje una experiencia económica.

Diseño y estética

El diseño del Skoda Felicia GLXi es un reflejo de su tiempo: funcional y sin adornos excesivos. Sus líneas son sencillas y prácticas, con una carrocería de 5 puertas que prioriza la habitabilidad y la facilidad de acceso. Con una longitud de 3883 mm, un ancho de 1635 mm y una altura de 1415 mm, sus dimensiones lo hacían ágil en entornos urbanos. El maletero de 272 litros, aunque no es el más grande, cumple con las necesidades básicas de carga. Es un diseño que, si bien no busca deslumbrar, sí busca ser útil y duradero, con una estética que evoca la fiabilidad de la ingeniería checa.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el Felicia GLXi de 1999 se mantiene fiel a la simplicidad. Su motor de gasolina de 1289 cc con inyección indirecta y 4 cilindros, junto con una transmisión manual de 5 velocidades, representa una mecánica probada y eficiente para su época. La dirección, aunque no se especifica su tipo o asistencia, se enfoca en la facilidad de manejo. Los neumáticos 165/70 R13 en llantas de 4.5 x 13 pulgadas son adecuados para su tamaño y potencia, garantizando un agarre correcto. La ausencia de elementos como el Stop&Start o sistemas de asistencia avanzados subraya su enfoque en lo esencial, ofreciendo una tecnología robusta y fácil de mantener.

Competencia

En su segmento, el Skoda Felicia GLXi competía con vehículos como el Volkswagen Polo, el Opel Corsa o el Ford Fiesta. Frente a ellos, el Felicia se posicionaba como una alternativa más económica, ofreciendo una relación calidad-precio muy atractiva. Si bien sus rivales podían ofrecer un diseño más moderno o un equipamiento ligeramente superior, el Felicia destacaba por su fiabilidad mecánica y su bajo coste de mantenimiento, convirtiéndose en una opción inteligente para quienes buscaban un coche práctico y duradero sin grandes lujos.

Conclusión

El Skoda Felicia GLXi de 1999 es un coche que, a pesar de su sencillez, dejó una huella importante. Representa la esencia de la movilidad accesible y fiable, un compañero fiel para el día a día. Su diseño funcional, su mecánica probada y su economía de uso lo convierten en un clásico que aún hoy es recordado con cariño por muchos. Es un testimonio de que no siempre se necesita lo más avanzado para ofrecer una experiencia de conducción satisfactoria y un transporte eficiente.