Especificaciones y análisis del SsangYong Musso
Potencia
120CV
Par
250Nm
Consumo
9.2l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
16s
Vel. Máx.
156km/h
Peso
1965kg
Precio
26,210€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 5v
AWD
5 / 5 puertas
630 L
80 L
88 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del SsangYong Musso 2.9 TDI Grand Lux · 120 CV (1993-2002)
Descripción general
El SsangYong Musso 2.9 TDI Grand Lux de 1998 es un todoterreno que, a primera vista, promete robustez y capacidad. Con un motor diésel de 120 CV y tracción integral, se posiciona como una opción para quienes buscan un vehículo funcional y resistente, sin grandes pretensiones de lujo o sofisticación. Su precio de 26.210 € en su momento lo situaba en un segmento competitivo, ofreciendo una alternativa a los todoterrenos más establecidos.
Experiencia de conducción
Al volante del Musso, la sensación predominante es la de conducir un vehículo sólido y con una clara orientación off-road. El motor diésel de 2.9 litros, con sus 120 CV y 250 Nm de par, ofrece una respuesta adecuada para el uso diario y para superar obstáculos en terrenos difíciles, aunque no esperes una aceleración fulgurante (0 a 100 km/h en 16 segundos). La suspensión, con paralelogramo deformable delante y eje rígido detrás, absorbe bien las irregularidades del terreno, pero en carretera puede resultar algo blanda, con un balanceo perceptible. La dirección de cremallera, aunque no es la más precisa, cumple su función. El consumo combinado de 9.2 l/100km es razonable para un vehículo de su tamaño y época. En definitiva, es un coche que invita a la aventura, a explorar caminos menos transitados, donde su tracción AWD y su robustez se sienten en su elemento.
Diseño y estética
El diseño del SsangYong Musso es inconfundiblemente de todoterreno de finales de los 90. Sus líneas son robustas y funcionales, con una estética que prioriza la practicidad sobre la aerodinámica. La carrocería de 5 puertas y sus dimensiones (4640 mm de largo, 1860 mm de ancho y 1730 mm de alto) le confieren una presencia imponente. El interior, aunque no destaca por sus materiales de alta calidad, es espacioso y ofrece 5 plazas cómodas. El maletero de 630 litros es generoso, ideal para viajes o para transportar equipo. En general, su diseño es honesto y sin artificios, reflejando su propósito como vehículo de trabajo y ocio.
Tecnología y características
En cuanto a tecnología, el Musso de 1998 es un reflejo de su época. Su motor diésel de 2.9 litros con inyección indirecta, turbo e intercooler, es una mecánica probada y fiable. La tracción integral (AWD) es su principal baza tecnológica para el off-road, permitiéndole afrontar terrenos complicados. La transmisión manual de 5 velocidades es sencilla y efectiva. No esperes grandes alardes en cuanto a sistemas de asistencia a la conducción o infoentretenimiento, ya que su enfoque es más mecánico y menos digital. Sin embargo, cuenta con elementos básicos como frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, y barras estabilizadoras en ambos ejes, que contribuyen a una conducción segura.
Competencia
En su época, el SsangYong Musso competía con todoterrenos como el Mitsubishi Montero, el Nissan Terrano II o el Toyota Land Cruiser. Estos rivales, a menudo con un mayor reconocimiento de marca y, en algunos casos, con acabados más refinados, ofrecían prestaciones similares en cuanto a capacidad off-road. El Musso se diferenciaba por su precio más competitivo y una propuesta más directa y sin florituras, atrayendo a un público que valoraba la robustez y la funcionalidad por encima de otros aspectos.
Conclusión
El SsangYong Musso 2.9 TDI Grand Lux de 1998 es un todoterreno con carácter, diseñado para quienes buscan un compañero fiable y capaz para la aventura. Su robustez mecánica, su tracción integral y su amplio espacio interior lo convierten en una opción interesante para el trabajo o el ocio en entornos exigentes. Aunque no es el más rápido ni el más lujoso, su honestidad y su enfoque práctico lo hacen un vehículo con encanto. Es un coche que, a pesar de los años, sigue ofreciendo una experiencia de conducción auténtica y conectada con el terreno.
