Volkswagen Bora Highline 1.9 TDI 130 CV Tiptronic (2001-2005)

1999
Gasóleo
FWD
Automático 5v
Volkswagen Bora - Vista 1
Volkswagen Bora - Vista 2
Volkswagen Bora - Vista 3
Volkswagen Bora - Vista 4

Especificaciones y análisis del Volkswagen Bora

Potencia

131CV

Par

310Nm

Consumo

6.5l/100

Emisiones

-g/km

0-100 km/h

10.9s

Vel. Máx.

202km/h

Peso

1352kg

Precio

27,980

Resumen técnico

Combustible

Gasóleo

Transmisión

Automático 5v

Tracción

FWD

Plazas

5 / 4 puertas

Maletero

455 L

Depósito

55 L

Potencia

96 kW

Estado

Actual

Especificaciones técnicas

Motor

Potencia máxima131 CV / 96 kW
Par máximo310 Nm
Tipo de combustibleGasóleo
TransmisiónAutomático 5v

Capacidades

Depósito55 L
Maletero455 L

Análisis detallado del Volkswagen Bora Highline 1.9 TDI 130 CV Tiptronic (2001-2005)

Descripción general

El Volkswagen Bora Highline 1.9 TDI de 130 CV con cambio Tiptronic, lanzado entre 2001 y 2005, se presenta como una berlina compacta que buscaba combinar la sobriedad y la calidad de Volkswagen con un toque de distinción. Con su motor diésel de inyección directa y turbo, prometía un equilibrio entre prestaciones y eficiencia, ideal para quienes buscaban un coche fiable y cómodo para el día a día y los viajes largos.

Experiencia de conducción

Al volante del Bora 1.9 TDI, la sensación es de solidez y aplomo. El motor de 130 CV, con su generoso par de 310 Nm disponible desde bajas revoluciones, ofrece una respuesta contundente y una capacidad de recuperación notable, haciendo que los adelantamientos sean seguros y la conducción en carretera, placentera. El cambio automático Tiptronic de 5 velocidades, aunque no es el más rápido, aporta suavidad y confort, especialmente en el tráfico urbano. La suspensión, tipo McPherson delante y de rueda tirada con elemento torsional detrás, filtra bien las irregularidades del terreno, proporcionando un buen compromiso entre confort y estabilidad. La dirección de cremallera, aunque carece de asistencia variable, transmite una buena sensación de control. En general, es un coche que invita a la calma, pero que responde con energía cuando se le exige.

Diseño y estética

El diseño del Volkswagen Bora es un reflejo de la filosofía de la marca a finales de los 90 y principios de los 2000: líneas limpias, funcionales y atemporales. La carrocería de 4 puertas, con sus 4376 mm de longitud, 1735 mm de anchura y 1446 mm de altura, proyecta una imagen de berlina clásica y elegante. Los faros delanteros, de diseño sencillo pero efectivo, se integran armoniosamente con la parrilla. En el interior, la sobriedad es la tónica dominante, con un salpicadero bien organizado y materiales de buena calidad que resisten bien el paso del tiempo. Aunque no es un diseño que busque la espectacularidad, su funcionalidad y la sensación de robustez son sus principales bazas.

Tecnología y características

En el corazón tecnológico del Bora Highline 1.9 TDI encontramos un motor diésel de 1896 cc con inyección directa por bomba inyector, turbo de geometría variable e intercooler, una configuración que en su momento representaba la vanguardia en motores diésel de Volkswagen. Este propulsor de 4 cilindros y 2 válvulas por cilindro entregaba 131 CV a 4000 rpm y un par máximo de 310 Nm a 1900 rpm, cifras que le permitían alcanzar los 202 km/h y acelerar de 0 a 100 km/h en 10.9 segundos. El consumo combinado homologado era de 6.5 l/100km, una cifra muy competitiva para la época. La transmisión automática Tiptronic de 5 velocidades ofrecía la posibilidad de un manejo secuencial, añadiendo un plus de control al conductor. En cuanto a la seguridad, contaba con frenos de disco ventilados delante y discos macizos detrás, y estabilizadoras en ambos ejes para mejorar el comportamiento dinámico.

Competencia

En su segmento, el Volkswagen Bora Highline 1.9 TDI se enfrentaba a una dura competencia. Modelos como el Opel Astra Sedán, el Ford Focus Sedán, el Renault Mégane Classic o el Peugeot 307 Sedán eran sus principales contendientes. Frente a ellos, el Bora destacaba por la reputación de fiabilidad de su motor TDI, la calidad de sus acabados interiores y una imagen de marca más premium. Aunque algunos rivales podían ofrecer diseños más atrevidos o equipamientos más tecnológicos, el Bora se posicionaba como una opción más conservadora pero segura, valorada por su durabilidad y su buen valor de reventa.

Conclusión

El Volkswagen Bora Highline 1.9 TDI 130 CV Tiptronic es un coche que, a pesar de los años, sigue siendo una opción interesante para quienes buscan una berlina compacta, robusta y con un motor diésel de probada eficacia. Su diseño atemporal, la calidad de sus materiales y su comportamiento en carretera lo convierten en un compañero de viaje fiable y confortable. Aunque su tecnología pueda parecer algo anticuada para los estándares actuales, su mecánica sencilla y duradera, junto con un consumo contenido, lo hacen atractivo como vehículo de segunda mano. Es un coche que cumple con creces su función, ofreciendo una experiencia de conducción sólida y sin sorpresas.