Especificaciones y análisis del Skoda Octavia
Potencia
150CV
Par
200Nm
Consumo
7.6l/100
Emisiones
182g/km
0-100 km/h
10.2s
Vel. Máx.
210km/h
Peso
1425kg
Precio
29,430€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 6v
FWD
5 / 5 puertas
580 L
55 L
110 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Skoda Octavia Combi 2.0 FSI Laurin&Klement Tiptronic · 150 CV (2007)
Descripción general
El Skoda Octavia Combi 2.0 FSI Laurin&Klement Tiptronic de 2005 es una propuesta que combina la practicidad de un familiar con un toque de distinción y un motor gasolina de 150 CV. Este modelo, con su transmisión automática de 6 velocidades, prometía un equilibrio entre confort y rendimiento para el día a día y los viajes largos. Su precio de 29.430 € en su momento lo posicionaba como una opción interesante dentro de su segmento, ofreciendo un equipamiento completo y una calidad de construcción sólida.
Experiencia de conducción
Al volante, el Octavia Combi 2.0 FSI Laurin&Klement Tiptronic ofrecía una experiencia de conducción suave y predecible. El motor de 150 CV, aunque no era un derroche de potencia, se mostraba suficiente para mover con soltura el conjunto, especialmente en carretera. La transmisión Tiptronic de 6 velocidades contribuía a un confort de marcha notable, con cambios de marcha fluidos y sin tirones. La suspensión, de tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, proporcionaba un buen compromiso entre comodidad y estabilidad, absorbiendo las irregularidades del terreno sin sacrificar la sensación de control. La dirección asistida eléctrica, aunque no era la más comunicativa, cumplía su función con precisión. En general, la sensación era de un coche bien aplomado, seguro y agradable de conducir, ideal para quienes buscaban un familiar versátil y confortable.
Diseño y estética
El diseño del Skoda Octavia Combi de 2005, en su versión Laurin&Klement, se caracterizaba por su elegancia discreta y funcional. Las líneas eran limpias y atemporales, con una silueta familiar que priorizaba el espacio interior y la capacidad de carga. Los detalles específicos de la versión Laurin&Klement, como las llantas de 17 pulgadas y los acabados interiores, le otorgaban un aire más sofisticado. El frontal presentaba la parrilla característica de Skoda de la época, flanqueada por faros de diseño sencillo pero efectivo. La zaga, con sus pilotos bien integrados, reforzaba la imagen de solidez y practicidad. En el interior, el diseño era sobrio y ergonómico, con materiales de buena calidad y un salpicadero bien organizado, donde la funcionalidad primaba sobre los alardes estéticos. Era un diseño que envejecía bien, manteniendo su atractivo a lo largo del tiempo.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Skoda Octavia Combi 2.0 FSI Laurin&Klement Tiptronic de 2005 incorporaba soluciones avanzadas para su época. El motor 2.0 FSI con inyección directa y admisión variable optimizaba la entrega de potencia y la eficiencia. La transmisión automática Tiptronic de 6 velocidades era un elemento clave para el confort de marcha. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, además de un chasis bien resuelto con suspensiones independientes en ambos ejes y barras estabilizadoras. Aunque no disponía de las últimas ayudas a la conducción que vemos hoy en día, ofrecía un equipamiento completo en términos de seguridad pasiva y activa para su segmento y año. El interior, aunque no era un derroche de pantallas, ofrecía un sistema de infoentretenimiento funcional y los controles necesarios para una conducción cómoda y segura.
Competencia
En el competitivo segmento de los familiares compactos, el Skoda Octavia Combi 2.0 FSI Laurin&Klement Tiptronic se enfrentaba a rivales de peso como el Volkswagen Golf Variant, el Ford Focus Wagon, el Opel Astra Caravan o el Peugeot 307 SW. Frente a ellos, el Octavia Combi destacaba por su excelente relación calidad-precio, su amplitud interior y su generoso maletero de 580 litros, que superaba a muchos de sus competidores directos. Aunque quizás no ofrecía el dinamismo de un Focus o el prestigio de un Golf, su propuesta de solidez, fiabilidad y practicidad lo convertía en una alternativa muy atractiva para aquellos que buscaban un coche familiar completo y sin grandes pretensiones deportivas.
Conclusión
El Skoda Octavia Combi 2.0 FSI Laurin&Klement Tiptronic de 2005 fue un coche que supo combinar de manera exitosa la funcionalidad de un familiar con un nivel de equipamiento y confort superior. Su motor de gasolina de 150 CV, junto con la transmisión automática, ofrecía una conducción agradable y eficiente para el día a día y los viajes. Su diseño atemporal y su espacioso interior lo convertían en una opción muy práctica para familias. Aunque no era el más emocionante de su segmento, su fiabilidad, su buen comportamiento en carretera y su excelente relación calidad-precio lo consolidaron como una elección inteligente para quienes buscaban un vehículo versátil y duradero. Un coche que, sin grandes alardes, cumplía con creces las expectativas de sus propietarios.