Especificaciones y análisis del Toyota RAV4
Potencia
150CV
Par
340Nm
Consumo
5.7l/100
Emisiones
150g/km
0-100 km/h
10s
Vel. Máx.
190km/h
Peso
1620kg
Precio
22,750€
Resumen técnico
Gasóleo
Manual 6v
FWD
5 / 5 puertas
450 L
60 L
110 kW
Actual
Especificaciones técnicas
Motor
Capacidades
Análisis detallado del Toyota RAV4 2.2 D-4D Active 4x2 · 150 CV (2009-2010)
Descripción general
El Toyota RAV4 2.2 D-4D Active 4x2 de 2009 es un SUV que combina la robustez de un todoterreno con la comodidad de un turismo. Con su motor diésel de 150 CV y tracción delantera, se presenta como una opción equilibrada para quienes buscan versatilidad y eficiencia en el día a día, sin renunciar a la capacidad de afrontar caminos menos transitados. Su diseño atemporal y la reputación de fiabilidad de Toyota lo convierten en un compañero de viaje digno de consideración.
Experiencia de conducción
Al volante del RAV4, la sensación es de control y seguridad. La posición de conducción elevada ofrece una excelente visibilidad, mientras que la suspensión, tipo McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, filtra eficazmente las irregularidades del terreno, proporcionando un confort notable. El motor diésel de 150 CV entrega su potencia de forma lineal y contundente, con un par motor de 340 Nm disponible desde las 2000 rpm, lo que facilita los adelantamientos y la conducción en carretera. La dirección asistida eléctrica es precisa y la caja de cambios manual de 6 velocidades permite un manejo ágil y eficiente. Aunque no es un deportivo, su aceleración de 0 a 100 km/h en 10 segundos y su velocidad máxima de 190 km/h son más que suficientes para la mayoría de las situaciones. El consumo combinado de 5.7 l/100km es un punto a favor para su economía.
Diseño y estética
El diseño del Toyota RAV4 de 2009 es funcional y atractivo, con líneas que evocan robustez y aventura. Sus dimensiones, con 4415 mm de largo, 1815 mm de ancho y 1720 mm de alto, le otorgan una presencia imponente en la carretera. Las llantas de 17 pulgadas con neumáticos 225/65 R17 complementan su estética SUV. En el interior, el habitáculo es espacioso y bien distribuido, con capacidad para cinco ocupantes y un maletero de 450 litros, ampliable para ofrecer aún más versatilidad. Los materiales utilizados, aunque no lujosos, son duraderos y están bien ajustados, transmitiendo una sensación de calidad y resistencia al paso del tiempo. La estética general es coherente con su propósito de vehículo familiar y aventurero.
Tecnología y características
En el apartado tecnológico, el RAV4 2.2 D-4D Active 4x2 de 2009 incorpora soluciones prácticas y eficientes. Su motor diésel de 2.2 litros, con inyección directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercooler, es un ejemplo de ingeniería avanzada para la época, ofreciendo un equilibrio entre rendimiento y consumo. La dirección asistida eléctrica contribuye a una conducción más cómoda y eficiente. Aunque no cuenta con las últimas innovaciones en conectividad o asistentes a la conducción que vemos hoy en día, su equipamiento se centra en lo esencial para una experiencia de conducción segura y agradable. Los frenos de disco ventilados delanteros y de disco traseros garantizan una frenada eficaz y segura.
Competencia
En el segmento de los SUV compactos de su época, el Toyota RAV4 2.2 D-4D Active 4x2 se enfrentaba a competidores como el Honda CR-V, el Nissan Qashqai, el Volkswagen Tiguan o el Ford Kuga. Cada uno con sus propias fortalezas, el RAV4 destacaba por su reputación de fiabilidad, su motor diésel eficiente y su equilibrio entre confort y capacidad off-road ligera. Su tracción delantera lo posicionaba como una opción más orientada al asfalto que sus hermanos 4x4, pero sin perder la esencia aventurera que se espera de un SUV.
Conclusión
El Toyota RAV4 2.2 D-4D Active 4x2 de 2009 es un vehículo que, a pesar de los años, sigue siendo una opción muy interesante en el mercado de segunda mano. Su combinación de un motor diésel potente y eficiente, un diseño robusto y un interior espacioso lo convierten en un coche versátil para el día a día y para escapadas. La fiabilidad inherente a la marca Toyota es un valor añadido que aporta tranquilidad a sus propietarios. Es un SUV que cumple con creces las expectativas de quienes buscan un compañero de viaje duradero y capaz.




