Especificaciones y análisis del Toyota Previa
Potencia
156CV
Par
225Nm
Consumo
10.8l/100
Emisiones
-g/km
0-100 km/h
11.2s
Vel. Máx.
180km/h
Peso
1525kg
Precio
36,100€
Resumen técnico
Gasolina
Automático 4v
FWD
7 / 5 puertas
1625 L
75 L
115 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Toyota Previa 2.4 VVT-i Luna 7 plazas Aut. · 156 CV (2000-2005)
Descripción general
El Toyota Previa de 2000, en su versión 2.4 VVT-i Luna de 7 plazas con transmisión automática, se presenta como un monovolumen espacioso y funcional, diseñado para familias que buscan comodidad y fiabilidad en sus desplazamientos. Con un precio de 36.100 euros en su lanzamiento, este vehículo ofrecía una propuesta interesante en el segmento de los monovolúmenes grandes, destacando por su motor de gasolina y su configuración de siete asientos.
Experiencia de conducción
Al volante del Previa, la sensación predominante es de suavidad y confort. El motor de 2.4 litros y 156 CV, combinado con la transmisión automática de 4 velocidades, proporciona una respuesta adecuada para un vehículo de su tamaño, aunque sin pretensiones deportivas. La aceleración de 0 a 100 km/h en 11.2 segundos y una velocidad máxima de 180 km/h son cifras razonables para un monovolumen familiar. El consumo combinado de 10.8 l/100km refleja su naturaleza de vehículo grande y de gasolina. La suspensión, tipo McPherson delante y de rueda tirada con elemento torsional detrás, está orientada a absorber las irregularidades del terreno, ofreciendo un viaje placentero para todos los ocupantes. La dirección, aunque no es la más directa, cumple su función en un coche de estas características, facilitando las maniobras a pesar de sus dimensiones.
Diseño y estética
El diseño exterior del Toyota Previa de 2000 es distintivo y funcional. Sus líneas redondeadas y su frontal aerodinámico le otorgan una presencia amable y moderna para su época. Con una longitud de 4750 mm, una anchura de 1790 mm y una altura de 1770 mm, el Previa maximiza el espacio interior. Las cinco puertas, incluyendo las puertas traseras deslizantes, facilitan el acceso a las siete plazas. El interior, con un maletero de 1625 litros, está pensado para la versatilidad y la comodidad de los pasajeros, con una configuración que permite adaptar el espacio a las necesidades de carga o de ocupantes. La estética general es la de un vehículo práctico y bien resuelto, sin estridencias, enfocado en la funcionalidad familiar.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el Toyota Previa 2.4 VVT-i Luna de 2000 incorporaba soluciones prácticas para la época. Su motor de gasolina de 2362 cc con inyección indirecta y distribución variable (VVT-i) era un punto fuerte, ofreciendo un buen equilibrio entre rendimiento y eficiencia para su segmento. La transmisión automática de 4 velocidades, aunque no es la más avanzada hoy en día, proporcionaba una conducción relajada. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados de 275 mm delante y discos de 291 mm detrás, asegurando una capacidad de frenado adecuada. La suspensión, con estabilizadora delantera, contribuía a una conducción estable. Aunque no disponía de las ayudas a la conducción modernas, su equipamiento estaba en línea con lo esperado en un monovolumen familiar de principios de los 2000.
Competencia
En el mercado de monovolúmenes de 7 plazas del año 2000, el Toyota Previa se enfrentaba a competidores como el Chrysler Voyager, el Renault Espace o el Volkswagen Sharan. Cada uno de ellos ofrecía sus propias ventajas, pero el Previa destacaba por su reputación de fiabilidad mecánica y su enfoque en la comodidad y el espacio interior. Mientras que algunos rivales podían ofrecer motores diésel más eficientes o un equipamiento más lujoso, el Previa se posicionaba como una opción sólida y práctica para familias que valoraban la durabilidad y la funcionalidad por encima de todo.
Conclusión
El Toyota Previa 2.4 VVT-i Luna de 7 plazas automático de 2000 es un monovolumen que, a pesar del paso del tiempo, sigue siendo un referente de espacio, comodidad y, sobre todo, fiabilidad. Su diseño funcional, su motor suave y su amplio interior lo convierten en una opción muy interesante para quienes buscan un vehículo familiar robusto y duradero. Aunque su consumo y prestaciones no son los de un coche moderno, su capacidad para transportar a siete personas con confort y su probada resistencia mecánica lo hacen un compañero de viaje muy apreciado. Es un coche que cumple con creces su propósito, ofreciendo tranquilidad y espacio para la vida en familia.