Toyota Previa 2.4 VVT-i Luna 8 plazas Aut. · 156 CV (2000)

2000
Gasolina
FWD
Automático 4v
Toyota Previa - Vista 1
Toyota Previa - Vista 2
Toyota Previa - Vista 3
Toyota Previa - Vista 4

Especificaciones y análisis del Toyota Previa

Potencia

156CV

Par

225Nm

Consumo

10.8l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

11.2s

Vel. Máx.

180km/h

Peso

1525kg

Precio

31,132

Resumen técnico

Combustible

Gasolina

Transmisión

Automático 4v

Tracción

FWD

Plazas

6 / 5 puertas

Maletero

515 L

Depósito

75 L

Potencia

115 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima156 CV / 115 kW
Par máximo225 Nm
Tipo de combustibleGasolina
TransmisiónAutomático 4v

Capacidades

Depósito75 L
Maletero515 L

Análisis detallado del Toyota Previa 2.4 VVT-i Luna 8 plazas Aut. · 156 CV (2000)

Descripción general

El Toyota Previa de 2000, en su versión 2.4 VVT-i Luna de 8 plazas con transmisión automática, se presenta como un monovolumen espacioso y funcional, diseñado para familias que buscan comodidad y fiabilidad en sus viajes. Con un motor de gasolina de 156 CV y una caja automática de 4 velocidades, este vehículo promete una experiencia de conducción suave y sin complicaciones, ideal para el día a día y las escapadas familiares.

Experiencia de conducción

Al volante del Previa, la sensación predominante es de amplitud y confort. La posición de conducción elevada ofrece una excelente visibilidad, mientras que la suspensión, aunque no deportiva, filtra eficazmente las irregularidades del terreno, garantizando un viaje placentero para todos los ocupantes. El motor de 2.4 litros, con sus 156 CV, responde con solvencia, aunque sin grandes alardes, priorizando la suavidad en la entrega de potencia. La transmisión automática de 4 velocidades contribuye a una conducción relajada, ideal para trayectos largos o el tráfico urbano. Es un coche que invita a disfrutar del camino sin prisas, con la tranquilidad de saber que todos viajan cómodos y seguros.

Diseño y estética

El diseño exterior del Toyota Previa de 2000 es inconfundible, con sus líneas redondeadas y su silueta aerodinámica que le otorgan una presencia robusta y amigable. Las grandes superficies acristaladas no solo contribuyen a la luminosidad interior, sino que también realzan su carácter familiar. En el interior, la funcionalidad es la clave. El habitáculo está diseñado para maximizar el espacio y la versatilidad, con una configuración de 8 plazas que permite adaptar el coche a diversas necesidades. Los materiales, aunque no lujosos, son duraderos y están bien ajustados, transmitiendo una sensación de solidez y calidad típica de la marca.

Tecnología y características

En el año 2000, el Toyota Previa incorporaba una tecnología que priorizaba la fiabilidad y la comodidad. Su motor 2.4 VVT-i de gasolina, con 156 CV, destacaba por su sistema de distribución variable, que optimizaba la entrega de potencia y el consumo. La transmisión automática de 4 velocidades, aunque no la más avanzada para los estándares actuales, ofrecía un funcionamiento suave y sin tirones. En cuanto a seguridad, contaba con elementos esenciales para la época, como frenos de disco ventilados delanteros y discos traseros, garantizando una frenada eficaz. La dirección asistida y la suspensión bien calibrada contribuían a una conducción segura y predecible.

Competencia

En el segmento de los monovolúmenes de gran tamaño, el Toyota Previa de 2000 se enfrentaba a competidores como el Chrysler Voyager, el Renault Espace o el Volkswagen Sharan. Frente a ellos, el Previa destacaba por su reputación de fiabilidad mecánica, su amplio espacio interior y su diseño distintivo. Si bien algunos rivales podían ofrecer opciones de motorización más potentes o interiores con acabados más lujosos, el Previa se posicionaba como una opción equilibrada y práctica, ideal para quienes valoraban la durabilidad y la funcionalidad por encima de todo.

Conclusión

El Toyota Previa 2.4 VVT-i Luna de 2000 es un monovolumen que, a pesar del paso del tiempo, sigue siendo una opción interesante para quienes buscan un vehículo familiar espacioso, cómodo y, sobre todo, fiable. Su motor de gasolina, combinado con la transmisión automática, ofrece una experiencia de conducción relajada, perfecta para el día a día y los viajes largos. Su diseño atemporal y su interior versátil lo convierten en un compañero ideal para familias numerosas o para aquellos que necesitan un gran espacio de carga. Es un coche que cumple con creces su propósito, ofreciendo tranquilidad y funcionalidad en cada trayecto.