Especificaciones y análisis del smart fortwo
Potencia
102CV
Par
147Nm
Consumo
5.2l/100
Emisiones
119g/km
0-100 km/h
8.9s
Vel. Máx.
155km/h
Peso
870kg
Precio
18,125€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 5v
RWD
2 / 2 puertas
220 L
33 L
75 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del smart fortwo coupé BRABUS · 102 CV (2012-2015)
Descripción general
El Smart Fortwo Coupé BRABUS de 2012 es una pequeña joya urbana que combina la agilidad característica del Fortwo con un toque de deportividad y exclusividad. Diseñado para la ciudad, este modelo BRABUS eleva la experiencia de conducción a un nivel más emocionante, ofreciendo un rendimiento sorprendente en un paquete compacto. Es el coche perfecto para quienes buscan diferenciarse y disfrutar de cada trayecto urbano con una sonrisa.
Experiencia de conducción
Al volante del Smart Fortwo Coupé BRABUS, las sensaciones son intensas y directas. Sus 102 CV, gestionados por una transmisión automática de 5 velocidades, catapultan este ligero vehículo de 0 a 100 km/h en solo 8.9 segundos, una cifra impresionante para su tamaño. La dirección es precisa y la suspensión, aunque firme, transmite una conexión genuina con la carretera. Es un coche que invita a jugar, a exprimir cada curva y a disfrutar de su agilidad en el tráfico urbano. La respuesta del motor turboalimentado es inmediata, y el sonido, aunque no es un rugido, tiene un carácter deportivo que te envuelve. Es un coche que te hace sentir vivo, incluso en el trayecto más corto.
Diseño y estética
El diseño del Smart Fortwo Coupé BRABUS es inconfundiblemente Smart, pero con una dosis extra de agresividad y estilo. Sus dimensiones compactas (2695 mm de largo) lo hacen ideal para la ciudad, mientras que los detalles BRABUS, como las llantas de aleación específicas (16 pulgadas delante y 17 pulgadas detrás), los paragolpes deportivos y la doble salida de escape, le confieren una presencia más musculosa y exclusiva. El interior, aunque pequeño, está bien aprovechado y cuenta con acabados de mayor calidad y detalles deportivos que realzan su carácter. Es un coche que llama la atención y que, a pesar de su tamaño, irradia personalidad.
Tecnología y características
A pesar de ser un modelo de 2012, el Smart Fortwo Coupé BRABUS incorpora una tecnología eficiente y bien pensada para su propósito. Su motor de gasolina de 999 cc, con inyección indirecta, turbo e intercooler, entrega 102 CV y un par motor de 147 Nm a 2500 rpm, lo que garantiza una respuesta ágil. La transmisión automática de 5 velocidades, aunque no es la más rápida del mercado, cumple su función en un entorno urbano. En cuanto a la seguridad, cuenta con frenos de disco delanteros y tambor traseros, y una suspensión McPherson delantera que contribuye a su buen comportamiento dinámico. Su consumo combinado de 5.2 l/100km y emisiones de 119 g/km de CO2 lo sitúan en la etiqueta C de la DGT, demostrando una eficiencia razonable para su rendimiento.
Competencia
En el segmento de los microcoches deportivos, el Smart Fortwo Coupé BRABUS tiene pocos rivales directos que ofrezcan una combinación similar de tamaño, exclusividad y rendimiento. Podría compararse con versiones deportivas de otros urbanos como el Fiat 500 Abarth, que ofrece una experiencia de conducción igualmente emocionante y un diseño distintivo. Sin embargo, la singularidad del concepto biplaza y la agilidad extrema del Fortwo BRABUS lo colocan en una categoría propia, atrayendo a un público que valora la diferenciación y la diversión al volante por encima de la practicidad de un coche más grande.
Conclusión
El Smart Fortwo Coupé BRABUS de 2012 es más que un simple coche urbano; es una declaración de intenciones. Es la elección perfecta para aquellos que buscan un vehículo compacto, ágil y con un toque de picante para moverse por la ciudad. Su diseño distintivo, sus prestaciones sorprendentes y la exclusividad que le otorga la firma BRABUS lo convierten en un coche con alma, capaz de arrancar una sonrisa en cada semáforo. Es un capricho, sí, pero un capricho que se disfruta intensamente y que demuestra que el tamaño no está reñido con la emoción.




