Especificaciones y análisis del Subaru Impreza
Potencia
150CV
Par
196Nm
Consumo
8.2l/100
Emisiones
194g/km
0-100 km/h
11.6s
Vel. Máx.
182km/h
Peso
1440kg
Precio
25,700€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 4v
AWD
5 / 4 puertas
- L
60 L
110 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Subaru Impreza 2.0R Sport Sedán Aut. · 150 CV (2009-2010)
Descripción general
El Subaru Impreza 2.0R Sport Sedán Aut. de 2009 es una propuesta interesante para quienes buscan un sedán compacto con tracción integral y un toque distintivo. Con su motor bóxer de 150 CV y una transmisión automática de 4 velocidades, este modelo se posiciona como una alternativa diferente en el segmento, ofreciendo una experiencia de conducción particular y un enfoque en la seguridad y la estabilidad.
Experiencia de conducción
Al volante del Impreza 2.0R Sport Sedán, la sensación de seguridad y aplomo es inmediata, gracias a su tracción integral permanente. El motor bóxer de 150 CV, aunque no es un derroche de potencia, ofrece una entrega suave y progresiva, ideal para una conducción relajada. La transmisión automática de 4 velocidades, si bien no es la más moderna, cumple su función con transiciones que, aunque perceptibles, no restan confort. La dirección, precisa y con asistencia sensible a la velocidad, contribuye a una experiencia de manejo agradable, tanto en ciudad como en carretera. Es un coche que invita a disfrutar del camino con confianza, sin grandes pretensiones deportivas, pero con una respuesta honesta y predecible.
Diseño y estética
El diseño del Subaru Impreza 2.0R Sport Sedán de 2009 se caracteriza por sus líneas sobrias y funcionales. La carrocería de cuatro puertas le confiere una imagen más clásica y elegante en comparación con sus hermanos de cinco puertas. Destacan sus proporciones equilibradas y una estética que, sin ser llamativa, transmite robustez y fiabilidad. Los detalles exteriores, como las llantas de 16 pulgadas, complementan un conjunto que busca la practicidad sin renunciar a una presencia discreta pero sólida en la carretera. El interior, por su parte, se enfoca en la ergonomía y la durabilidad, con un diseño que prioriza la funcionalidad.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Impreza 2.0R Sport Sedán de 2009 incorpora soluciones probadas y fiables. Su motor bóxer de 1994 cc, con inyección indirecta y una relación de compresión de 10.2, es un ejemplo de la ingeniería de Subaru, buscando un equilibrio entre rendimiento y durabilidad. La tracción integral permanente (AWD) es, sin duda, su seña de identidad, proporcionando una adherencia excepcional en diversas condiciones. La transmisión automática de 4 velocidades, aunque no es de última generación, ofrece un funcionamiento suave. En cuanto a la suspensión, la combinación de tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, junto con frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, asegura un comportamiento dinámico equilibrado y una frenada eficaz. La dirección de cremallera con asistencia sensible a la velocidad mejora la maniobrabilidad y la sensación al volante.
Competencia
En su momento, el Subaru Impreza 2.0R Sport Sedán Aut. competía con modelos como el Honda Civic Sedán, el Toyota Corolla Sedán o el Mazda3 Sedán. Sin embargo, su principal diferenciador era la tracción integral permanente, una característica que lo desmarcaba de la mayoría de sus rivales directos, ofreciendo un plus en seguridad y capacidad de tracción, especialmente en condiciones adversas. Otros competidores podrían ser el Mitsubishi Lancer o incluso algunas versiones de entrada de berlinas premium, aunque el Impreza se posicionaba como una opción más racional y enfocada en la durabilidad.
Conclusión
El Subaru Impreza 2.0R Sport Sedán Aut. de 2009 es un coche que, a pesar de los años, sigue siendo una opción interesante para quienes valoran la fiabilidad, la seguridad y la tracción integral. Su motor bóxer y su transmisión automática ofrecen una experiencia de conducción suave y predecible, ideal para el día a día y para viajes largos. Aunque su diseño es discreto y su tecnología no es la más vanguardista, su robustez y su capacidad para afrontar diversas condiciones climáticas lo convierten en un compañero de viaje leal y competente. Es un coche para aquellos que buscan un vehículo práctico y duradero, con un toque de distinción gracias a su ingeniería única.




