Especificaciones y análisis del smart fortwo
Potencia
41CV
Par
100Nm
Consumo
3.4l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
19.8s
Vel. Máx.
135km/h
Peso
815kg
Precio
14,115€
Resumen técnico
Gasóleo
Automático 6v
RWD
2 / 2 puertas
150 L
22 L
30 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del smart & passion cdi cabrio · 41 CV (2002-2003)
Descripción general
El Smart Fortwo Cabrio de 2000, en su versión Passion CDI, es una declaración de intenciones sobre ruedas. Con su motor diésel de 0.8 litros y 41 CV, este pequeño descapotable no busca la velocidad, sino la agilidad y la eficiencia en el entorno urbano. Es un coche que desafía las convenciones, ofreciendo una experiencia de conducción única y una personalidad inconfundible.
Experiencia de conducción
Conducir el Smart Fortwo Cabrio es una experiencia sorprendentemente divertida y liberadora. Su tamaño compacto permite maniobrar con una facilidad asombrosa en el tráfico y encontrar aparcamiento donde otros solo pueden soñar. La capota retráctil añade un toque de libertad, permitiendo disfrutar del sol y el viento en cada trayecto. Aunque sus 41 CV no prometen emociones fuertes en aceleración, su ligereza y la respuesta de su motor diésel lo hacen ágil en la ciudad. La dirección es directa y la suspensión, aunque firme, cumple su función en un coche de estas características. Es un coche que te hace sonreír, un compañero fiel para la jungla urbana.
Diseño y estética
El diseño del Smart Fortwo Cabrio es icónico y atemporal. Sus proporciones diminutas, con solo 2.5 metros de largo, lo hacen inconfundible. La versión cabrio añade un toque de sofisticación y diversión, con una capota de lona que se pliega de forma sencilla. El interior, aunque compacto, está inteligentemente diseñado para maximizar el espacio y la funcionalidad. Los materiales son sencillos pero duraderos, y la disposición de los elementos es intuitiva. Es un coche que, a pesar de su tamaño, tiene una presencia fuerte y un estilo que no pasa desapercibido.
Tecnología y características
En el año 2000, la tecnología del Smart Fortwo Cabrio se centraba en la eficiencia y la practicidad. Su motor diésel de 0.8 litros, con inyección directa por conducto común, turbo e intercooler, era un prodigio de la ingeniería para su tamaño, ofreciendo un consumo combinado de tan solo 3.4 l/100km. La transmisión automática de 6 velocidades, aunque con un funcionamiento peculiar, facilitaba la conducción en ciudad. En cuanto a seguridad, contaba con elementos básicos para la época, como frenos de disco delanteros y tambor traseros, y una estructura de seguridad Tridion que protegía a los ocupantes. No esperes grandes pantallas o asistentes de conducción avanzados, su tecnología es la de un coche diseñado para ser eficiente y funcional.
Competencia
En su segmento, el Smart Fortwo Cabrio tenía pocos rivales directos que ofrecieran su combinación de tamaño, eficiencia diésel y configuración descapotable. Podría compararse con otros urbanos pequeños como el Toyota Aygo, el Citroën C1 o el Peugeot 107, aunque ninguno de ellos ofrecía la opción cabrio ni la misma filosofía de diseño. Otros descapotables pequeños, como el Fiat 500C, llegarían más tarde. El Smart Fortwo Cabrio se posicionaba como una opción única para aquellos que buscaban un coche urbano con personalidad y la posibilidad de disfrutar del aire libre.
Conclusión
El Smart Fortwo Cabrio de 2000 es mucho más que un coche pequeño; es una declaración de estilo y una solución inteligente para la movilidad urbana. Su diseño distintivo, su sorprendente agilidad y su excepcional eficiencia lo convierten en un compañero ideal para la ciudad. Aunque no es un coche para largos viajes o para quienes buscan altas prestaciones, ofrece una experiencia de conducción divertida y práctica. Es un vehículo que, a pesar de los años, sigue manteniendo su encanto y su relevancia para un nicho de mercado que valora la originalidad y la funcionalidad por encima de todo.
