Skoda Superb 2.0 TDI 140 CV Classic (2005-2006)

2002
Gasóleo
FWD
Manual 6v
Skoda Superb - Vista 1
Skoda Superb - Vista 2
Skoda Superb - Vista 3
Skoda Superb - Vista 4

Especificaciones y análisis del Skoda Superb

Potencia

140CV

Par

320Nm

Consumo

6.3l/100

Emisiones

170g/km

0-100 km/h

9.9s

Vel. Máx.

215km/h

Peso

1593kg

Precio

24,240

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Manual 6v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

462 L

Depósito

62 L

Potencia

103 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima140 CV / 103 kW
Par máximo320 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónManual 6v

Capacidades

Depósito62 L
Maletero462 L

Análisis detallado del Skoda Superb 2.0 TDI 140 CV Classic (2005-2006)

Descripción general

El Skoda Superb 2.0 TDI 140 CV Classic de 2002 es un sedán que, a pesar de sus años, sigue ofreciendo una propuesta interesante para quienes buscan espacio, confort y una mecánica diésel probada. Con un precio de 24.240 €, se posicionaba como una opción sensata y bien equipada en su segmento, destacando por su amplitud interior y un motor que prometía eficiencia y buen rendimiento.

Experiencia de conducción

Al volante del Superb, la sensación predominante es de solidez y aplomo. El motor 2.0 TDI de 140 CV, con sus 320 Nm de par a 1900 rpm, ofrece una respuesta contundente desde bajas revoluciones, permitiendo adelantamientos seguros y una conducción relajada en carretera. La aceleración de 0 a 100 km/h en 9.9 segundos es más que suficiente para el día a día, y su velocidad máxima de 215 km/h demuestra su capacidad para viajes largos. La suspensión, con paralelogramo deformable delante y rueda tirada con elemento torsional detrás, filtra bien las irregularidades del asfalto, proporcionando un confort de marcha notable. La dirección de cremallera, aunque no es la más comunicativa, cumple su función con precisión. En general, es un coche que invita a devorar kilómetros con tranquilidad y sin fatiga.

Diseño y estética

El diseño del Skoda Superb de 2002 es clásico y atemporal, sin estridencias. Sus líneas son elegantes y sobrias, con una silueta que denota su vocación de berlina de representación. Con 4803 mm de largo, 1765 mm de ancho y 1469 mm de alto, su presencia es imponente. El frontal, con sus faros alargados y la parrilla característica de Skoda, le confiere una mirada seria. La zaga, con pilotos bien integrados, mantiene la coherencia estética. El interior, aunque no es el más moderno, destaca por su amplitud y la calidad de los materiales, que resisten bien el paso del tiempo. El maletero de 462 litros es generoso, ideal para viajes familiares.

Tecnología y características

En el apartado tecnológico, el Superb de 2002, aunque no contaba con las últimas innovaciones de hoy en día, ofrecía lo necesario para una conducción cómoda y segura. El motor 2.0 TDI de 140 CV con inyección directa por bomba inyector, turbo de geometría variable e intercooler, era una muestra de la ingeniería diésel de la época, buscando un equilibrio entre potencia y eficiencia. La transmisión manual de 6 velocidades permitía aprovechar al máximo el rango de revoluciones del motor. En cuanto a seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, y estabilizadoras en ambos ejes para un mejor control en curva. La dirección asistida contribuía a una conducción más relajada.

Competencia

En su momento, el Skoda Superb competía en un segmento muy disputado con modelos como el Volkswagen Passat, el Opel Vectra o el Ford Mondeo. Frente a ellos, el Superb ofrecía un espacio interior superior, especialmente en las plazas traseras, y una relación calidad-precio muy atractiva. Aunque quizás no tenía el mismo caché de marca que algunos de sus rivales alemanes, su robustez y fiabilidad, herencia del Grupo Volkswagen, lo convertían en una alternativa muy a tener en cuenta para quienes buscaban un coche práctico y duradero.

Conclusión

El Skoda Superb 2.0 TDI 140 CV Classic de 2002 es un coche que, incluso hoy, puede ser una excelente opción en el mercado de segunda mano. Su combinación de un motor diésel potente y eficiente, un espacio interior sobresaliente y un confort de marcha notable lo convierten en un compañero ideal para viajes largos y para el día a día familiar. Es un coche honesto, sin pretensiones, que cumple con creces lo que promete, ofreciendo una experiencia de conducción sólida y satisfactoria. Su diseño atemporal y su construcción robusta aseguran que aún le queda mucha vida útil por delante.